Belleza oculta ➛ KIM JISOO

c i n c o

Avanzamos una gran parte del trabajo, estaba contenta, eso hizo olvidar por completo mi dolor, al menos por toda la tarde. Llegó la hora de irme, las calles estaban bastante oscuras, temí un poco.

—la pasé genial con ustedes, gracias por todo, nuestro trabajo será el mejor -repliqué con el mejor de los ánimos.

—obviamente, que esperabas? somos los mejores de la Universidad -aplicó Namjoon con aires de grandeza.

—no quieres que te acompañemos? —preguntó Jungkook desde el sofá, apenas terminamos se hechó ahí a ver películas, igualmente no tengo porqué quejarme, prácticamente hago lo mismo las veces que puedo.

—no se preocupen, estaré bien, cuídense —sin más que decir salí de aquella lujosa casa y me dirigí hacia la parada de auto buses, no pasaba nada de nada, mi mala suerte me acompañaba siempre.

-tomé mi celular para avisar a mi abuela que me quedaría en casa de una amiga ya que no pasaba ningún bus- en realidad ni yo sabía en donde me iba a quedar, no tenía a donde ir, mi casa estaba muy lejos, y tomar un taxi a estar horas a de ser peligroso y muy costoso, lo aseguro.

En lo que vagaba por las oscuras calles de Seúl siento a alguien tirar de mi pequeño bolso, robando mi celular y recibiendo uno que otro golpe en mi estómago.

—genial, me he quedado sin celular y he recibido otros golpes más, creo que ni caminar podré.

No tenía otra solución que volver donde los chicos, si no otra opción sería morir de frío ahí toda la noche y recibir otros puñetes. Apresuradamente toqué la puerta y me encontré con un Jin lleno de harina por toda su perfecta cara, corrí a abrazarlo con lágrimas notorias en mi rostro, fue lo único que pude hacer en ese momento antes de caer desmayada en los brazos de aquel nombrado.