-¿Qué haces levantado, Izuku?- Shoto se levanta apenas nota la figura de su marido asomarse por el shōji.
-Quería tomar el aire- el pecoso deja que su pareja lo sostenga por la cintura, y pasa su brazo sobre los hombros de su contrario para afirmarse mejor.
-Deberías haberme llamado, estás muy débil para caminar solo-
-Estoy aburrido de estar todo el día en la habitación, quiero ir afuera y ver a los demás- responde, haciendo un pequeño puchero.El semi albino lo observa preocupado. Izuku tiene un estado de salud complicado, de vez en cuando vomita un líquido verdoso que desaparece a los minutos de entrar en contacto con el exterior, pero por más exámenes que se le hagan, los doctores no pueden encontrar la causa de esto. No hay explicación para lo que le ocurre, no hay daños en sus órganos, huesos o músculos, pero Shoto siente que es un efecto secundario por haber provocado la destrucción de la magia.
Con cuidado carga a su esposo y lo lleva hasta la silla que hay en el jardín, rodeada de las flores que le encantan al pecoso. Como nota que éste no quiere separarse de su persona, se sienta con él en sus piernas, ronroneando por las caricias repartidas en su nuca.
-Oye, Shoto- llama después de un largo silencio. El monstruo quita su vista de las flores y la dirige al rostro de su contrario. -Han pasado dos años, ya tengo diecinueve...-
-Lo sé- recibe un ligero tirón en su cabello.
-Déjame terminar- hace puchero. -Estaba pensando... ¿Y si tenemos un bebé? Ahora que no hay seres mágicos que quieran separarnos podemos traer al mundo a un pequeñito...-
-¿Estás seguro? No quiero que tu salud empeore- le acaricia el rostro, centrado en la sonrisa de su amado.
-Una de las pocas veces en las que me siento bien es cuando intimamos- Izuku se inclina, besa los labios de Shoto de forma fugaz y le acomoda el flequillo. -Quiero tener a un pequeño Shō entre mis brazos-
-Puedo hacerme pequeño- el semi albino deja sentado al rizado y encoge su tamaño, de forma más natural y experimentada que antes.Una risa escapa de los labios del ex príncipe, quien carga a su pequeño marido y lo alza débilmente, con una sonrisa.
-Quiero poder hacer esto con un pequeñín que tenga mis ojos y tu linda cola- comenta, bajando sus brazos para dejar al monstruo sobre sus piernas, cubriendo su boca con una de sus manos cuando siente que tiene que toser. El joven de ojos bicolor vuelve a su tamaño normal al bajarse y queda de pie a un lado de su pareja.
-Eso sería magnífico- le sonríe, extiende su mano y cuando el otro la toma, lo ayuda a levantarse. -Si te sientes bien podemos intentarlo ahora-Ignorando lo débil que está, Izuku se lanza sobre su esposo, atrapando sus labios en un beso que expresa lo mucho que desea estar con él.
ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡🌺·°¸❥↬ 🌹
-Creí que querías un bebé- el pecoso se da vuelta al oír la voz de su pareja tras él. Mira la caja de pastillas entre sus manos antes de responderle.
-Si... Pero me arrepentí, no sería justo para nuestro bebé crecer sin sus dos padres- el monstruo frunce el ceño.
-¿De qué estás hablando?-
-Tú lo sabes- le dedica una sonrisa asustada. -Me estoy muriendo, Shoto--Eso no es verdad- se acerca, tomando ambas manos del mewmano. -Sólo es algo como un resfriado, vas a mejorar y...-
-Ojalá fuese un simple resfriado, pero sabes que tengo razón, tarde o temprano, lo que tengo va a matarme- se suelta del agarre de Shoto y pasa sus brazos sobre los hombros de éste. -Y no sería justo que tengamos un bebé, porque no podré disfrutar de él, o quizás ni siquiera pueda traerlo al mundo, no quiero que sufras por mi culpa-Todoroki simplemente entierra su rostro en el hombro de su esposo, negándose a aceptar el cruel destino que le espera a su amado. Peleó tanto para estar a su lado y ahora sólo tendría que esperar a que fuese arrebatado bruscamente de sus brazos. Su mayor temor estaba próximo a cumplirse.
-No tienes porqué estar asustado- habla cariñoso el joven de ojos verdes. Shoto no sabe como su pareja lo notó hasta que ve que su cola está apretando la pierna de este. -Hicimos mucho juntos, así que estoy feliz-
-Esto no tenía que ocurrir- suelta entre dientes. -Si hubiese sabido que destruir la magia te haría tanto daño... Habría preferido buscarte una y otra vez, sé que en algún momento Omnitraxus se aburriría y nos dejaría tranquilos-
-Esa fue mi decisión, no te culpes- Izuku quiere llorar, por lo que finge una sonrisa y cambia de tema. -¿Qué te parece si nos recostamos en el sofá y vemos algo en la televisión? Ha pasado un tiempo desde la última vez-
-Prométeme algo- el pecoso asiente para que su esposo prosiga. -Si te sientes mal, dímelo, no quiero encontrarte en el suelo otra vez-
-Ya te dije muchas veces que eso fue un accidente, no tienes porqué preocuparte, Shō-Aún con ese sentimiento marcado en su rostro y alma, ayuda a Izuku a llegar al salón. Este último no quiere ser cargado, todavía puede mover sus piernas, así que quiere usarlas hasta que no le respondan más. Shoto lo ayuda a sentarse antes de ir a la cocina en busca de cosas que comer.
Con un poco más de dolor que las veces anteriores, el rizado tose un poco, cubriendo su boca con el pañuelo que lleva siempre en el bolsillo de su short; sorprendido cuando nota que entre la magia hay un poco de sangre, quizás proveniente de su herida garganta, o de alguno de sus dañados órganos.Rompe su promesa reciente y oculta el pañuelo. Ya ha asumido su destino, y a pesar de que está aterrado por su muerte, sabe que es algo que debe ocurrir. Y realmente prefiere que sea antes de volverse una bolsa de huesos inútil, una carga más para la familia Todoroki que lo ha acogido con tanto cariño, y un dolor inevitable para su familia y su amado.
Quiere disfrutar de sus últimos momentos sin estar rodeado de personas preocupadas por su decayente salud, quiere hacerlos feliz para que no lloren por él cuando ya no esté, pero sobre todo, quiere que Shoto sea capaz de dejarlo ir sin sentirse culpable por el camino que decidieron tomar.
»◦✿◦«
Les mentí(?)
Les daré unos extras cortitos, pero comenten aunque sea un puntito pls :(
Está fomesito, sorry
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Family Influence 「SvtfoE!Tododeku AU」
Fanfic«Monstruos y mewmanos no deben mezclarse a menos de que deseen que la maldad invada al Reino». Aquellas palabras transmitidas a incontables generaciones provienen de la cruel historia de amor de una incomprendida reina que rompió las reglas y llevó...