Pokémon: El Origen

Capítulo 2: Las nuevas especies

Pokémon: El origen

Capítulo 2: Las nuevas especies

Newt llegó corriendo al gran salón del Liba en donde se estaba celebrando la fiesta, rápidamente llamó la atención de todos al agarrar el micrófono y con una gran seriedad les explicó a todos los trabajadores lo que encontraron él y sus amigos. De forma inmediata, todos los trabajadores pusieron sus manos a la obra y se dirigieron a encerrar a la rata que aún se encontraba en la jaula rota al cuidado de Axel.

Nat volvió al lugar donde se encontraba Axel y encontró a todos sus compañeros científicos reunidos, aprovechó la ocasión para decirles lo que había visto momentos antes y los miembros de mayor rango del Liba tuvieron que activar las medidas preventivas de fuga. A partir de ese momento nadie podría salir de las instalaciones sin que antes se hagan las investigaciones necesarias para corroborar que no tuvieran algún efecto tóxico contagioso o algo parecido.

Las señales de alerta del Liba fueron captadas por los hospitales y las centrales de policías cercanas, quienes acudieron al lugar de los acontecimientos. El gerente general fue el encargado de entablar comunicación con el exterior por medio de un alta voz. El mensaje fue oído por todos, nadie podría salir de ese lugar y los que entren deberán tener mascarillas protectoras y otras medidas de protección. Los médicos podrían pasar para estudiar a los pacientes, pero los miembros de la policía tendrían que permanecer fuera, solo restringiendo el paso y protegiendo la zona.

Como todos estarían encerrados, todos se dirigieron al gran salón donde se encontraban antes para comenzar una discusión sobre los hechos. Mientras los científicos del Liba discutían por quién tenía la culpa; Newt, su padre y sus amigos estaban apartados conversando entre ellos mismos sin prestar atención a los demás.

Drew: Tenías razón, hijo. No era seguro...

Nat: No diga eso señor Rod, estoy segura de que si no nos hubieran dado el día libre a la mayoría de nosotros, esto no hubiera sucedido.

Axel: Esperen, si el gas se ha escapado, ¿Por qué no se han molestado en evacuar la ciudad? ¿Soy el único que se lo ha preguntado?

Newt: Descuida, el gas tenía alta densidad, por lo que no iba a flotar como si nada. Lo más probable es que se haya disipado aquí y en los alrededores próximos, nada más.

Nat: Y por eso el Liba está apartado un poco del resto de la ciudad.

Pasaron las horas y los médicos no obtenían resultados, todo indicaba que todos estarían encerrados por varios días. Pero el más afectado sin duda fue el gerente general, quien se aisló totalmente del resto mientras que absolutamente todos los demás se las arreglaron para acomodar ciertas partes de cada sala del Liba para dormir cómodamente.

Pasaban los días y los doctores presentaban algunos avances con los "infectados", aunque eran mínimos. Por otra parte, Newt aprovechó el tiempo que tenía para investigar con ayuda de sus amigos y su padre a la rata con sobredosis de Pokérus. Al parecer, el vello que se le había caído había sido reemplazado por otro de color violeta, pero en algunas partes del cuerpo tenía color mostaza claro; además de un incremento en sus dientes principales, asemejándose más a las de un conejo.

Poco a poco, en las noticias comenzaron a salir reportajes de capturas y vídeos de criaturas extrañas que parecían tener carácter hostil alrededor de la ciudad, se trataban de pájaros con un tamaño mayor al usual o perros con una caída importante de pelaje. Esto último alertó a los científicos del Liba, que empezaron a dudar de su anterior investigación del esparcimiento máximo del Pokérus.