My Stupid Angel

Capítulo VIII

-Narrador-

Simon no recordaba mucho de su padre, los recuerdos que yacían en su memoria eran fragmentos de un hombre alto, de ojos color avellana como los suyos y una sonrisa reconfortante; de lo poco que el joven vampiro recordaba se hallaba una frase que su padre le dijo cuando esté era un niño de diez años: "Simon, no te dejes llevar por el deseo de besar a una chica cuando ya tienes una pareja... esta mal..." eso se lo había dicho una tarde después de la escuela, el pequeño acababa de terminar con su primera novia a causa de haber besado a Clary en los labios. "Hijo... si quieres a una chica, en este caso a Clary, no salga con otras chicas... se valiente." en ese momento Simon solo asintió con la cabeza y se fue a su habitación. Días después su padre murió. Y Simon decidió desaparecer aquellos recuerdos en los que su padre lo regañaba o reprendía, incluyendo este recuerdo, pero extrañamente en ese momento el recuerdo de su padre reprendiéndolo por aquella estúpida hazaña, regresó. Y decidió regresar en el momento menos indicado, justo para re-morderle la conciencia por lo que estaba a punto de pasar...

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Jace lo tenía agarrado de los muslos y recargado en la pared, mientras proporcionaba besos y mordidas en el cuello de Simon, mientras el vampiro gemía, envolvía con sus piernas la cintura de Jace, este sonrió malicioso y regresó a devorar la boca del vampiro, el cual bajó sus manos hasta el borde de la playera del cazador para ir levantándola lentamente por su cabeza, quitándosela  y dejando a la vista el bello torso de Jace, casi como un impulso inevitable Simon acaricio la piel desnuda del joven rubio quien se sorprendió y excitó al contacto.

- Simon...- empezó Jace pero el vampiro lo detuvo con un beso, y no un beso cualquiera, si no, uno demasiado caliente y tierno a la ves-. Te llevaré a la cama.- le susurró al oído y en en efecto, eso hizo. Aparto a Simon de la pared y lo llevo cargando hacia la cama donde lo recostó con muy poco cuidad, para posteriormente posarse sobre él para volverlo a besar. Simon no podía pensar en nada más que no fueran los besos y la excitación que los mismos provocaban. Las manos de el cazador de sombras acariciando su torso debajo de la playera, acariciando sus piernas y muslos, desabotonando el pantalón...  Hasta que..."Simon, no te dejes llevar por el deseo de besar a una chica cuando ya tienes una pareja... esta mal..." ese maldito recuerdo regresó "Hijo... si quieres a una chica, en este caso a Clary, no salga con otras chicas... se valiente."   esas malditas palabras se repetían un y otra vez "se valiente."  

Se maldijo mentalmente y puso una mano sobre el pecho del contrario para que esta dejara de besarle, lo cual no sirvió de mucho porque el rubio estaba tan ensimismado en sus pensamientos (sobre el cuerdo de Simon, la textura de sus labios y de como extrañamente la piel del vampiro proporcionaba un intenso calor).

- Jace...- empezó jadeante -. Jace detente...

Y se detuvo.
Maldiciendo Simon se incorporó en la cama y miro a Jace a los ojos, el cual tenía los ojos inyectados en deseo y lujuria, el cabello lo tenía enredado y revuelto en la cabeza y sus labios estaban inchados por los besos.
- ¿Que? - preguntó Jace en tono grave.
- Yo... - empezó Simon con un hilo de voz -. No puedo.
- ¿No puedes? O ¿No quieres?
- Quiero... Quiero decir que... Quiero, claro, pero no... No puedo... Es que... Izzy... Y luego mi padre... Tú... Aish - se quejó el diurno en cuanto se dió cuenta que el Nephilim lo miraba con los ojos entonados y confundido.
- A ver... Déjame ver si entendí. No puedes por qué estás saliendo aún con Isabelle - Simon asintió con la cabeza -. Eso entiendo... Pero ¿que conexión tiene Iz con tu padre? ¿O conmigo?
- ¿Que? No, ninguna... Es... Auch - se quejó gracias a qué -ultimamente- Jace dejaba sus armas sobre la cama y el resultado de ello fue una profunda cortada en el brazo izquierdo del joven vampiro.
La sangre no tardó casi nada en salir de la herida. No era roja en su totalidad, era más oscura, entre marrón y negro.
Jace maldijo y tomo el brazo de Simon para revisarlo.
- Déjalo. Sanará. - dijo Simon con apenas un hilo de voz.
- ¿Que pasa? Hace unos momentos nosotros...
- Lo sé - interrumpió Simon -. Y lo lamento. Pero no puedo hacerlo... Es... Izzy.
- Oh! Yo... Soy un idiota. - cubrió su cara con sus manos -. Yo...
- Voy a terminar con Isabelle. - dijo de la nada.
- ¿Que? ¿Por?
- Jace... ¿No sé ya hace injusto...? Para los tres...
- Izzy me odia.
- No, no te odia.
- Me culpa por la muerte de Max.
- No fue tu culpa. Ambos lo sabemos.
- Claro que lo fue... Si tan solo... Hubiera...
- El "hubiera" no existe, Jace.
- Pero...
- No. No es tu culpa e Izzy no te odia.
- Lo hace... No termines con ella... Acaba de morir Max... Esto sería... Algo... Difícil para ella...
- Lo es para tí.
- Es diferente.
- No es cierto...- Simon se acercó más Jace y acaricio la piel desnuda de sus hombros con la punta de los dedos-. Ambos perdieron un hermano.
- Pero... Iz no puede perderte a ti también. Ha sufrido mucho, Simon...
- Igual tú.
- Osea si, pero la cuestión es... - en ese momento sonó el teléfono de Simon, quien se alejó de Jace para levantar el celular del suelo.
Era una serie de mensajes de Alec que decían que la Reina lo necesitaba urgentemente.
Nuevamente soltó una maldición.
-. ¿Ocurre algo?
- Esa mujer... Me tiene arto... ¿Me acompañas?

- Narra Simon-

Íbamos en mi camioneta, Lawrence manejaba, Alec iba en la parte tracera de la camioneta junto con Jace y yo.
Alec no dejaba de lanzarnos miradas durante todo el trayecto... Sin embargo no decía ni una sola palabra.
- ¿Que? - preguntó Jace arto de las miradas de Alec.
- ¿De que? - "respondió" éste.
- Nos miras mucho... ¿Ocurre algo?
- Pues...
-¿Pues...?
- ¿No sé les hace curioso que los amigos actualmente hacen cosas muy raras...?
- ¿Raras? ¿como que?
- Bueno... Algunos se besan... - esta vez me miró directamente a los ojos -. Otros... No sé... Se encierran en sus recamaras juntos y salen con marcas que antes de haber entrado no tenían.
Jace y yo intercambiamos miradas.
- No te entiendo... - dijo Jace.
- Por ejemplo - prosiguió Alec -. Simon está mañana no tenía aquella marca en el cuello - dijo señalando me -. Y cuando ambos se fueron... - se encogió de hombros -. Resulta que... Simon tiene un chupetón en su cuello.
Inconscientemente mi mano se dirigió a mi cuello y me sonroje.
- Estás loco. - dije.
- No, no lo estoy. - dijo él completamente seguro -. ¿Que traen ustedes dos?
- Nada. - dijo Jace.
- ¿Nada? - preguntó su Parabatai -. ¿Un chupetón te parece nada?
- No es un chupetón... - insisto el rubio -. Seguramente... Se cayó...
- Sobre el cuello. - se burló Alec -. Por él Angel, Jace. Hace tiempo dije lo mismo... Con lo de Magnus... Se más creativo porfavor.
- Yo... - no pudo terminar porque Lawrence freno el auto de una forma horrible.
- Llegamos. - anunció.
- Bien... Bajemos. - dijo Alec y bajó, Jace y yo detrás de él.

Caminamos por diez minutos aproximadamente para llegar al puente. Cuando al fin llegamos una Sellie (muy hermosa, de ojos color miel, cabello rizado, piel blanca y pecas) nos esperaba sentada sobre el barandal, balanceado los pies como niña pequeña. Cuando estuvimos lo suficientemente cerca de ella, sonrió y bajo de su "asiento".
- Ustedes deben ser... Alexander Lightwood - miró a Alec -. Simon Lewis - me miró a mi y posteriormente a Jace -. Y tú... Debes se un Herondale - dijo acercándose mucho... Demasiado a Jace -. No me dijeron que vendría un Herondale.
- Y no lo hizo - respondió éste -. Soy un Lightwood.
- Ajá. - ella soltó una risita -. Pero tú sangre... Tus ojos... Tu alma gritan Herondale. Algo que no puedes evitar, cielo. Algo que no podrás esconder por mucho...
- Ejem. - Alec carraspeó interrumpiendo -. Tú debes ser Saori ¿o...?
Los ojos de la chica se tornaron oscuros y parecía molesta.
- Kaori... Mi nombre es Kaori y soy la ayudante y consejera de Mi Reina.
- Llévanos con ella, entonces.
- Será un placer Sr. Inquisidor. - inclinó la cabeza -. Joven Lewis y... Joven Herondale, acompañenme.- dijo y salto al lago.
- Primero las damas.- dijo Jace con un movimiento de cabeza hacia Alec quien rozo los ojos y saltó no sin antes, claro, decirnos a ambos -. Traten de no caerse sobre el cuello mientras no esté. - y saltó.
- Idiota. - dijo Jace y luego se acercó a mí oído y susurró -. Vamos. Luego podremos seguir con... Lo de la "Viruela Demoníaca".
Me aparte de el para acercarme al barandal. Y miré debajo, el lago era hermoso, se veía de colores y flores flotaban sobre él... Al igual que patos, muchos patos. Yo solo reí y salté.
Al tocar el agua helada mi cuerpo se hundió en la oscuridad total.

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Lamento el retraso, estuve ocupada con los exámenes
El capítulo es corto, lo sé, no tiene hard, no, talvez se pregunten quien es Lawrence... Talvez no pero se los diré, es un mundano con Visión que trabaja para el Instituto de NY (lo "contrato"/adopto Izzy) .
Es divino.
*Fin del comunicado.

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