© 𝐌𝐢 𝐥𝐢𝐧𝐝𝐚 𝐩𝐫𝐢𝐬𝐢𝐨𝐧𝐞𝐫𝐚 𝟐 || 𝒀𝑮 ✔

ONCE

— YoonGi esta arrepentido. -comentó NamJoon después de sacar el tema de YoonGi. Dejé de masticar y tratar de procesar lo que me dijo NamJoon. ¿En verdad lo estaba?.- Nos lo dice todos los días. -lo volteé a ver.-

— Lo que YoonGi y yo pasamos queda en el pasado. No hay vuelta atrás. -dije aclarando.-

— Lo sé, sé que sus acciones y la manipulación de su madre lo llevaron a esto, pero él en verdad está arrepentido. Los primeros meses no era el YoonGi que nosotros conocíamos, cambió mucho. -volvió a comentar NamJoon.-

Solo aguarde silencio, quería procesar aún sus palabras. Cuando una persona entra en tu vida ya no se puede escapar, se hace un alma perdida.

¿Por qué el corazón responde con facilidad esta emoción? Simple, Porque el corazón o más bien, el amor, llega cuando menos te lo esperas y el corazón lo acepta con cariño.

La conversación quedo ahí. Después de terminar de comer conversamos un poco, los chicos tenían compromisos que hacer, así que no tardaron mucho en irse.

Los que dijo NamJoon me ha tenido rondando por la cabeza toda la tarde. Ya no se que pensar, que sentimiento agarrar. Pensé que mis lágrimas ya se habían agotado, pero mi corazón me volvió a engañar.

¿Ya era tarde para darme cuenta que Min YoonGi aún causaba algo en mí? Yo creo que sí.

°°°

Lunes por la mañana. Me levanté para arreglarme e irme a la Preparatoria. Llegué temprano como siempre. Me dirigí a recepción para después anotar mi hora de entrada.

Revisé a que salón debería de dirigirme. Al salón de 4F me tocaba la primera clase, así que me dirigí al salón correspondiente. Algunos alumnos ya habían llegado, otros aún no, pero aún así entre al salón y salude para después dirigirme a mi respectivo lugar y esperar la hora de entrada y comenzar mi clase.

°°°

Dieron el timbre de salida, rápidamente los alumnos salieron del aula, yo solo recogí mis cosas y empecé a borrar el pizarrón, cuando escuché que tocaron la puerta.

— Tu hermana ya se fue Back. -sonreí para voltear hacia la entrada del salón. Mi cara cambió cuando vi que no era Back el que había tocado la puerta.- ¿Cómo entraste?

— Primero que nada... ¿Por qué me comparas con alguien tan feo como Back? Segundo. ¿Por qué Back viene a visitarte? -comentó.-

— Tú no puedes estar aquí YoonGi. -fui al escritorio para agarrar mis cosas lo más rápido posible, pero él me detuvo agarrando de mi mano. Un escalofrío recorrió por mi cuerpo. Tragué saliva.-

— Vamos, yo te llevaré a comer. -empezó a caminar.-

— ¿E-es una pregunta o una afirmación? -se detuvo y me vio de arriba hacia abajo.-

— La segunda. -volvió a mirar al frente y volvió a caminar.-

— ¿Cómo es que entraste, ni en mi propio trabajo puedo estar tranquila? -sólo se escuchó un risa sarcástica.-

— Tengo mis mañas. Y... ¿Con tranquila te refieres a nerviosa? -me volteo a ver.- Lo sabía, aún te sigo poniendo nerviosa, ¿O no es así?

— S-suéltame, es lo que deberías de hacer.

— No, porque sé que te volverás a escapar. No es la primera vez que te pido que hablemos y terminas huyendo. Así que tomé la decisión de mejor secuestrarte por este día. -sonrió.-

— ¿Otra vez? -sonreí inconscientemente, pero cuando YoonGi volteo a verme borré mi sonrisa de mi rostro, aunque no sirvió de nada, ya que la vio.-

— Es bueno recordar viejos momentos, ¿No es así? -no contesté, porque sabía a donde quería llegar.- Lo haría una y otra vez por volverte a tener junto a mí. Aunque fuera en otra vida, te buscaría para volver a encontrar mi felicidad. -nuestro paso fue más lento. No dije nada y me acerqué para registrar mi hora de salida, me despedí de la maestra y salí del instituto, ahí estaba YoonGi parado, volteo a verme.

— ¿Prometes que llegaré viva a mi hogar? -él sólo sonrió y asintió para después dejarme entrar a su auto. Esta es la primera vez después de casi tres años sin escapar de él, otra vez.-

°°°

Llegamos aún restaurante Coreano. Bajamos del auto y nos adentramos al restaurante.

No podía negar que no estaba nerviosa. ¡Lo estaba! Cada cosa que hacía, lo hacía con torpeza.

— ¡Lo siento! -dije después de que casi le tirara la comida al mesero. Toda la gente se me quedó viendo y YoonGi sólo se empezó a reír, el amable mesero sólo se disculpo echándose la culpa a él mismo.-

— ¿Desde cuando eres tan torpe? -encunó su cabeza con sus manos. Estaba mirándome fijamente, no despegaba ni una sola pestaña en mí, eso me ponía el doble de nerviosa.-

— Ahhm... -no supe qué contestar, no salían mis palabras. YoonGi sólo se empezó a sonreí-

— Lo sabía. -agarró los palillos y dio tres golpes a la mesa.- ¡A comer! -sonrió. ¿Qué sabía?.-

°°°

Terminamos de comer y YoonGi pagó la cuenta, se lo agradecí por invitarme a comer.

Nos subimos al auto y el empezó a manejar. Nadie decía nada, era un silencio un poco... incómodo. Decidí romper ese silencio.

— Y... ¿Aún tocas el piano? -lo volteé a ver.-

— No -negó.- Deje de tocarlo. Extraño tocar el piano. -sonrió.- A lo mejor y me compro otro... -me volteo a ver.- ¿Quieres que te de clases? -volvió a sonreír y volvió a fijar su mirada en la avenida. preguntó con algo de ironía. ¡Sucio! .- Listo... Llegamos. -estacionó su coche afuera del edificio.-

— Gracias... -le sonreí y salí de su coche. Estaba caminando hacia la entrada de mi departamento cuando YoonGi me habló.-

—T/N.. . -caminó hacia mí, se veía un poco nervioso.- Sé que difícil volver a empezar... Pero quisiera que tu y yo empezáramos de cero, volver a... 

— ¿A ser amigos? -lo interrumpí.-

— S-sí... Hacer otra vez amigos.

— Esta bien. -sonreí y estiré mi mano para quedar "en paz" todos los problemas que se vinieron en el pasado. Él la aceptó sin dudarlo. ¿Por algo se empezaba no?.-

Estaba por irme pero él me volvió a detener.

— Oye... Y lo del piano lo decía enserio. -lo volteé a ver y le sonreí.- ¿Eso es un sí? -dijo y yo sólo me despedí y me metí al departamento. Quedaba en él para saber cual era mi respuesta.-

Al llegar a mi departamento no pude aguantar la emoción. Por ahorita era mejor llevársela como amigos.

POV. MIN YOONGI

Entré a mi coche y me fui más que emocionado a mi departamento. No podía ocultar mi felicidad. Y bueno... De algo se empezaba, estoy dispuesto a volverla a enamorar cueste lo que cueste y trataré de hacerla la mujer más feliz, porque su felicidad es la mía.

Creo que ya tengo que comprar el piano.

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Holigüis... ¡Holaaaa! Perdónenme por la tardanza, jsjsj, pero se los vine a recompensar >.< la causa ya se las dije en avisos esta el por que mi demora al subir capítulos. Pero aquí me tienen.

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