For Your Own Good [Noremma]

II

Norman creía que aquella niña de cabellos alborotados y de radiante sonrisa jamas la iba a volver a ver(según el no tenia motivos para hacerlo), sobre todo porque justo después de ella se fuera le agarro una fuerte fiebre que no le permitió salir por una semana entera de su habitación.

Ese día no había enfermado por lo cual estaba muy bien de salud y ya podía salir.

Se estaba alistando para recibir a unos amigos de sus padres junto con ellos, pero, valla sorpresa, quien diría que aquellos amigos resultaron ser los padres de la mismísima Emma que se encontraba ahora encima de el por haberse abalanzado sobre el gritando su nombre a todo pulmón. 

—Emma— hablo el padre de la pelirroja, diciendo su nombre como un regaño por haber sido irrespetuosa.

La aludida de inmediato se levanto nerviosa ayudando al menor de igual forma a levantarse.

—Con que ya se conocen.— sonrió James, presenciado como las mejillas de su hijo se teñían de un tenue rojo.

—Norman, por que no mejor llevas a Emma a tu habitación. Les llamaremos en cuanto este la cena— dijo la mujer albina, animando a su hijo y a la niña a que hicieran caso.

—¡Si! Vamos Norman— tomo de la mano al menor para después salir corriendo por el pasillo.