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De noche, ya en casa de ___. Recogiendo y preparando para irse al día siguiente.

Zayn abrió todos los armarios de ___. Empezó apartando la ropa que había colgada y después siguió con la ropa doblada en estantes.

- No tengo nada que una mujer no tenga.

Estaba sentada en su cama, doblando la ropa, haciendo la maleta. Mientras Zayn cotilleaba todo lo que tenía.

- ¿__? ¿Y esto? -preguntó con un botecito blanco y rosa en la mano, mientras una sonrisa de oreja a oreja le pintaba la cara

- ¡Eh! ¡Deja eso! -se levantó y se lo quitó- Antes de ti yo tenía vida sexual.

- Creí que sería el primero

- Está claro que no lo has ido.

- ¿Y quién lo fue... si se puede saber?

- No importa Zayn

- Sí, sí que importa.

- Uno del instituto ¿Vale? No sé nada de él desde hace mucho. ¿Y tú qué? Eh.

- Mejor no hablemos de lo mío. Fue penoso - Dijo Zayn

- No me lo creo. Según te veo, no puedo creerlo.

- Antes de ser un sex-bomb -rió- yo era patoso. Como todos. Fue el tiempo y las mujeres quienes me han permitido mejorar.

- ¿Cuántas mujeres?

- No importa -dijo imitándola

- Venga, yo te lo he dicho.

- No sé. Unas... veinte ... no treinta ... no sé. Quizá sean más.

- Debería hacerme pruebas. Quien sabe si me has pegado algo malo. Con tanta puta.

- Te recuerdo que ahora estoy contigo y no eres eso.

- Las demás sí.

- Las demás eran tan dignas como tú

- ¡Y las defiendes!

- No las defiendo, solo te hago saber que no he estado con cualquiera. Tú tampoco eres cualquiera.

___ continuó sacando cosas de los cajones y guardándolo en las maletas. Ya llevaba dos de ropa, y aún quedaban los zapatos.

- No nos dejarán entrar en el avión como sigas metiendo cosas.

- Tú pagarás los kilos de equipaje de más.

Zayn, ahora en el baño de la habitación, siguió inspeccionando. Abrió la puerta de un mueble y encontró una caja sin abrir de tampones. Hizo un gesto raro con la cara y volvió a cerrar la puerta. Abrió el de al lado. Encontró decenas de botes pequeños de cremas. Cada una para algo diferente.

- No creas que vas a llevarte las cremas eh. No me parece bien llevar una maleta solo con tus potingues.

- No rebusques más, a ver si te vas a encontrar algo que no quieres.

- ¿Como qué? ¿Tienes algo escondido?

- Claro que no.

Él volvió a su trabajo de buscar. Abrió la mampara de la ducha y entró en ella. Miró los estantes que permitían tener todos los geles ordenados y las esponjas. Vio una para la espalda. Tenía un mango de plástico y acababa en una especie de bola de esponja exfoliante. Lo cogió y salió del cuarto de aseo.

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⏰ Última actualización: Sep 09, 2022 ⏰

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El Placer de Estar Contigo | Z.MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora