Llegamos a la mansión y Lucas estaba apunto de bajarse del auto.
-Espera...- Le dije tomando su mano.
-Que pasa amor?
Tome su mano y lo atraje de nuevo hacia el coche, el cerró la puerta.
-Tengo muchas preguntas, y creo que me asusta saber la verdad.
Lucas sonríe levemente y beso mi mano.
-Pregunta...
-Que ocurrió luego de... del disparo?
La mirada de Lucas se oscureció y creo que pudo sentir el mismo dolor que yo sentí.
-La policía llego unos minutos mas tarde, no encontraron a nadie; solo a Alva, a ti y a mi.
-Como esta Alva?
-Esta bien, Cross no la toco.
Yo asentí.
-Cuanto tiempo paso desde...?
-Dos semanas, dos malditas semanas sin ti...- Su voz se quebró.
Acaricie su rostro, me acerque a el y lo bese.
-Todo esta bien, y lo estará por mucho tiempo.
-No sabes cuanto tiempo he esperado este momento; tu y yo, juntos.
Acaricie su cabello lentamente.
-Tu padre se ha pasado todos estos días moviendo montañas para tener toda la mansión rodeada, los mejores doctores a nuestra disposición y esta preparando tu herencia.
-Mi herencia?- Dije confundida.
-El trono... el de la reina.
-El trono de la reina? Es muy pronto.
Lucas bajo su mirada y paso sus manos por su rostro nerviosamente.
-Que pasa?- Dije tomando su mano.
-Amína...
Mi vista se nublo, las lágrimas estaban apunto de salir.
-No...
-Tranquila...- Dijo tomando mi rostro en sus manos.
-Por favor... dime que le ha pasado...
-Nadie lo sabe, su salud esta empeorando cada vez mas, los doctores dicen que fue por envenenamiento.
Negué bruscamente y las lágrimas no tardaron en salir.
-Se recuperara...- Lucas tenia la mirada sin esperanza.
Lo abrace fuertemente.
-Por que lo dices sin esperanza?- Le susurre llorando.
Lucas negó y no dijo nada mas.
-Por que ninguna de las princesas volvieron a sus países?
-Ninguna quizá volver aunque se los plantee muchas veces...
-Esta bien, te has encargado de todas mis cosas?
-Claro, son mis cosas igual...- Dijo sonriendo.
Le sonreí levemente.
-Oh vamos amor, no me gusta que estés triste.- Dijo besando mi mejilla.
-Necesito verla, todos deben de estar durmiendo ahora...
-Iré contigo, tienes que estar tranquila.
Respire profundamente y abrí la puerta del auto, Lucas salio del auto y dio la vuelta corriendo, me tomo del brazo y comenzamos a caminar hacia la entrada de la mansión; al llegar cerca de la puerta todos los guardias se acercaron a ayudarme.
-Princesa! La hemos extrañado!- Dijo Adam tomando la mochila que llevaba Lucas.
-Yo también los he extrañado.
Los demás guardias abrieron las puertas de la mansión y Lucas me cargo en sus brazos para subir las escaleras.
-Puedo caminar amor.- Le dije con una sonrisa.
-Pero me gusta llevarte.- Dijo besándome.
Me bajo justo delante de la puerta de la oficina de mi padre, el toco la puerta y unos pasos apresurados se escucharon tras la puerta.
La puerta se abrió y Gonzalo me dedico una sonrisa; me abrazo y luego a Lucas.
-Mi niña...- Dijo acariciando mi mejilla.
Yo cerré los ojos, y disfrute de su caricia; si, yo no lo considero mi padre por decirlo así, pero yo no fui siempre así, yo lo ame, como una hija a su padre. Disfrute de sus caricias y de su amor. Extraño tanto esos momentos pero ya es todo igual. Mi madre, mi hermana, ya no es igual.
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El Trono de la Reina
De Todo-Buscabas esto princesa? Las luces se encendieron y mi cuerpo se heló, las cenizas habían vuelto a reunirse, las pesadillas se hicieron reales, los peores sueños se convirtieran en hechos reales. Estaba vestido con un traje negro, su sonrisa cínica...