EL VACÍO (KakaObi)

★Parte 2★

«Deseacuerdo» 

Kakashi Hatake

¿Alguna vez te has preguntado cómo es el trabajo de un Dios?

Cada uno tiene una obligación, y la mía es crear Vida y Paz. La Sabiduría me fue otorgada cuando mi padre cayó, obtuve su poder y ahora debo esparcir la Sabiduría por el mundo en su lugar.

Los demás Dioses suelen reunirse para mantenerse informados sobre cada suceso que ocurra en la tierra. Si no mal recuerdo la próxima reunión será hoy.

— ¿Uh? — Observé el suelo saliendo de mis pensamientos y noté aquel rastro de oscuridad que había tomado la vida de mis queridos árboles frutales— Ugh.

Seguí el rastro hasta finalmente encontrar al responsable.

El Dios de la Guerra y el Inframundo, veía con atención como aquel depredador cazaba a su presa. Cómo era costumbre, Obito siempre salía del Inframundo y observaba la vida, cada día salía sin falta pese a que tenía prohibido entrar a mi territorio.

Su presencia no me molestaba en absoluto, lo que me fastidiaba era aquella aura negra que se llevaba todo consigo.

Obito fue donde antes había un ciervo y a unos pocos centímetros suyos lo miró. Escenas como esas hacían que realmente me sintiera pésimo.

— La Vida también puede ser cruel ¿No es así pequeño? — Obito se arrodilló y con ambas manos tomo el alma del pequeño animal— ¿Necesitas algo? — sonrió.

¿Acaso estaba... Hablando con esa esfera de luz? Sé que su trabajo es tomar el alma y guiarla dependiendo de la cantidad de pecados y buenas acciones pero no sabía que podía escucharlas.

— ¿Estás... Feliz? — Habló— oh... Ya veo... — Se puso de pie y con el alma en mano la levantó hacia el cielo— ten un buen viaje...

La soltó y esta floto hacia su destino, desintegrándose en el camino.

— No lo entiendo, aquel León... Ah... No importa — Miró el cadáver y retrocedió— Kakashi se enojará si me ve aquí.

— En efecto — Dije saliendo del bosque— ¿Recuerdas las reglas? Todo lugar con vida abundante está claramente restringida para ti — Miré el cadáver y pretendí no saber— ¿Haz sido víctima de la cadena alimenticia?

— ¿Eh? Oh... Supongo que sí — Claramente Obito estaba evitando el contacto visual conmigo— me iré de inmediato, yo... No debería estar aquí.

— Espera, esto es algo que debe pasar — Solté sin más evitando su partida— es el instinto de supervivencia.

— ...

— Sobre lo de ayer — Debería disculparme, fui muy grosero al culparlo ayer, yo estaba bastante molesto— desquité mi cólera contigo y sé que eso es incorrecto, por eso me disculpo.

— Yo tambien fui grosero... te dije amargado — Soltó una risa— oh... — cubrió su boca.

— ¿Eh? ¿Ocurre algo? — Pregunté algo atontado por su risa y el negó con la cabeza.

— Para nada, es solo... — El suelo se abrió sorprendiendo a ambos.

Él va a irse.

— Debo volver al Infierno — Me miró sin expresión alguna— estoy seguro que tienes deberes de los cuales ocuparte.

— Si... Pero creí que podríamos...

— Discúlpame — Fué hacia la entrada al Infierno y pude distinguir a uno de sus lacayos— ¿Qué sucede Zetsu?