Una Simple Y Débil Humana

Capitulo 19

La chica no se movía. Su pecho subía y bajaba debido a su respiración. Su mirada fija en mi, pude observar sus ojos verdes esmeraldas. Tome la manija del auto para bajar,pero el sonido de los seguros me lo evito.

- ¿Qué crees que haces?.- Dijo Connor  sin mirarme, su vista estaba en esa misteriosa chica.

- Salir para ver que es lo que quiere.

- A caso estás loca, puede ser peligrosa. No sabemos que es.

- Y no lo averiguaremos si no hablamos con ella.- Dije como si fuera lo más normal.

- No, tú espera aquí yo bajaré.- Tomó una pistola de la guantera del coche.

- ¿Qué haces? La asustarás.

- Es por protección.

- Si es un lobo, o vampiro eso no servirá.- El me miró.

- Esa cosa no es un lobo, ni un vampiro.- Aseguró.

Quito el seguro y bajo. La chica no se movió, ni lo miró. Solo me miraba a mí. Ella no hablaría con el estaba segura, me buscaba a mí. Como pude me lance quería quitar los seguros y poder salir.

- De verdad que eres necia.- Connor protestó y la chica caminó para acercarse.- No te muevas.

Connor apuntó a la chica con el arma, pero a ella no le importó, con su mano tocó mi mejilla y la frialdad que emanaba me erizó  la piel.

- Arconte.- Ella bajo la cabeza, como si me mostrara respeto.

- ¿Me conoces?.- Pregunté  ella me miró.

- No pero sé lo que eres. Todo el reino habla de ti.- Su voz era tan delicada y dulce.

- ¿Que eres?.- Ella miró a Connor como si apenas se diera cuenta de su presencia.

- No hablo con demonios.- Dijo de mala manera.

- Eso es insultante.- Connor fingió ofenderse.

- ¿Por qué me buscaste?.

- Ponernos a tus ordenes.- Entre cerre los ojos debido a la sorpresa en su respuesta.- Somos seres pacíficos, pero lucharemos a tu lado para garantizar tu Victoria.

Connor y yo compartimos una mirada de curiosidad ante sus palabras. Entonces me animé a hacer la pregunta.

- ¿Qué eres?.

- Soy un Hada.

Eso si me descolocó, ¿Un hada? Cómo en los cuentos, ¿era eso cierto? ¿Todas las historias serían ciertas?
Como podían existir todos estos seres y la mayoría de los humanos no sabíamos de su existencia, porque se mantenían ocultos.

- ¿Un hada como Tinker Bell?.- Dije lo primero que se me vino a la mente. Ella arrugó ligeramente el rostro.

- Eso es insultante.- Connor sonrio ante su respuesta.

- Ahora sabes lo que se siente.- Se burló.

- Yo no dije nada que no fuera verdad, eres un demonio. En cambio yo no me parezco en nada a esa caricatura.- Ella me miró.- No nos gusta dañar a nadie, pero si es para protegernos, somos letales. No lo olvides.

Ella lo dijo como advertencia a Connor, el levantó las manos simulando rendirse.

- Eso es todo.- Me tendió un objeto parecido a un silbato con una cadena.- Pontelo y hazlo sonar cuando necesites ayuda.

Lo tomé y lo pasé por mi cabeza para dejarlo colgar en mi cuello. Ella asintió y sin más desapareció ante nosotros convirtiéndose en una luz blanca pequeña, como una luciérnaga, solo que está brillaba aún con la luz del día.
Connor y yo volvimos al auto.