Capítulo 8

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Un sonido extremadamente irritante inundó mi habitación y termino despertándome, cuando por fin habri los ojos conseguí averiguar que era eso que tanto me irritaba, se trataba del despertador, ya eran las siete de la mañana y tenia que prepararme para ir a clase, apague el despertador y baje a la cocina a desayunar, mi madre ya se había ido a trabajar pero por suerte para mi me había dejado el desayuno preparado y junto a él una nota en la que ponía que hoy no estaria en todo el día que tenía la comida y la cena en la nevera, y que me quería claro eso no podía faltar en las notas que mi madre me dejaba.

Hoy sería un día interesante, segundo día de clase y además por la tarde Alex me iba a llevar a conocer la ciudad. Después de desayunar subí a mi cuarto y cuando entre vi mi teléfono vibrando en la mesilla, me acerque a cogerlo y entonces vi el nombre de Leo, cogí rápidamente y conteste.

-Hola amor, felicidadeeeess ya eres capitán de el equipo!! - dije entusiasmada gritando.

-Cari la resaca, me va a esplotar la cabeza. - dijo el riéndose

-Lo siento jajaja, esque estoy feliz y orgullosa, por fin lo has conseguido! - dije más lo más calmada que pude.

-Lo sé, yo también estoy muy feliz.-

-Por cierto que tal celebrándolo? - pregunté intrigada.

-Muy bien salimos todo el equipo y fuimos a la discoteca que está cerca de la cafetería a la que solíamos ir los miércoles, me lo pasé muy bien pero te eche mucho de menos, ojalá uvieras estado aquí conmigo.- note la tristeza en su voz.

-Lo sé amor yo también quisiera estar allí contigo, apollandote en todo. Te echo de menos. - dije apenada.

-Y tu que tal por allí, algo nuevo que yo deba saber? - me dijo interrogante intentando cambiar de tema, los dos sabíamos que si seguíamos por hay terminaríamos llorando. Así que le agradecí que cambiase de tema.

-Pues de momento bien, te puedes creer que ayer mi madre montó una reunión con los vecinos y tuvo éxito. Se nota que a mi madre le gusta esto. - le dije con cierta indignación.

-Enserio, conociendo a tu madre no me esperaba que nada más llegar hiciese una fiesta. - dijo riendo, yo también me reí. -Y hoy que vas a hacer? -

-Pues dentro de nada salir de casa para ir a la universidad y por la tarde he quedado con Alex, que es una amiga que hice ayer en clase y me va a enseñar la ciudad, bueno o los lugares más importantes de ella. Después a la noche te cuento con detalle. - le conté el día que me esperaba mientras el escuchaba con atención.

-Ui, entonces hoy te espera un día emocionante eeh- dijo riéndose y yo puse los ojos en blanco. - A la noche me cuentas todo, ahora tengo que colgar que tengo que salir para clase. - me contesto apenado.

-Vale amor, luego te cuento. Te quiero mucho. - conteste esperando su respuesta.

-Yo también te quiero mucho cari. - me dijo en un tono suave y colgó.

Cuando colgó sentí un vacío en mi, le echaba tanto de menos, su voz, su manera de mirarme, de hablarme, su sonrisa, ses pecas, su tacto, su olor, esa colonia que siempre se echaba, que sabía que me encantaba, sus bromas, todo lo echaba todo de menos y lo más difícil era que sabia que no podía hacer nada para solucionarlo y estar otra vez a su lado y eso me mataba por dentro.

Lo estropeaste todo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora