Home 내 집 "Kookmin"

O3

—Vamos a ver pequeño— Dijo JungKook sentado en el sofá de su apartamento con el pequeño cachorro sobre su regazo. — ¿Cómo te llamarás?

El pequeño cachorrito ladró y JungKook sonrió al escucharlo responderle.

Cuando había entrado al refugio, había ido directo al pequeño cachorro, dado que había hecho un tremendo escándalo tan pronto JungKook había pasado el marco de la puerta.

No era el perrito más agraciado de la tierra, era un cachorro muy pequeño sin raza y con los pelitos alborotados mirando en todas direcciones, pero a JungKook se le había derretido el corazón al verlo.

—Hmmm. — murmuró JungKook mientras acariciaba la cabeza del cachorro. —Tienes cara de... ¿Galleta? ¿Carlos? ¿Patricio? ¿Canelo?

El cachorrito empezó a morder los dedos de JungKook y este suspiró. No tenía idea de cómo ponerle, nunca en su vida había tenido una mascota y no tenía idea de cómo cuidar a un perro.

Se preguntaba si realmente había sido una buena idea adoptar un perrito solamente para no pasar la navidad solo.

Con otro suspiro, JungKook puso al cachorrito en el piso y se dirigió a la cocina. Abrió el refrigerador y sacó una manzana.

Tan pronto la mordió, el cachorrito empezó a ladrar y a saltar.

JungKook lo miró confundido hasta que entendió que el pobre tenía hambre.

Y como él nunca había tenido mascotas, claramente no había pensado en que el pobre perrito también debía comer.

Pasando sus manos por su cara con frustración, JungKook terminó su manzana de un par de bocados y caminó hasta el perchero, donde estaba su chaqueta.

Se la volvió a poner y alzó al pequeño para llevarlo consigo a la tienda de animales para comprar todo lo que necesitaría.

(🍒)

Eso de no haber comprado en el refugio al menos una correa para el cachorro había sido una MUY mala idea.

JungKook había caminado un par de cuadras con tranquilidad con el cachorro en sus brazos... hasta que pasaron por en medio del parque central de la ciudad y un grupo de perros pasó corriendo y ladrando.

El pequeño cachorro se había vuelto loco y empezó a ladrar y a sacudirse hasta que se escapó de los brazos de JungKook y corrió detrás del grupo de perros.

El de cabello largo se quedó unos momentos sorprendido por lo que había sucedido y luego corrió detrás del pequeño.

A pesar de ser un cachorro pequeño, corría con muchísima velocidad y JungKook no lograba alcanzarlo.

Y el pobre perro ni tenía nombre, así que JungKook solo podía correr y gritar — ¡¡PERRO!! ¡¡VEN ACÁ!!

En un momento, el tatuado vio como el perrito se estaba acercando a la fuente que había en el parque y abrió sus ojos como platos para luego correr lo más rápido que había corrido en su vida.

—¡¡PERRO ESPERA!! ¡NO ENTRES AHÍ! — gritó JungKook y vio al perrito dar un salto hacia la fuente...

Pero una mano casi que lo atajó al aire antes de que entrara en la fuente.

— ¡Woah! — Dijo el chico alzando al cachorro. — ¿A dónde crees que ibas, pequeñín?

—A ahogarse, a eso iba. — dijo JungKook con la respiración agitada cuando llegó al lado del chico y sonrió al reconocerlo. Era el chico que había estado tocando la guitarra cerca del refugio.

El chico al parecer también lo reconoció porque se sonrojó tan pronto lo miró a los ojos.

— ¿Este pequeñín es tuyo? — Preguntó el chico señalando al perrito en sus brazos y JungKook de nuevo pudo notar lo nasal que se escuchaba su voz. Ahora al tenerlo tan cerca pudo notar la nariz roja y la pequeña irritación en los ojos de aquel chico; definitivamente estaba resfriado.

JungKook asintió sonriendo y el chico le ofreció al perrito, lo tomó en sus brazos pero aún así no pudo despegar sus ojos del rostro del chico.

Era realmente atractivo. A pesar de tener los ojos y la nariz irritados, JungKook igual pudo apreciar el bonito tono pálido de su piel e igual pudo apreciar la belleza de aquellos azules e intensos ojos.

El chico se sonrojó aún más bajo la mirada intensa de JungKook y miró al piso.

— ¿Cómo te llamas? — Preguntó JungKook sin poder evitarlo.

—J-JiMin. — Respondió el chico con un pequeño tartamudeo.

—Mucho gusto, JiMin.

— ¿Y... no me dirás cómo te llamas? — Rreguntó JiMin después de un pequeño silencio y JungKook dudó en responder.

No quería volver a pasar por lo que pasaba todos los días tan pronto decía su nombre y las personas lo reconocían como el aflorante y exitoso escritor. Al ser un escritor, no era tu cara lo que las personas reconocían, sino tú nombre.

— JungKook. — Respondió al fin después de un prolongado silencio y suspiró aliviado al ver que el chico no hizo ningún gesto de reconocimiento.

—Mucho gusto, JungKook.

JungKook sonrió. Le gustaba como sonaba su nombre en la voz de JiMin.

—Creo que ya debo irme. — Dijo JungKook al sentir como el cachorro se volvía a mover mucho. — Debo ir a la tienda a consentir a este niño.

—Oh, bien. Nos vemos luego. — Respondió JiMin y alzó su mano para acariciar de nuevo al cachorro. —Nos vemos, pequeñín.

JiMin miró por última vez a JungKook y se volteó, caminando en la dirección contraria.

—Así que Pequeñín, ¿huh? — Dijo JungKook riendo y acariciando las orejas del cachorro. Con un sacudir de su cabeza, dio vuelta y caminó en dirección a la tienda.

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YA POR FIN VOLVÍ DE MI HIATUS INVOLUNTARIO HAAA ya extrañaba aquí 🥺 meper donas?

Las actualizaciones volverán a ser seguidas y todo volverá a ser feliz como antes a q bueno ya regrese y las historias regresaron wooooooo