Todo inicia cuando somos pequeños,
Nos hacen creer cosas hermosas para "hacer volar nuestra imaginación"
Pero poco a poco la magia se va.
Descubres la verdad.
De repente ese príncipe encantador que te prometen en todas las películas, resulta siendo el peor de los villanos.
De repente tu realidad se esfuma para ser otra.
Y todo te llega sin previo aviso.
El llega con su papel de cuento de hadas y te hace creer que eres la princesa del cuento, cuando en realidad solo eres la cogida de la semana y sí tienes suerte del mes.
Llega y te dice que eres hermosa y perfecta, que eres única y de la nada. Te tiene, lo sabes, pero no huyes por que de eso se trata el amor, todo es una gran perspectiva creada por fantasías inexistentes.
Simplemente entregar la pistola, dejar que te apunte a la cabeza y rezar por que no te mate, por que eso es estar enamorado, confiar en que la única persona que tiene el poder de destruirte no lo haga.
Pero... De repente apretá el gatillo, escuchas el golpe del cañón y el resto es negro.
La pared esta pintada con tu sangre.
Y todo fue gracias a esta gran perspectiva de que los finales felices existen, cuando en realidad solo son cuentos para niños.
