Prohibido (Jikook) [Adap.]

|°Capítulo 26°|

Jungkook no apartaba la mirada de Jimin ni un segundo desde que habían salido de la casa, desde que todos se encontraban de la camioneta de regreso a la ciudad. Desde que se había dado cuenta que Jimin llevaba alrededor de una hora sin despegar la mirada de su celular.

Seguro es la mujer de anoche. Pensó Jungkook tratando de evitar aquella necesidad de fruncir sus labios y acercarse a Jimin solo para ver con quién hablaba tanto.

Solo faltaban alrededor de veinte minutos para llegar a la ciudad –cosa que Jungkook agradeció-. Jungkook deseaba llegar a su hogar, abrazar a su padre e ir a su habitación para dormir a gusto un día entero sin nadie que le molestase.

Le dolía la cabeza desde que había hablado con Hoseok el día anterior, y aún más cuando despertó en aquella habitación del local unas pocas horas después de haber –por primera vez- tenido un encuentro sexual con Yoongi.

Realmente había tenido sexo con
Yoongi, y lo había hecho por el simple hecho de ver a Jimin saliendo del local con aquella hermosa mujer. Tan ingenuo. Tonto.

Pero lo aceptaba, no había estado mal, era la primera vez en todos esos años que estaba con un chico de nuevo de una manera tan íntima, desde lo que había pasado con su exprofesor, ni siquiera tenía el interés en cualquier tema sexual, o eso pensaba hasta que dos días antes casi obligaba a Jimin a permitirle deshacerse de su camisa y controlar la situación. Ni siquiera estaba razonando en ese momento, si tan solo Hoseok no hubiera salido de su habitación, seguro ellos realmente hubieran llegado a algo más que besos.

Se supone que Jungkook no querría estar con Yoongi en algún tipo de relación sexual aún, pensaba en contarle regresando a la ciudad su condición para que éste entendiera, pero era inútil una vez había parecido un completo necesitado ante Jimin dos días atrás.

Pero Jimin parecía no mostrar interés en lo ocurrido. A penas le dirigía la palabra o le dedicaba cortas miradas, era como si en verdad lo de ellos durante esos últimos días nunca hubiera sucedido, como si en verdad un ellos no existiera.

Deberías estar agradecido, Jungkook. Jimin realmente está alejándose, haciendo lo correcto.

Debería, pero no podía, no sabiendo
que lo olvidaría y se iría con alguien más, con aquella mujer de anoche.

Después de todo Jimin es heterosexual, tú solo eres una persona inoportuna en su vida. Se dijo a sí mismo acomodándose en su lugar.

Mierda, ni siquiera debería de importarle, después de todo eso era lo que quería, lo que espera que ocurriera desde un principio.

—¿Quieres que te llevemos a casa? —preguntó Kai. Entonces se dio cuenta que ya habían llegado a la ciudad.

—Eso sería fantástico. —Kai asintió y siguió su camino, dando vuelta en la carretera camino al lujoso barrio donde las personas con mucho dinero vivía.

Yoongi pasó su brazo por los hombros de Jungkook le dedicó una leve sonrisa.

—Realmente te agradezco por pasar éstos días conmigo bebé.

—¿Te das cuenta que soy mayor que tú y me dices bebé verdad? —Yoongi soltó una carcajada echándose hacia atrás y depositó un beso sobre su nariz.

—¿Eso importa? Es un apodo de cariño. Igual, eres mi bebé. —Jungkook negó y se acurrucó contra su cuerpo. Los demás murmuraron diferentes frases de disgusto las cuales hicieron reír a la pareja—Te dejo descansar, creo que debes querer tu espacio. Puede que el otro fin de semana esté ocupado así que estaremos en contacto. —Jungkook asintió.

—Yo también bajaré aquí. —todos miraron a Jimin con confusión, incluso Jungkook, y maldijo en sus adentros—Le presté un libro a Chanyeol sobre mecánica para que estudiase, vive por aquí así que aprovecharé a pedírselo.