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MARATÓN 2/4


Changbin

En mí cabeza solo sonaba; ''Follar, follar, follar, follar''. Podía sentir mil olores dulces en Félix que comenzaban a calentarme. No se que me pasaba pero mi pene estaba erecto, mi boca se volvía agua y mis colmillos molestaban al chocar contra mis labios.

- ¿Qué...qué me esta pasando? - Solté un gemido lamiendo la clavícula de mi gato, tan suave  y pronunciada. Podía sentir a ese lobo dentro mí aullar, correr en círculos sl igual que un fresco olor a menta y cafe rodeandonos.

- Hyung... Tú olor - Gimió Félix comenzando a restregarse contra mí. Podía sentir su cola entre mis piernas, pasando por mi cuello y brazos.

Estamos en celo.

¿Disculpa, estamos? No amigo, los humanos no entramos en celo.

Callate.

- Amo, te nec-necesito -

Okay, Changbin, follas seguido con tu mascota, un híbrido... un gato.
Solo que ahora debes dominarlo, enfocarte en unirte con tú lobo, dejarlo preñado, no hay presión.

- Amo - Gimió Felix.
Piernas abiertas, labios rojos y hinchados, cabello despeinado, cola pomposa y mano estiradas a mi persona.
Este mocoso va a matarme.

- Juro que te dejaré sin caminar por insolente - Gruñi. Le di la vuelta y bajé sus pantalones junto con su boxer y le di una buena nalgada. Nadie me calienta por diversión - Bebé -

- El de amo - Juro que se le saldrán los ojos cuando lo penetre ¿Qué se cree este mocoso?

- Mío - Mordí su hombro y volví a dejar una nalgada - Mijata para mí -

- Amo - Soltó abriendo sus piernas. Se recosto en sus antebrazos a si dejando su culo al aire. - ¿Porqué ni me sigues marcando? Para ver si de verdad soy suyo... O debería ir donde el alfa Hyunjin. El es sexy -

- ¡Eres mío¡ - Grité dando una nalgada tras otra. Juro que lo partire en mil.

Sin ningún cuidado metí dos de mis dedos en su interior. Y le doy gracias a su lubricante natural... O le habría dolido como el infierno. Comencé a morder su cadera enterrando mis colmillos allí, después de quitar su camiseta a líneas.  Podía sentir la sangre pasar por mi garganta.

Sentido del gusto

Podía sentir un sabor a... La verdad no sé que, era un sabor metálico agrio, dulce. Era todo nuevo, que logró activar algo en mí que comencé a gruñir y soltar...aullidos.

- Maldita sea - Saqué mis dedos de su interior,  saque mi pene moviendolo, acariciandolo junto a su entrada y mojadas nalgas

- No juegues amo -

- Callate - Hablé dándole una nalgada. Debería ser rudo ¿De verdad? Debo dominarlo - Quiero que me digas ¿Quién es tú Alfa? -

- T...ahh - Entré de golpe en él se pudo escuchar el chasquido de mis testículos chocar contra su culo. - Tu, tú, tú, mi alfa, mí amo... Mi Chanie, soy tuyo, tú omega, tu Fefi -

- Así se habla, mi amor - Puse mi pecho en su espalda a si comenzando a penetralo de forma rápida, a la mierda eso de esperar a que se acostumbre.

Comencé a penetralo, rápido, rudo, como a él le gusta. Sin juego sin temor. Mordí su cuello donde siempre, ese hermoso y suave lugar que se mantiene rodado alrededor de dos agujeros de colmillos, mis colmillos. Me levanté sin dejar de penetrarlo, quería ver su espalda desde arriba, ver su espalda levemente bronceada siendo iluminada por las estrellas y la fogata a lo lejos.

Lobo, hagamos un trato.

Habla.

En luna llena, te dejaré estar con el omega... solo si me dejas pasarla con Félix.

¿Hablas de conectarnos?

De ser uno, pasé por mucho tiempo con los genes de cazador. Estoy listo, quiero ser un híbrido.

- Amo... Vo-voy a correrme - Tiré su cabello mirando hacia atrás, a si poder unir nuestros labios.

- Te amo - Susurre corriendonos ambos al mismo tiempo.

Ser uno.

¡Miau Fefi! || ChanglixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora