Louis Tomlinson con padres alfas pura sangre y tres hermanos, es el más pequeño y el primer hombre omega después 500 años.
Su manada decide darle la espalda ya que el ser un omega varón es una aberración por lo que al quedarse sin hogar y con las am...
Hoy, me proclamo liberada de esas cadenas que me ataban a ti, te amaba, no hay duda de eso, pero amo más a mis hijos, y por ellos lo doy todo.
Llevar tu marca ya no me hace sentir como antes, ya no es sinónimo de orgullo. Me siento tan destrozada, la persona que más amaba, mi alma gemela, el hombre con el cual pasaría mi vida eterna, cometería un acto inhumano hacia mi persona. No fuiste capaz de mostrar simpatía a mi sentir, todo para ti se volvió un acto de honor.
Por lo que hoy estoy renunciando a ella.
Puedo morir en el intento, pero voy a demostrar que puedo con esto y más.
Eres libre de buscar a alguien más, y no te preocupes de tus pecados, le he pedido al Karma que no te los cobrara, como último gesto de amor.
—Jay Deakin
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Año 1956 - Actualidad.
La pelea del día anterior sin duda alguna había sido la más intensa que tuvo en años después de lo ocurrido en aquel entonces, y a su parecer, de lo más estúpida.
No entendí porque su hijo de un día para otro quería saber de ese hombre y porque teniendo la vida tan feliz y plena que llevaban ahí dentro de los muros quería salir. Sin duda alguna, su parte racional quería que hiciera lo correcto, pero no quería hacer sufrir a su cachorro, ¿Como le explicaría que toda su manada, la gente que se supone era su familia, lo aborrecía?
Lo hacían llamar "demonio".
Que lo acusaban de cosas inhumanas solo por el simple hecho de existir, y que además que quien se supone debía de protegerlo de todos esos actos, el hombre que debía de amarlo y darlo todo por él.
Era su padre.
Y la gran cereza del pastel... estaba vivo, gracias a los enemigos de su raza.
Estaba tan desesperada, realmente no sabía que decisión tomar.
El malestar en su pecho le indicaba que había actuado de mal manera, no debió de haberle gritado, ni mucho menos debió de amenazarlo con quitarle su libertad, aun si lo único que quería era protegerlo.
¿Debería de ser juzgada por eso?
Tal vez no fue la manera, y lo mejor sería decir la verdad, pero tenía tanto miedo, no por ella. Si no por su cachorrito, su bebé, era demasiado inocente para saber y tener una vida más allá de los muros que lo protegían.
Tal vez lo mejor sería pedirle ayuda al rey, el sabría qué hacer, podría ayudarle a decirle la verdad sin que sea tan traumática y creíble... o que este olvidara el tema y hacer que todo sea como antes.
