La Casualidad

Capítulo 5. Pesadilla.

                                                                                  -Aybüke-

Después de mi primer día grabando las escenas de Söz llego a casa molida y solo quiero darme una ducha de agua caliente y acostarme, pero para mi sorpresa me encuentro a mi hermano pequeño con sus amigos fumando crack.

- ¿Qué hacéis?, fuera todos de mi casa o llamaré a la policía- espeto contra los amigos de mi hermano- HE DICHO FUERA- Grito, consiguiendo que todos se larguen y al ver que mi hermano intenta escapar lo agarro por el brazo para impedirlo.

- Suéltame, no tienes ningún derecho a detenerme aquí, suéltame- me espeta.

- ¿Así es como quieres pasar tu vida?, fugándote de la rehabilitación que te están pagando papá y mamá, yéndote a fumar esa mierda con gente que dicen ser tus amigos pero solo te quieren para que les proporciones drogas y las putas que os tiráis. ¿Es que a caso quieres matarte?- digo entre lagrimas.

- ¿A ti que más te da lo que haga?, no soy tu hermano de sangre, mi destino es este, este es el mundo en el que me crié la mayoría de mi infancia no la vida idílica en la que tú te criaste. Si quiero acabar como la puta de mi madre biológica es mi problema- espeta con rabia mirándome a los ojos mientras intenta deshacerse de mi agarre pero no tiene la fuerza suficiente.

- Mírate en lo que te has convertido, eres una copia de tu padre biológico, ¿es eso a lo que aspiras?- cuestiono sabiendo que le acabo de dar en su punto débil y temiendo su reacción.

- Retira lo que has dicho- me amenaza levantando su mano derecha.

- Si no ¿qué?, ¿Me pegaras una paliza como él hacía con tu madre?- nada más termino la pregunta mi hermano pequeño me da una bofetada y antes de que yo reaccione me coge para posteriormente estamparme la cara contra la mesa de cristal del salón que tiene llena de drogas y dinero. Me va a dejar una bonita marca en la cara que hará que no olvide el monstruo en el que se ha convertido.

>> Abro los ojos lentamente, adaptándome a la luz blanca. Caigo en el instante por el olor y el pitido de mis oídos que sigo en el hospital. Parpadeo con lentitud intentando olvidar la pesadilla que he tenido mientras escucho la voz de Furkan contestándole a alguien, ¿es mi hermano?

- ¿Mehmet?- digo mientras bostezo e intento levantarme al ver que me quedé dormida encima del regazo de Furkan- ¿Qué locuras estás diciendo, y qué haces contándoselas a mi compañero?

- Digo la verdad Aybük, si le ha dado ese ataque al corazón a papá ha sido por mi culpa, entró a mi cuarto y encontró por error porros.

- ¿Qué has hecho qué?- cuestiono mientras me levanto de un respingo y me llevo a mi hermano un poco lejos para que Furkan no nos escuche.

- Lo siento hermana, soy débil como lo fue mi madre y he vuelto a caer, no encuentro trabajo por culpa de mi pasado. Pero no son para consumo propio lo juro, solo estoy vendiendo.

-Oh, qué alivio más grande Mehmet, me alegra saber que ahora en vez de ponerte hasta el culo le vendes esa mierda a otros para que lo hagan. ¿PERO ES QUE NO HAS TENIDO SUFICIENTE Y NO HAS APRENDIDO NADA?- cuestiono mientras le agarro del cuello de su camiseta.

-Aybük cariño, aquí no por favor- me suplica mi madre intentando separarme de mi hermano.

- Vamos a que te dé el aire- sugiere Furkan cuando me ve llorando en el pasillo.

Mientras cogemos el ascensor no soy capaz de hablar, soy un mar de lágrimas en los brazos de Furkan que intenta consolarme como puede.

- No llores por favor, grita, pégame si es lo que quieres pero deja de llorar- me pide mientras levanta mi cara y seca mis lágrimas con su dorso y me besa la frente.

>> Salimos y damos un paseo por los alrededores del hospital, nos sentamos en el primer banco que nos encontramos. Cierro los ojos, inhalo y exhalo repetidas veces para relajarme pero no funciona.

- ¿Estás mejor?- pregunta Furkan mientras acaricia mi mano.

- Sabes, desde que tengo uso de razón desee tener un hermano pequeño, mamá antes de tenerme sufrió un aborto natural y otro cuando yo tenía apenas tres años. Por lo que los médicos aconsejaron que si quería otro hijo no lo podrían tener de forma natura. Recuerdo el día en el que fuimos al orfanato de Ankara, yo tenía unos doce años y desde que tenía uso de razón soñaba con tener un hermano o hermana. De entre todos los niños que había me llamó la atención uno al que nadie quería adoptar. Por culpa de las adicciones que sufrió su madre biológica, Mehmet nació con tan solo cinco meses y sufría el síndrome de abstinencia neonatal, por culpa del ambiente en el que se crió los primeros diez años de su vida fue un niño problemático. Por eso yo lo quise, detrás de todo eso yo veía a un niño indefenso al cual su madre abandonó en las puertas del orfanato porque no podía compaginar su vida como puta con un bebé- consigo confesar entre lágrimas. No sé qué hago contándole todo esto, solo sé que siento que me he quitado un gran peso de encima al hablar por primera vez sobre el problema de mi hermano.

>> Furkan no dice nada, se limita abrazarme y dejar que llore sobre su camiseta, le agradezco enormemente que esté conmigo en un día como hoy. No sé si hubiese aguantado toda esta situación si estuviera sola.

- Será mejor que vayamos para dentro, está haciendo demasiado frío y no quiero que enfermes.

- Tienes razón, será mejor que volvamos a dentro y no preocupe a mi madre- consigo decir después de secar mis lágrimas- Gracias por esto Furkan, todo lo que has hecho hoy no lo hace cualquiera y es algo que no olvidaré- confieso mientras me abrazo a él con fuerza y cuando nos separamos me besa en la comisura de mis labios.

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Hola a todxs!

Por fin he vuelto, perdonadme pero llevo unas semanas con exámenes y estando mala no me daba la cabeza para escribir. Aquí tenéis el primer capítulo del maratón, que espero publicar mañana el segundo.

¿Qué pensáis del hermano pequeño de Aybuke?, ¿seguirá dando problemas? y ¿como veis la relación con Furkan?. Espero que os esté gustando y entendáis un poco más a nuestros peter y wendy.

Gracias por la paciencia, nos leemos🧚🏻‍♀️🧡