SEXY

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"... Primero fueron caricias de niño bueno contarte que eras mi sueño, y llevarte de la mano y luego, esas caricias se nos subieron de tono, entre besos nos tocamos se hizo tarde y aquí estamos..."

Fue la segunda vez que la invitaba a salir, no podía decir que ya había muchísima confianza entre los dos pero al menos ya hablamos mucho más.

Ella se presento impecable como siempre pero sin perder su estilo tan peculiar; pantalón ajustado (como amaba verla, ya que resaltaba sus bellas piernas), una blusa azul de manga que le llegaba a los codos, su cabello suelto y rizado que danzaba  con el compás del viento y un maquillaje que solo resaltaba más su belleza.

La lleve a un parque que no quedaba muy lejos, así que el recorrido sería mas rápido y podría tener más tiempo a su lado.

Lo que me sorprendió de ella es que le incomodaba demasiado que la viera. Pero es que es imposible. Yo no tengo la culpa de que sea tan hermosa ni ella la tiene pero...

La ropa le quedaba a la perfección y por un momento tenia el impulso de tocarla, quería abrazarla o tan solo poder besarle la mano o yo que se...solo quería tener algún contacto con ella.

De un momento a otro, decidimos cambiar de lugar para sentirnos mas cómodos, así que nos fuimos a aparragar en una pared blanca, en la oscuridad. Por un impulso entrelaze mis dedos con los de ella, y tiernamente le roze la mano con mis labios, poco a poco el contacto se hacia más y más placentero, fue  entonces cuando...ella quería irse.

Al subir al carro no arranque al instante ya que quería dar un paso más en esa noche.

-te puedo besar- era una pregunta muy rara para una segunda cita?

Ella no dijo nada pero tampoco dijo que no, así que lentamente me acerque, y mientras que con una mano le agarraba la cintura con la otra le tomaba el mentón para que subiera la mirada y de esa manera poder besarla.

Sin previo aviso nuestros labios ya estaban unidos en un dulce y placentero beso que podría haber sacado en ese momento mi lado perverso algo que por supuesto pude controlar, mi mano se negaba a seguir rozando tan solo su cintura, quería tocarla, sentir cada parte de su cuerpo. Mientras más tardaba el beso más se hacia profundo y eso causaba una muy fuerte tentación. Ella se apartó con la respiración entre cortada al igual que la mía. Pidió irse y pues ni modo que me negara o que la llevara en un lugar más intimo sin su consentimiento.

Arranque y mientras todas las casas pasaban a toda velocidad la niña lloraba sin que yo supiera la razón.

Llegamos al lugar en donde ella se tenía que bajar y casi corro para abrirle la puerta, ella salió rozando mi cuerpo y sabía que su intensión era despedirse y salir corriendo, pero eso no se lo permitiría porque yo no quiero que este triste por mi culpa, se iba a despedir de mi pero heche la cabeza para atrás intentando negarle la despedida. La agarre con ambas manos de la cintura y busque su mirada con la mía, logro rozarme la mejilla con la suya y en ese momento le tome el rostro con mi mano y la aferre en ese beso que sabía que le causaba tanto placer como a mi, su bello y perfumado cabello se cruzaba en mis dedos y con cada ráfaga de viento que se hacia mas doloroso por la heladez su beso era más romántico y dulce que cualquier caramelo que pudiera existir. La nena hermosa se safo de mi inocente opresión y logró marcharse, mientras que me dejo con una pequeña preocupación y una sonrisa en los labios.

APOCALIPSIS Libro #3: "LAS VENAS PERFORADAS DE CHAR"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora