Todos estos años vi lo que pasaba a mí alrededor, mi espíritu siempre estuvo al lado de mi padre mientras mi cuerpo dormía, vi como él se iba destruyendo a sí mismo en su búsqueda de una forma de despertarme, pero yo sabía que mi contrato con Hades consistía en entregarle mil años de mi vida a cambio de mantener la maldición en pie.
Me causaba tristeza el ser la causa de tanto dolor, cuanto odio se sembró por mi decisión, pero era algo que debía hacer, de otra manera Claude usaría otros medios para volver.
Vi el nacimiento de Richter, el nuevo hermano menor de mi papá, era tan parecido a Claude, que habían momentos en que me cuestionaba si era posible que este último hubiese reencarnado. Pero sabía que no era así, aunque si este resultaba ser otro Claude, su maldición haría efecto causándole la muerte, pero solo se desataría si este intentaba usurpar el trono.
También vi cuando nació Christa, la prima de papá, era muy parecida a papá, era una niña muy linda, algo tímida pero tenía una sonrisa muy tierna, como un pequeño perrito.
Entonces me asomé a ver el nacimiento de Giesbach, el hermano menor de mamá, era igual a mamá con su cabello rojo y ojos dorados. Aunque sus personalidades eran completamente opuestas.
Todos nacieron muchos años después de que yo entrará en mi sueño, así que vi su crecimiento, desde unos bebés hasta jóvenes que lentamente se fueron corrompiendo como al parecer lo hacía todo en los últimos años, odiaba el ver cómo la gente que amo iba desapareciendo y las nuevas generaciones comenzaban a crecer sin conocer aquellos tiempos de paz y armonía en que reine junto a mis padres.
Entonces papá se casó con Cordelia, esa zorra, honestamente si hubiese estado despierta le doy un zape a mi padre por tan mala jugada.
Luego del casamiento con la mujerzuela, le siguieron sus bodas con Beatrix y Christa, con la primera fue algo así como un acuerdo comercial más que una boda, ya que los padres de está solo la criaron para ser la esposa de un vampiro noble, pero la segunda era solo una niña, y más una que era demasiado inocente para entrar en tan jodido plan.
Vi sus lágrimas caer por no querer que el niño en su vientre naciera, y los trastornos de bipolaridad que comenzó a desarrollar fueron la peor secuela de todo.
Honestamente me sentía mal por esos niños, ninguno pidió venir a un mundo tan distorsionado, Shū, Reiji, Raito, Kanato, Ayato y Subaru, eran en última instancia productos de mi decisión, y eso no hacía nada para calmar mi odio interno por Claude.
Esta noche al fin abriría mis ojos corporales por primera vez en mil años, era algo que espere por tanto tiempo que las ansias se desbordaban desde mi esencia espiritual.
Solo debo esperar a que el reloj marque la medianoche. Solo espero que mi aura no cause mucha conmoción, Lucifer, ¿a quien quiero engañar?, es obvio que está noche hasta los ángeles se van a inquietar.
Santo infierno, solo esperó que papá no se muera de la emoción, no quiero traerlo desde el inframundo, ya he bajado allí y aunque Hades y yo tenemos una buena relación, puedo asegurar que para traer el alma de mi padre de vuelta conmigo tendría que cambiar otros mil años con ese infeliz.
Ahora estoy divagando, bueno es una cosa que tome por costumbre desde que caí dormida, como no puedo hablar con nadie de este plano existencial, y como la mayoría del tiempo me quedo aquí y no en otros planos, entonces es más difícil tener compañía, aunque de vez en cuando Lucifer viene a verme, al igual que Beelzebub y Lussuria, a veces incluso Hades se pasea por aquí.
Al menos he estado al día con el desarrollo mundial, he recorrido este planeta en mi forma astral, viendo naciones nacer y caer, reinos humanos y sobrenaturales desaparecer, religiones emerger y causar guerras, ideologías políticas destruyendo a la humanidad, todo esto mientras me encontraba en mi sueño. Fue casi como ver esa cosa llamada película que inventaron los humanos.
Solo faltaban 10 segundos para la media noche, sentía como poco a poco un peso se iba quitando de mi cuerpo. Entonces lo sentí, todos mis poderes comenzaron a despertar de nuevo y el Cielo brilló en miles de colores mientras la Luna llena se alzaba majestuosamente en esa noche.
Karl miró el cielo y se quedó en shock, entonces sin esperar se teletransporto a la habitación de su hija.
"Hola, papá." Saludó la joven mientras volteaba a verlo con una dulce sonrisa.
"Sei-Seina..." Susurró casi con miedo de que todo fuera más que una broma que su inconsciente le estaba jugando.
"Estoy de vuelta, papá." Dijo para darle la seguridad que era ella y no otra ilusión.
"Finalmente despertaste..." Respondió con lágrimas comenzando a caer por sus mejillas.
(Imaginen que los ojos son rojos como los de Reiji).
"Si." Seina solo podía ver como su padre seguía en shock y poco a poco se puso de pie desde su cama y comenzó a caminar en dirección a su progenitor. Entonces sin poder aguantarse más lo abrazó.
Karl al sentir la calidez de su hija, se dió cuenta que no era un sueño o una ilusión, su pequeña princesa al fin había despertado luego de mil años.
"No vuelvas a dejarme así otra vez, princesa." Pidió mientras se aferraba con fervor a la niña en sus brazos.
"Prometo que no me alejaré de nuevo." Aseguró la muchacha con una sonrisa cálida mientras secaba las lágrimas que caían de los ojos de su padre.
"Más te vale, jovencita, porque no pienso dejarte fuera de mi vista otra vez." Afirmó con vehemencia.
"Jajaja, papá aún sigues siendo tan protector como hace años."
"Eres mi única hija, nunca dejaré de cuidarte y protegerte." Confirmo con el ceño fruncido y un leve puchero.
"Y así siempre te he amado, papá." Respondió a sus palabras mientras lo miraba directamente a los ojos.
Post final del capítulo.
Esperó les haya gustado este tercer capítulo, si es así, comenten y voten.
Con amor.
Se despide.
Marly 🥰🤗
ESTÁS LEYENDO
La Primera Sakamaki.
FanfictionNació como la primogénita, heredera al trono del Mundo Vampírico. Fue criada para convertirse en la próxima Reina, pero una traición la hizo tomar la decisión de entrar en un sueño profundo hasta que sus poderes volvieran completamente. Ahora han pa...