HIJO DE LA LUNA ** KATSUDEKU**

Eres mío...

—Estas bien , puedes levantarte —

Ante las palabras dichas por kirishima todos los presentes quedaron en shock por tal valentía , claro excluyendo a un peli-verde que miraba asombrado la mano de aquel pelirrojo con una sonrisa muy radiante.

El peli-verde se emocionó al conocer a tan hermosa persona que no dudo en aceptar su amabilidad , ya que el sería la segunda persona en recibirlo en este mundo de aventuras.

—Muchas grac... —

Pero antes de que pudiera sostener su mano y terminara su frase , fue rechazado por otra , bakugou abofeteo la mano del peli-verde impidiendo que este tocara la mano del pelirrojo.
Ante los ojos de sus amigos esto parecía una telenovela de aquellas con un triángulo amoroso.
El ambiente se puso muy tenso cuando bakugou empezó hablar seriamente sin sus típicos gritos desenfrenados.

—No lo toques... —fueron las palabras directas que le dio a aquellos ojos esmeraldas sin ninguna reacción.

Kirishima se sorprendió al escuchar esas palabras de su amigo y no pudo evitar sentirse feliz pero no estaba bien simplemente dejarlo así.

—Bakugou no era nec... —

—¡CALLATE! —bakugou interrumpió a su amigo y con una mirada firme lo miro a los ojos —Cierra la boca... —

Kirishima no dijo nada más,  sólo le devolvió una mirada de preocupación.

El peli-verde sólo miraba aquellos ojos color rubíes con mucha atención y al entender las acciones de este sólo decidió levantarse por si mismo y dedicarle una cálida sonrisa a los dos.

—No lo haré , así que no te enojes si.. —lo dijo con una voz tan dulce y tranquila, luego posó su vista a aquel pelirrojo y después a los que estaban en un rincón y les dedicó una radiante sonrisa para luego inclinar su cuerpo y ofrecer un saludo formal.

—Mucho gusto en conocerlos , mi nombre es Izuku... —sus hermosas esmeraldas se posaron en aquellos rubíes —Y...espero podamos ser buenos amigos —para luego dedicarle una sonrisa única sólo a el.

Todos quedaron asombrados ante tan hermosa sonrisa de parte de aquel ser que calló del cielo , de alguna forma les dio confianza para entender que el peli-verde no era alguien de temer.
Entonces sin ningún miedo todos se acercaron a el.

—Hola mucho gusto izuku —le dio la bienvenida zero con una sonrisa animada.

—¡Eres una hermosura izuku! —decía mina muy contenta.

—Como le hiciste para caer tan rápido jaja —decía kaminari sonriendo divertido.

El peli-verde se sentía tan feliz por la aceptación y recibimiento que no dudo en decir las palabras que estaba pensando en ese mismo instante.

—Me alegra haber conocido tan hermosas personas y saber que ellos forman parte de tu vida — decía con con un pequeño rubor en sus mejillas pálidas , observando a aquel rubio cenizo que tenía una mirada sería.

Todos quedaron en silencio un buen rato sin saber que decir , ya que para ellos esas palabras significaban que esos dos ya se conocían.
Sus amigos se quedaron observando como su amigo y el peli-verde se miraban con mucha atención sin siquiera parpadear un minuto y al querer decir alguna palabra para detener tal tensión entre esos dos , no pudieron decir nada ya que el peli-verde avanzó hacia el rubio cenizo y con una mirada firme y segura levantó su mano y le mostró su meñique.

—Sabes por que vine verdad... —decía con una mirada segura y a la vez tentadora para cualquiera —Así que ,  por favor cuida de mi persona —sonreía cálidamente.

Sus palabras demostraban seguridad absoluta y su mirada verdadera determinación , el rubio cenizo no tomo las palabras del peli-verde como una broma de mal gusto , las tomo con toda la seriedad del mundo , entonces decidió enfrentarlo de frente sin retroceder posando sus intensos rubíes sobre los esmeraldas , inclinando su cuerpo a la altura de este para luego quedar frente a frente.

La batalla había empezado , el peli-cenizo no caería tan fácilmente por una cara bonita , no, sin duda no lo haría , y con una sonrisa que demostraba la arrogancia en su máxima expresión y con una voz de superioridad absoluta hablo...

—Entonces tu trasero me pertenece... —

las hermosas esmeraldas se iluminaron y posaron una sonrisa que ni el sabía que podía hacer , una llena de curiosidad y emoción al sentir como su pecho empezaba a latir con mas rapidez. Aquella voz estremecedora y su presencia abrumadora lo intimidaron de cierta forma , pero su corazón latiente como un tambor , solo podía sentir mariposas revolotear en su estomago por lo feliz que estaba de haberlo encontrado.

El cenizo pudo observar claramente aquella expresión sin ningún rastro de temor ante sus palabras , y por un momento su cuerpo y su mente habían sido atraídos por esa sonrisa tan molesta que no desaparecía del rostro del peli-verde.

Y al querer desaparecer aquella sonrisa , las manos del peli-cenizo se dirigieron al cuello del peli-verde y estrujando un poco sus manos provocó un gemido de dolor de parte del mismo , quien a pesar del dolor sus hermosas esmeraldas seguían observando aquellos rubíes con aquella misma sonrisa.

—No hay objeciones... verdad?... —decía con la misma ferocidad que lo caracteriza.

Izuku quedó totalmente fascinado con aquel ser , con aquella voz , con esos feroces rubíes que provocaba que sus esmeraldas se iluminarán al instante y que su corazón no dejara de latir con rapidez , pero más que todo, en el provocaba sensaciones y sentimientos tanto físicas como psicológicas totalmente desconocidas para el , lo que lo aterraba por completo.

Pero por obra del destino los dos ya estaban unidos para siempre , es lo que fervientemente el peli-verde creía. Entonces no había razón de rechazar las palabras del peli-cenizo.

Entonces pensó que " así es como se siente el conocer aquel ser que está destinado a compartir su vida junto a la tuya " , "que aterrador sentimiento.... Pero.... cálido a la vez "

—No... No existe... —poso una sonrisa muy cálida al mirar aquellos rubíes. 

El peli-cenizo poso una sonrisa de los más satisfactoria , al saber que ese renacuajo sería totalmente sumiso ante el.
Soltó su agarre de aquel delgado cuello y le regaló una sonrisa burlona aquel peli-verde para luego marcharse por dónde llegó.

Pero no pudo hacerlo ya que un fuerte  llanto retumbó por sus tímpanos , poniéndolo de los nervios y dedicándole una mirada feroz al causante.

El pecoso se encontraba en el suelo llorando a montones , ya no podía seguir conteniéndose.

—¡TENIA TANTO MIEDO!... Mis piernas ya no pueden estar en pie , mis manos no dejan de temblar...mgh —decía tratando de limpiar sus lágrimas —... Pero más que nada tenía miedo de que no despertarás —

Todos quedaron sorprendidos por lo dicho que sintieron pena por el peliverde y miraron al peli-cenizo ferozmente por lo insensible que era.

—Idiota... —decían todos a la vez..

Y solo faltaron unos segundos para que el peli-cenizo iniciará la masacre , pero eso será censurado 7u7.

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Creo que todos le restaron importancia al hecho que hace unos momentos aquel peliverde cayó del cielo , pero bueno...

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