Belleza oculta ➛ KIM JISOO

s e i s

Me desperté a causa de el ruido que había, tallé mis ojos y logré enfocar a los chicos, quienes me miraban algo preocupados. ¿que me ocurrió?

—hasta que despiertas, choo —habló Jimin un poco más calmado.

—¿que ocurrió chicos? no recuerdo nada, ¿como llegué a su casa de nuevo?

—ni siquiera nosotros lo sabemos, solo llegaste llorando y caíste en mis brazos, pequeña —dijo el mayor de ellos, y al mismo tiempo dándole un cálido abrazo a la chica.

—te quedarás aquí esta noche, no permitiré que salgas sola a altas horas de la noche nunca más, Jisoo —pronunció claramente el pálido algo enojado.

—oh! al menos déjenme avisarle a mi madre, a de estar muy preocupada -la peli negra rápidamente buscaba entre la cama su bolso, intento fallido, aquello no estaba por ningún lado.

—Jin, acaso llegué aquí con mi bolso?

—No Choo, llegaste sin nada, deduzco que probablemente te asaltaron -soltó mientras acomodaba su cabello.

—Recuerdo haber llamado a mi madre antes, no importa todo está bien.

—Bien, hora de dormir —habló el solcito de mi vida, hoseok, lo digo así porque siempre es radiante, no importa la situación en la que estemos, el siempre anima a cualquiera.

—Adiós —pronunciaron todos al unísono, Jisoo quedó sola en la extraña habitación pero notó la presencia de Jungkook, y pensó lo peor.

—Y tu qué! Que sigues viéndome ahí —Choo estaba más confiada con Jungkook y le hablaba como se le antojaba, era divertido.

—Pues es mi habitación pequeña tonta, ya te habría hechado a patadas si no fuera porqué estás así, dormiré en el sofá, no hay problema, antes de que digas algo, adiós. —dicho eso el chico de cabello largo se dispuso a salir de la habitación y dejar a su contraria con la palabra en la boca.

Me sobresalte al sentir un bulto en mis piernas, haciéndome despertar y ver la luz del día, realmente quería seguir durmiendo

—Buenos días, linda —acomodó la bandeja en mis piernas para luego darme una calidad sonrisa, la amaba.

—Buenos días Jinnie, gracias se ve demasiado rico —no tanto como tus labios, muero por darte unos besotes, no no de que hablas maldita idiota, te gustan todos o qué!?—

—Probaré que tan buen cocinero eres —comencé a comer el desayuno y realmente estaba delicioso, sin duda sería un gran esposo.

Partí hacia mi casa, en compañia de los chicos, ahora no querían dejarme sola ni a sol ni a sombra, exagerados.

Saqué las llaves de mi pantalón y abrí la puerta, entré a mi linda casa no si antes hacer pasar a los chicos, era lo mínimo que podía hacer.

—Adelante chicos, pasen.

—Bonita casa, tontita —mencionó Jungkook, iba a responderle por insultarme pero justo llega mi madre interrumpiendo todo.

—Te salvaste estúpido —le di un codazo tratando de no llamar atención de los demás.

—Así que ustedes son los amigos de los que tanto habla Jisoo, es un gusto conocerlos —en ese momento mi madre me estaba dejando en completa vergüenza—

—Así que hablas mucho de nosotros, espero y sean cosas buenas, Choo. —comento Yoongi desde el cómodo sofá.

—Obviamente, tonto. —sonreí algo tímida, traté de ocultarlo pero se me hacía imposible, simplemente no podía con ellos.

Al caer la noche los chicos ya se habían ido, estaba curando mis heridas que estaban por todo mi cuerpo para luego dormirme, mañana me espera un largo día. Siendo sincera creo que será divertido.

En tan poco siento mucho cariño hacia los chicos, espero que sea mutuo. Siento que con ellos mi vida dará un giro y cambiará por completo, sería genial.