I know all your secrets. ~Reddie~

All your secrets.

Stan cerró la puerta de la entrada luego de que Eddie y Richie se fueran de allí, la verdad es ni siquiera lo pensaron mucho, simplemente trajeron a sus amigos al único lugar donde sabían que no iban a molestarlos ni preocuparse por los golpes que Richie tenía.

Dejó escapar un suspiro cansando antes de darse la vuelta y apoyarse contra la puerta mirando hacia el segundo piso, la realidad era que Bill estaba viviendo prácticamente solo. Podía apostar por sus amigos que lo único que hacían los padres de Bill era la comida y a veces ni eso; el mismo estuvo presente las veces que cocino en silencio, como si eso fuera lo único que conociera, él estuvo las veces que lo vio lavar sus cortes y limpiar sus propias heridas, las veces que le vio enfermar y las veces que ni siquiera tenía fuerzas para mantenerse en pie.

Lo peor de todo es que el matrimonio de los Denbrough no solo habían perdido a Georgi en el proceso, se llevaron a su novio entre las piernas y ni siquiera sabía realmente como es que aún se mantenía en pie, de ser él, la historia hubiera sido muy diferente desde hace mucho tiempo.

Negando levemente -intentando alejar todo tipo de pensamientos negativos- se alejó lo suficiente de la puerta para comenzar a caminar en dirección al cuarto de Bill, ya ni siquiera recordaba las veces que había estado en esa casa que incluso parte de su ropa había comenzado a rondar las lavadas que hacía Bill algunas veces a la semana. Sin tan solo las cosas fueran diferentes.

Probablemente de haber sido Bill quien hubiera muerto las cosas hubieran sido completamente diferentes -estaba completamente seguro de eso- no podía ni siquiera pensar como es que los padres de Bill no se daban cuenta que con su mutismo e ignorancia lo único que lograban era perder cada vez más al increíble hijo que tenían, quizá les faltaba un empujón para darse cuenta que aún tenían otro hijo con ellos y que por muy adolescente que fuera, los necesitaba más que nunca.

-¿Bill?-preguntó entrando al cuarto para dejar escapar una pequeña sonrisa mientras se acercaba. Observó con una silenciosa satisfacción la tasa que le había preparado a Bill hace poco completamente vacía, estaba seguro que de esperar a este hubiera demorado muchas horas siquiera calmarse y otras muchas más poder dormir asique le preguntó a su mamá por algún té que le ayudara a relajar.

Acomodó a Bill lo suficiente para poder quitarle la ropa -dejándolo solo en ropa interior- para poder ponerle la pijama, estaba seguro que aunque hubiera un terremoto Bill no despertaría y era mejor así, estaba cansado de verlo con feas ojeras, puede que...quizá con mucho esfuerzo y amor de sus amigos Bill volvería a ser el mismo de antes.

Paso despacio una mano por debajo de las rodillas y otra por la espalda teniendo cuidado al levantarlo para apoyarlo contra su propio pecho, era realmente tierno verlo así, verlo dormir tranquilamente sin que nada ni nadie lo impidiera. Con sumo cuidado lo acomodó en la cama arropándolo en el proceso para repetir lo mismo con él metiéndose a la cama también mientras le abrazaba por la cintura.

-Estas bien-susurró contra su cuello-estamos bien-

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Richie se dejó caer a la cama completamente cansado, le dolía la cabeza y le palpitaba el brazo bajo el yeso, estaba seguro que iba a morir en cualquier momento porque se sentía del asco -ni siquiera cuando enfermaba se sentía así- podía apostar que la cena había sido aceptable solo porque Eddie había conversado primero con su madre aunque ni siquiera así pudo evitar pasar por la revisión de ella.

-Tu madre me dio estas pastillas-

Entreabrió los ojos y frunció el ceño ligeramente intentando ver que mierda tenía enfrente pero no, se había quitado los lentes poco antes de dejarse caer en la cama asique lo único que podía ver era una mancha -sexy si era Eddie- con lo que parecía ser algo en su dirección, aunque también podían ser imaginaciones suyas y Eddie estaba por otro lado.