12: Cambio de planes y de fiesta

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Me estaba acostumbrando a pasear junto a Ethan en su motocicleta, luego de ir al supermercado a comprar helado me di cuenta de que éramos totalmente diferentes.

No puedo creer que prefiere el sabor a piña en vez que el de chocolate ¿a quién diablos le gusta la piña? era mi sabor menos preferido de este mundo.

Luego de discutir casi 20 minutos, decidimos comprar ambos helados. Ah y también crema chantillí, esa al menos nos gustaba a ambos.

- Yo digo película de terror - dijo Ethan acercándose mucho a mi y mirándome directo a los ojos.

- Me parece la mejor opción - dije maliciosamente mirando también sus ojos.

- ¿Eh? - dijo algo desconcertado - ¿no te asustan las de terror? - añadió sin creerlo.

- Amo las de terror querido - dije molestándolo.

- Pf - dijo y se cruzó de brazos.

- ¿Qué te pasa? - dije riendo.

- Nada - dijo enojado.

Parecía un bebé molesto.

- Ahh, creías que me daban miedo las pelis de terror y que podrías abrazarme para así protegerte ¿no? - pregunté y no pude evitar la risa.

- No molestes - dijo él.

- Ahh, pero si es tan romántico, que tierno - dije en tono burlón.

- Ya basta - dijo y de pronto lo vi como un verdadero tomate.

- ¡No!- dije sin creerlo.

- ¿Qué? - dijo volteando la cara.

- Es primera vez que te veo sonrojarte - dije muriendo de ternura.

- No - dijo él algo tímido.

- Me gusta como te ves, te ves lindo - dije y sus mejillas que ya se habían calmado, volvieron a teñirse de rojo.

...

Debía aceptarlo esta película si estaba dando algo de miedo, el personaje principal estaba investigando una cabaña que al parecer estaba abandonada. Él había logrado entrar pero escuchó un ruido extraño y se dirigió hacia el.

Curiosamente también escuchamos un ruido, pausamos la película y nos miramos.

- ¿Qué fue eso? - pregunté.

- Ni idea - dijo tratando de escuchar - iré a ver, quédate aquí - dijo con cara seria y yo asentí.

Había pasado un minuto aproximadamente y no soportaba el hecho de estar sola, así que fui a buscarlo.

- ¿Ethan? - susurré.

Nada. No hubo respuesta.

- ¿Ethan? - susurré nuevamente.

De pronto escucho un ruido fuerte y un grito, me di cuenta de dónde provenía y me dirigí corriendo a la puerta trasera de la casa. En esa zona estaba la lavandería.

- Ay Dios mío - dije al llegar y ver la escena.

...

- Ethan maldito me las pagarás - dijo Adrien sobando su nuca.

- Lo siento hermano debiste avisar que vendrías, de verdad pensé que eras un ladrón - dijo Ethan explicando algo nervioso con sus manos.

El bosque de RavenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora