Capitulo 1

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-¿Quieres dejar de burlarte de mí?- Verónica frunció el ceño y los labios al mismo tiempo.
-No me burlo, pero me pareces muy tierna.- Dije mientras ella dejaba caer su cuerpo, recargandose en la mohosa pared de madera vieja, pegandose en la cabeza de manera brusca, lo que ocasionó que cerrara sus ojos con fuerza. Me reí con todo el poder de mi pulmón. Cuando volví mi mirada hacia ella, ví como se abalanzaba sobre mi.
-¡Hety, tranquila Vero!- Pero ya la tenia encima de mí. Y sus ojos sobre los míos. Mis ojos se desviaron un segundo, y se posaron en sus labios, en sus bonitos y rosados labios.Un silencio se apoderó de la cabaña. Mis pensamientos gritaban, casi tan fuerte como el silencio. Quería besarla. Quería besarla con tantas ganas que mi sangre se volvío fria, quería besar sus bonitos labios y abrazarla por la cintura, y olvidarlo todo. Olvidar todo lo que pudiera pasar afuera de esos 2 metros cuadrados húmedos y llenos de moho. Quería olvidar el resto del mundo por que en esa cabaña estábamos sólo ella y yo. Mi mano inconsientemente abrió camino hasta su mejilla. Alcancé su linda , suave, tibia, piel, y la pobre muchacha dió un respingo. Maldición.
-Que frío eres- Susurra, su voz dulce me causa escalofríos, ella también levanta su mano, hasta donde la mía estaba, y la sostiene, pegada a su piel.
-Yo soy el frío.
-Pues yo soy el fuego.- Y en ese momento supe de lo que estaba hablando, por que la vi, vi esa llamarada de fuego tibio en sus pupilas color miel, vi la calidez de sus sonrisas, escuché el calor que tenia su voz, y detrás de esas rosadas mejillas, un fuego intensó, que mantenia mi frío distraído.
Volvío a dejarse caer como peso muerto sobre mií. Acomodó su cabeza en mi hombro, y cerro sus ojitos. Comenzó a respirar lentamente, con calma , y mientras, yo la veía descansar. Y analicé cada pequeñez de su rostro, sus pestañas que se deslizaban y temblaban, su nariz, que seguía una delicada linea curveada, y sus labios, que ya he dicho muchas veces lo bonitos y rosados que son.
"Qué bonita eres. Quisiera saber lo que piensas, quisiera saber si es en mí. Me gusta pensar, imaginar, que escuchas mi voz mientras duermes, y que tal vez, sueñas con una imagen mia, y que ese "yo" de tus sueños, es mucho mejor que el que esta frente a ti, viendote dormir."
-¿Qué haces?.- Y de nuevo, su dulce, y tibia voz me da escalofríos yacaba con mis pensamientos.
-Te veo dormir.
-¿Porqué no me acompañas?- Sus ojitos miraban hacia arriba, y encontraban los míos, parpadeó un par de veces y me acerqué a su frente, donde deposité un bonito beso.
-Yo no duermo.
-No puedes no dormir, es anatomicamente imposible- Su voz chillona me causo aún más ternura que toda la escena anterior. -Todos dormimos.
Sonreí, trateé de hacerla sentir bien. Cerré mis ojos y la imité, volvió a mi pecho con los ojos cerrados y con esa sonrisa juguetendo en la comisura de sus labios.
Ahora, ella duerme sola, y cada noche, el frío se apodera de mí y dee ella, y la llamarada de fuego que ella mantenía viva, se apagó. Me dejo. Yo la deje ir. Pero no quiero irme. Quiero quedarme. Y no me iré

Del Otro Lado del CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora