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— Pues tía, pasa de él. Enróllate con otros hombres. Esa es mi visión del asunto. No vale la pena.

Tras bastantes minutos charlando sobre las diferentes perspectivas que cada una tenía, a Vero le picó el sueño y se marchó. Detrás de ella desfiló Jane y a su lado _____. Jane y ella dormirían juntas en la cama que había al lado de la litera de kian. Prefería eso a tener que soportar la desesperación de no poder estar con Zayn. Aquella situación acabaría al día siguiente a más tardar.

— ¿Se puede saber qué le has hecho? -dijo Liam retirando algunas cosas que había sobre la cama en la que dormiría

— La dejé plantada. Y sola.

Liam, lo miró serio.

— Me llamó varias veces durante esa noche pero yo no podía contestarle. Estaba ocupado haciendo algunas cosas.

— Eres muy poco inteligente.

— ¿Y qué quieres que yo le haga? He nacido así.

— Oh no. Me revienta que me digas eso. Las personas pueden cambiar para mal, pero también para bien.

— ¿Tú también me vas a reprochar? ¿Sabías que no sé lo que siento por ella?

Liam se metió en la cama por fin y se tapó.

— ¿Sabes alguna manera de averiguarlo? -Zayn necesitaba consejos- Porque no tengo ni la menor idea de qué hacer.

— No sé Zayn... ¿Podemos hablar mañana de esto? Ahora tengo sueño.

— Está bien, como lo prefieras.

Apagaron las luces y sobre las cinco de la mañana, a Zayn lo volvieron a despertar. Esta vez no eran voces, ni gritos, ni pisadas.

— Espera Liam, no me hagas eso...

— Shh baja la voz, vas a despertar a mi hermano.

— No me hagas cosquillas ahí.

Zayn oyó varios besos de fondo. Liam y Jane parecían estar divirtiéndose.

— ¿Se pueden ir a follar a otra parte? Por favor. Trato de dormir –se levantó de la cama de un salto y cogió el edredón para pasárselo por encima, salió del cuarto– Qué ganas tienen a estas horas joder. Se podían reservar para otro momento. Aunque si por mi fuera yo también estaría igual. Jodido Liam... -rió para sí.

Pasó por delante de la puerta de los niños y se asomó para ver cómo estaba _____. Dormida, por supuesto, y estaba destapada. Se moría por tocarla otra vez. Y esa parte trasera de su cuerpo no le ayudaba a matar los pensamientos. Dudó en entrar pero no lo resistió más. La llamó un par de veces pero estaba tan dormida que solo se limitaba a moverse. Posó su mano derecha en su vientre y descendió hasta ocultarla bajo sus bragas. No debía hacer eso porque si se despertaba no sabía lo que allí podía ocurrir. Pero no importó, sus ganas eran mas fuertes. _______ se movió y se le cortó la respiración al pensar que abriría los ojos. Lo pensó mejor y sacó su mano de aquel lugar. La miró durante unos segundos y después se fue. Era tan sexy al dormir. La curva de su espalda lo excitaba de tal manera que era casi imposible para de tener ideas bastante indecentes con ella.

— ____ ¿Podemos hablar un minuto? -ella lo miró de reojo- No voy a tardar mucho. Llevo toda la madrugada pensándolo.

Eran las once y media de la mañana y ____ se había preparado ya para irse a su casa. Aún quedaba el conductor, Liam, que seguía entre las sábanas.

— Está bien, dime lo que tengas que decirme pero que sea rápido.

— Eh, verás... Yo creo que no te veo como a alguien más.

— Si es eso olvídalo. Ya te he dicho que me has decepcionado. Mucho.

— No, no me entiendes. A ver cómo te digo... bueno, espera. Mejor te pregunto yo a tí algo.

— No deberías tener derecho a preguntarme nada.

— Ya te he dicho que lo siento Mierda!. Bebí. Y lo hice.

— Antes de beber piensa en las consecuencias. Piensa en la gente que está a tu lado y a la que realmente le importas.

Zayn la miró fijamente y le intentó coger la mano, pero ella la apartó antes.

— Yo no voy a ser más la que te vista. Lo he hablado con tu padre. Un día después de la cena hablé. No me puso pegas.

— Lo que no comprendo es que si tan poco te importo, te comportes así.

— Y encima no me escuchas, no has oído lo que acabo de decir. Zayn, en serio, no te preocupes. Ha estado bien esta pequeña aventura. Pero creo que si siguiéramos no sería lo mismo. Y no es por el mal gesto que tuviste.

— Lo sé. A mí me pasaría igual.

— Y yo siempre podré perdonarlo. Pero nunca olvidarlo.

— Joder ____, me estás haciendo un lío. Es como si me quisieras más de la cuenta.

— ¿Amor? –el asintió con miedo– Hacía ti jamás, métetelo en la cabeza. Tú estás hecho para ir de aquí para allá, con cuantas te apetezca. Pero yo no, ya te conté mi historia.

— Bueno, sí, cállate. No me cuentes el mismo rollo. Ya te he dicho que a mi parecer eres preciosa. No puedo hacer más. Y no te machaques con eso. Lo que aquí importa es otra cosa. ¿Somos amigos o no?

— Mis amigos no se olvidan de mí.

— La respuesta es no entonces.

— No creí que fueras tan inteligente. Cuídate ¿vale?

— ¿Y ese tal Noah?

Ella sonrió, haciéndole creer que le alegraba escuchar su nombre.

— Es mi amigo.

— Pero si le conoces de hace cuatro días. Luego me dices a mí.

— La diferencia entre tú y yo está en que yo no me acuesto con la primera cosa con pene que me encuentro. Tú sí te acuestas con lo primero que tiene dos tetas.

— Yo disfruto.

— Sigue así si eres feliz. Y déjame ya, me voy a mi casa.

— Que sepas que anoche me aproveché de ti mientras dormías -____ alzó una ceja - Te metí mano.

— ¿Te gustó?

— En realidad no... siempre lo mismo me aburre. Ya lo sabes.

— Nadie te obligó a hacerlo Zayn.

En cuanto Liam bajó _____ se dio la vuelta y salió de la casa. Zayn era bastante tonto. Le había dicho en su propia cara que le importaba, y él no había prestado la más mínima intención.

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El Placer de Estar Contigo | Z.MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora