Capítulo 12

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En cuanto Alice ha dicho que Rosalie venía en camino, Emmett ha salido corriendo y me ha dejado sola cuando aún sigo notando el dolor de los recuerdos que vuelven a mí poco a poco.

—Necesita tiempo, Juliette —Dice Edward sentándose a mi lado y pasando una mano por mi espalda, reconfortándome suavemente, pero pensar que Emmett me ha dejado sola, me duele un poco.

Asiento y me levanto del sillón para salir fuera, donde me quedo mirando el cielo nublado hasta que Leah se coloca a mi lado y sonríe de forma comprensiva.

—He estado escuchando lo de tus recuerdos —Dice Leah comprensivamente hasta que escucho como siguen hablando de Rosalie, de como la echan de menos y cosas así. Me siento como una intrusa en esta casa, ocupando el sitio que dejó ella, y que no puedo llenar.

—Leah, crees que... Bueno, ¿crees que puedo ir a la Reserva? —Pregunto un poco avergonzada, Leah sonríe y me agarra del brazo para hacerme caminar hacia la Reserva, donde veo a mi hermano Kilian sonriendo enormemente al verme.

—Juliette, cada día te veo más hermosa, —Dice Kilian, abrazándome un poco, y aunque me arde un poco la garganta, es soportable —¿vamos a casa? Seguramente papá y mamá quieran verte.

—Cl-claro. —Digo con una enorme sonrisa, sintiéndome aceptada —Leah, me voy a mi casa, luego nos vemos.

—Tú casa es la mansión de los Cullen, Juliette. —Dice Leah confundida, pero asiente y se va, dejándome sola con Kilian, quien parece bastante complacido al ver que voy a casa.

Lo mejor es quedarme en la Reserva y dejar a los Cullen en paz, además de que ella vuelve, y no me echarán de menos.

—Volvamos a casa, Kilian. —Susurro un poco triste por Emmett, pero sabiendo que es lo mejor para él.

Al despertar [Emmett Cullen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora