Lena
—Por favor... Deja que me vaya.
Sé que estás enojada conmigo, pero sé que yo sería la más leal
contigo, si me dejas vivir. — como me gustaba que las cucarachas de su calaña cuando veían que los derrotaron rogaran por su vida.—No estoy enojada contigo.— respondí.
—¿Entonces por qué estoy aquí?
—¿Por qué me traicionaste?— pregunté en cambio.—Juro que no quería, en serio.
me-me obligaron a hacerlo.
—¿Quiénes? ¿Los amigos de Lex?—No puedo decirlo.Están por todas partes.— dijo con miedo.
-Muy bien. Culpa al monstruo en tu cabeza. — dios está más chiflada que Lex.—Por favor, si llegan a pensar
que te lo dije, me matarán y también a ti. —susurro.—Por dios ¿crees que soy estúpida para tragarme que estas loca?
—Pero es cierto.— dijo desesperada — Me reclutaron cuando tenía 16 años.
El mismo año que murieron mis padres.
Tenía muchas deudas.
Dijeron que podían arreglarlo todo.
Todo lo que debía hacer
era trabajar para ellos.- Y traicionarme.— dije molesta.
- ¡No!- negó rápidamente —Aborrecí hacerlo.
—Eve, te hice una pregunta.—me cruce de brazos — Mi madre siempre decía que las acciones hablan
más que las palabras.
Y yo estuve allí, Eve.
Estaba al otro lado del arma que sacaste, miré por el cañón y supe que me habrías disparado.— Me acerque hasta el vidrio que nos separaba —Así que no me digas que
no tenías otra opción.
Siempre hay una opción, y siempre elegiste la misma.Ella me miró sin decir nada.
—Me traicionaste porque querías.
Te gustaba el poder que te dio.
Entonces, si quieres que confíe en ti, intenta decir la verdad por una vez.Me si la vuelta terminando con la conversación y volví a mi investigación.
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Kara
Andrea Rojas, Andrea Rojas, Andrea Rojas.
La he tenido en mi mente todo el día pero no de una buena forma, no se que le pasa conmigo pero desde que llego parece que no le caigo bien.
He estado todo el día de aquí para haya sacando copias, investigando sobre lo que vistieron los invitados en la gala del Pulitzer. Le tuve que decir a Alex que no podía ayudarla a buscar a Jonh pero que cuando ya tuvieran la ubicación vería la forma de safarme.
Lo único bueno de mi reportaje sobre los vestidos es que podía pasarme viendo las fotos de Lena y yo en la gala. Sobre todo a Lena con ese vestido uff no lo pude disfrutar ya que mi mente estuvo ocupada por revelarle mi gran secreto y por Midnight pero ahora analizando bien las fotos me doy un sape mental por no disfrutarlo en vivo aun me sorprende que no me desmeyara por su belleza.Camine de regreso la sala de medios donde me encontraba seleccionado las fotos cuando una torre inmensa de comida en el escritorio de Nia me llamó la atención.
— ¿Nia? — pregunté ella se asomo detrás de toda la comida —Tienes mucha comida.
—Sí, así es.
—¿Me das unas?— pregunte
—¡Sí! — grito esperanzada.
—Muero de hambre. — dije mientras tomaba varias cajas.
—Sí, por favor, tómalas todas.
—Adivino. ¿Esto es Brainy?
—Esta mañana, me trajo mi desayuno favorito y fue perfecto. Pero creo que es un poco excesivo.—Quizá dar comida es el lenguaje
de amor de Brainy. No lo sé.Recordé la vez en la que le llevé donas a Lena o cuando lleno mi oficina de flores o cuando compro CatCo eso era la forma en la que me demostraba su cariño Lena.
La voz de Nia me hizo dejar de pensar en eso.
—Creo que debo decirle en español básico que 35 cajas de sushi
son demasiado amor.
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Mi gran error | Supercorp |
FanfictionLena lucha contra la revelación del secreto de Kara.