Boried Secrets.

Capítulo 32 | No somos nada.

–¿Estas segura de lo que nos estas diciendo? Lo que estas diciendo suena grave –dice mi amiga Lisa mirándome sorprendida por todo lo que le he dicho.

Pasaron dos meses que no hacíamos esto y hablo exclusivamente de sentarnos y hablar de lo que más nos encantaba de estar juntas y lo menos que nos gustaba de las personas siempre coincidiendo en todo sin importar qué, realmente la extrañaba y demasiado. Pero ella tiene una vida y yo tengo la mía, en algún momento iba a pasar esto, recuerdo que tenía una mejor amiga en secundaria salimos de secundaria y nunca supe más de ella, para mi fue difícil al principio, sabía todo mis secretos y miedo pero lo fui superando. Así fue como aprendí algo... Las personas te olvidan cuanto menos lo esperes.

–¿Y que le dijiste tú? –Pregunta esta vez alex, el cual se volvió como un mejor amigo para mi en tan poco tiempo. Sin hablar de Zac.. El para  mi cambio y para lograr aceptarlo tuve que cambiar yo a mi manera.

–Chicos, yo realmente no se que hacer... Mi vida cambio en unos segundos, primero lo de mi padre, después el enfermo que me sigue y me manda cartas con fotos mías riendo o con personas. Me estoy volviendo loca,ya no se que hacer–Digo pasando mi mano por mi cabello, llega un momento en el que te sientes hundido y no sabes como salir, justamente este es el momento.

–Tranquila, estaremos aquí para tí, Beth. No te preocupes por ello, y lo de Logan me parece muy  injusto y egoísta de su parte que no te deje salir a ningún lado. Eres una persona libre, que puede salir, disfrutar, eres joven y no puedes quedarte todo el día en una casa porque alguien tan injusto lo dice–Habla Alex y esta vez lo interrumpe Lisa.

–a mi me parece que Logan hace lo correcto, la esta cuidando. No hace nada malo, solo ponte en su zapatos por un momento, y explicanos ¿Si algun enfermo psicópata te esta siguiendo que harías tu? –Dice Lisa mirando a Alex, el por su parte niega repetidas de veces y yo suspiro.

–A mi me parece muy injusto, ella tiene una vida, solo una, que debe aprovecharla. Solo tiene 18 jodidos años, no tiene cuarenta, ella merece divertirse, y salir con sus amigos y no quedarse en su casa por miedo a que la siga un enfermo.

–Chicos...

–No lo sé, Alex. Debes entender que las personas cuidamos cuando queremos a una persona y esta en peligro–Dice Lisa. Yo vuelvo a suspirar, será una tarde larga.

–No, pero ella aún sigue en la etapa de disfrutar, vivir la vida, comer, reir. Y no quedarse en su cama pensando todo el estúpido día sobre el enfermo que la sigue.

–Chicos.. –Repito de nuevo y suspiro cuando veo que no me paran en lo absoluto.

–Si, pero si estas en casa también puedes disfrutar con tus amigos, llamarlos y que ellos compartan contigo –Le sale con la contraria Lisa y yo ya estoy harta.

–¡Chicos! –Grito ellos me miran aturdidos y me hacen mala cara–Dejen al jodido enfermo en paz, ya se que me sigue, dejen de hablar de eso. Joder tenganme compasión y cierren la boca por un minuto.

–Lo siento–Habla Lisa mordiendo sus labio para contener una risa.

Al lado de ella veo a Alex rodar los ojos y tomar de su batido de fresa, ruedo mis ojos.

–¿Algo que tengas que decir, Alex? –Digo.

–En realidad no–Dice sonriendo, respiro profundamente para contener mis ganas de lanzarle la silla que tengo al lado de mi, lo miro mal–Mierda, lo siento. ¿Ya feliz?.

Sonrió y me levanto de mi asiento para llegar a ellos.

–Dios, como los extrañe ineptos–Digo abrazandolos Alex sigue mi abrazo agusto y Lisa chilla, son tan diferente.