Quisiera gritarle al mundo de groserías, crueldades y blasfemias.
Quisiera poder ser capaz de poner todo ese coraje que tengo que algún lado y simplemente dejarlo ahí, lejos de mí.
Quisiera ser capaz de romper todo,
Romperlo tanto que deje de sentirme tan rota yo.
Quisiera ser capaz de gritar hasta que se el aire del mundo se termine y así poder dejarme de sentir tan desesperada y frustrada.
Quisiera poder juntar todos mis momentos favoritos en la vida y vivirlos una y otra vez, para poder ser así de feliz siempre.
Quiero todo y a la vez no quiero nada.
Quiero sentirme llena de vida, feliz, loca, eufórica, efímera.
Pero hay días que simplemente quiero que todo se acabe, que literalmente sea como un interruptor y simplemente con un toque, todo se apague.
Quiero encontrarme pero al mismo tiempo no termino de perderme.
Quiero amar y al mismo tiempo quiero estar sola.
Quiero mucho y al mismo tiempo nada.
¿Qué te digo? Soy así.
Soy todo o nada.
Quisiera saber el porqué, no se si algún día lo haré.
Quisiera ser capaz de ser yo sin rendirle cuentas a nadie, sin tener que ser alguien para nadie, quisiera ser yo, solamente yo, correr, gritar, cantar, bailar, ser simplemente, ser.
Y también quisiera dejar de ser yo.
Quisiera dejar de escucharme, dejar de escuchar esa voz en mi que me me lleva a la locura, que me lleva a mandar todo a la chingada, quisiera dejarla ir porque me hace daño.
Pero cuando la escucho, cuando no la ignoro, son los recuerdos, porque todo se esfuma y soy yo, solamente yo.
Y que esa no pueda ser mi vida, me dan ganas de gritarle al mundo que no es justo, me gustaría rogarle a Dios por ser alguien que sea capaz de querer lo que se le llama correcto y odiar lo malo.
Quisiera no sentirme dos personas diferentes.
Quisiera dejar de sentir qué hay algo dentro de mi que no me permite llegar al final del camino.
Quisiera dejar de cavar este hoyo que sigo y sigo cavando, porque parece que jamás terminará.
Quisiera, solamente quisiera ser feliz.
Ser genuinamente feliz.
¿Quiero demasiado?
