For Your Own Good [Noremma]

V

Las incontables horas pasan, su pie golpetea con fuerza contra el piso, su desespero es palpable y temeroso. El moreno no ha salido y el amanecer ha llegado. Por mas que morfeo le pide cerrar los ojos se niega a hacerlo, no tendrá un momento de paz con nadie ni consigo misma hasta que no vea la puerta de Norman ser abierta y con buenas noticias.

Otra hora mas pasa y Gillian llega por quinta vez a darle una taza con cafe en toda la noche, odia el café, pero era el único liquido lo suficientemente amargo para mantenerla despierta.

-Deberías regresar a la mansión, darte una ducha, desayunar como es debido y regresar- Sugiere la rubia, haciendo el intento para que mínimo la pelirroja se aparte de la puerta en la que ha estado parada toda la noche sin moverse.

-No lo hare.

Ya se esperaba esa respuesta, era la misma que había recibido en toda la noche, al menos no perdía nada con intentarlo. Tras unos minutos mas de silencio la puerta por fin se abrió, dejando ver al joven moreno que parecía cansado pero con una sonrisa de satisfacción en el rostro.

-El veneno esta siendo eliminado poco a poco. El antídoto funciono al principio pero hubo unas complicaciones a causa de su salud algo deteriorada en respecto a sus pulmones por lo que tuve que crear otro para que no saliera mas dañado. Al final no fue impedimento para que se salvara.

-¡Que bien! ¡Le avisare a Cislo!- Dijo Gillian emocionada, levantándose de su asiento y salir corriendo.

-Gracias. Le aseguro que te recompensaran bien por esto.-Inclino un poco la cabeza hacia enfrente agradeciendo. Pese a que solo hacia eso tenia muchas ganas de abrazarlo y llenarle de besos. Su gratitud era tanta que siente que lo monetario y material serian poca cosa.

-Emma ¿podrías dejar las formalidades? Somos hermanos- Dijo Phil con una pequeña sonrisa en su rostro y acercarse a Emma para abrazarla. La había extrañado mucho, hacia ya cuatro años que no la había visto por irse al extranjero para seguir con su aprendizaje que había quedado truncado después de la muerte de sus padres, pero por aprendizaje no solo se refería a lo académico.

Desde niños tanto a Emma como a Phil se les entrenaba para distintos campos, como medicina, técnicas de combate, usar armas, crear armas, defensa personal, estrategia etc. Básicamente como un entrenamiento militar. A phil como prioridad se le dio especializarse en venenos, en crearlos y buscar un antídotos, mientras que a Emma se le priorizo en fuerza y combate.

Tras la muerte de sus padres el moreno no pudo terminar su entrenamiento, y al ser menor que Emma por casi cinco años y esta entrenando en ese entonces para convertirse en un digno Mayordomo para la familia de Ratri y servirle a Norman, se vio a la necesidad de ir con unos conocidos de su familia a la edad de 8 años, con un hombre de origen chino que le ayudo a terminar sus practicas. Y por fin tras cuatro años regreso a Londres.

Lo curioso es que nunca supo los motivos por los cuales sus padres le hacían tener dichos entrenamientos desde niños, y tras el incidente de la familia Ratri en la que murieron de igual forma sus padres, Emma había cambiado mucho, su personalidad hiperactiva y alegre despareció de un momento al otro y eso lo decía sin exagerar, pues un día después de incidente su comportamiento comenzó a ser distante y mas protector hacia Norman , convirtiéndose en una persona mas formal y fría, en la que su mente dejo las mariposas y flores por practicas de etiqueta y comportamiento.

Una Emma que no reconocía y a la cual parece haber muerto hace ya mucho tiempo.

-Lo se, es la costumbre- Correspondió al abrazo ligeramente temerosa. En cuanto lo logro sintió una parte de si regresar, igual lo había extrañado mucho.- ¿Puedo pasar a verlo?

-Anda- Se alejo.-Esta despierto y pidió verte.

-De nuevo, gracias.-Se despidió, entrando a la habitación y lo primero en apreciar es a Norman mirando el techo como si fuese lo mas interesante del mundo.- ¿Pidió verme?

-¿Mh?- Abandono su vista del techo blanco, para mirar a Emma y sonreirle.

¿Como demonios puede sonreír cuando hace unas horas estaba a punto de morir?

Porque se trataba de Emma

-Estoy bien, puedes ir a descansar.- Aseguro sin borrar su sonrisa.

-No lo hare.- Dijo decidida.

-Te conozco y a puesto a todo lo que quieras que te quedaste aquí toda la noche hasta que despertara.

-Si ya sabes eso deberías de saber que no me moveré de aquí hasta-

-Emma- Interrumpió, evitando el contacto visual y mirar a cualquier parte.- es una orden.

-Entendido.- Dio media vuelta, saliendo de la habitación en completo silencio y sin renegar nada.

Si su yo del pasado aun siguiera, capaz y habría hecho lo imposible para quedarse, regañando y diciendo una y mil cosas para quedarse ahí hasta que Norman se recuperara, igual que cuando eran niños, importándole poco que de igual forma terminara en cama. No va a negar estar molesta, pero Norman había dicho esas palabras, palabras que le enseñaron a nunca llevar la contraria.

-Oh, lo siento.

Miro a su lado, justo en donde su hombro estaba herido de bala y en donde justo había chocado con una enfermera.

-¿Estas bien? ¿te lastime?

Estaba tan enojada y preocupada que había olvidado por completo su herida. Auch.

-Estoy bien, no fue nada.-Respondió, ocultando la molestia del dolor en su rostro.

La enfermera se despidió de un asentamiento, siguiendo con su camino.

-Señorita Emma.-Miro al frente, esta vez sin ocultar su molestia por la persona que osaban en estorbar su camino. - Soy el detective Midorford y estoy aquí para hacerle unas preguntas a usted y al Conde Ratri respecto al incidente en la casa de la familia Will.-Ahora tenia que lidiar con la policía.

-¿Es nuevo? Jamas lo había visto por la comandancia.

-Soy detective privado.

-Ya se me hacia raro... ¿Quien lo mando?

-Barbara Will.

-Disculpe pero yo no pienso hablar nada sobre el tema a menos de que el conde me lo autorice. Con permiso- Rodeo al mayor, no tenia tiempo ni paciencia para lidiar con alguien.

-¿Oculta algo?- Dicha pregunta detuvo a Emma de su travesía.

-¿Ha escuchado el dicho de "la curiosidad mato al gato"?- Lo vio asentir- Pues tomeselo muy literal detective. Se lo vuelvo a repetir, no hablare del tema a menos de que el conde me lo autorice y con el debido respeto le voy a pedir que no vaya a molestarlo que se encuentra descansando. Me despido.- Dio un ligero asentamiento, dando media vuelta y salir del hospital.

Mientras tanto, el adulto solo veía salir a la joven, teniendo un pensamiento casi nostálgico.

Se parecen

En la entrada ya se encontraba Vicent, quien fue el anterior Mayordomo esperando por ella.

-Señorita Emma- Abrio la puerta del carruaje, permitiendo el paso a Emma a subir.

-Llévame a la mansión y comunícame con la familia Sid. Tenemos a un detective pisándonos los talones.

-Entendido.