En un segundo

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Hoy murió el segundo del que alguna ves me enamore. 

El que hizo despertar tantas curiosidades y me hizo preguntarme de que trataba el amor.
El segundo niño que me rompió el corazón y lo hizo añicos. 

El segundo niño en el que confíe.
El segundo beso que di.
El segundo en todo...

Pero así no es como quiero recordarlo. 

Quiero recordarlo con su sonrisa burlona y sus chistes malos.
Con su esencia de niño malo, que siempre rompía las reglas al igual que los corazones. Era tan guapo y estaba pasado de bueno, pero eso no era lo que hacia que la gente se enamorará de él. Era su actitud despreocupada, como gozaba cada puto momento y sus frases ridículas y su falta de miedo a la vida. 

El niño que siempre cuido a su mamá y a su hermana cuando su papá estaba fuera. 

Yo creo que debe de ser recordado por su valentía y su forma ligera de caminar.
Por su forma de ver al mundo. 

El y yo éramos tan parecidos en tantos aspectos pero en el que mas lo éramos, era en la música. 

Fast car  era nuestra canción favorita, porque queríamos huir lo más lejos que pudiéramos de esta ciudad.
Looking for paradise era nuestra canción, yo cantaba las partes de Alicia Keys y él las de Alejandro Sanz, éramos los peores cantantes del mundo y jamás nos aprendimos la letra completa así que la repetíamos la primera estrofa y el coro una y otra vez.

Con Paradise City bailamos sin control, gritamos y cantamos hasta que nos corrieran del salón y aun así no podíamos parar de reír. 

Te nos fuiste de las manos de la forma que los dos nos queríamos ir ¿no? Rápido. Literalmente en un segundo.

Después de que me rompiste el corazón te odie tanto, en serio no sabes cuánto. 

Pero al final te perdone y quería volver a ser tu amiga y no pude.
Probablemente debí de haberlo hecho.

Y ahora estoy aquí llorando por sentimientos que no sabia que tenia hacia ti, te ame, te odie y ahora te extraño de alguna forma. 

Supongo que eso es lo que siempre recordaré de ti, ese beso que me tomo por sorpresa, cómo me consolaste cuando te necesite, cuando nos acostamos en el campo de golf a ver las estrellas y como rodamos como niños sobre esa colina. 

Eso es lo que siempre recordaré cuando piense en ti.
Porque antes de todo ese remolino de sentimientos, fuiste mi amigo, durante años, te conocí desde que eras un niño regordete con brackets, hasta el día que dijiste que jamás te ibas a enamorar riéndote de mejilla a mejilla y al final como todos caiste Miguel. 


Nuestros caminos ya se habían separado.

 Y al final te enamoraste y yo me enamore. 

Y simplemente olvidamos esa noche bajo las estrellas. 

Bueno, yo jamas la olvidare, porque si fuiste el primero en algo, fuiste el primero que me vio a los ojos y me dijo que era hermosa. 

Y eso sin importar que pase a una niña jamás se le olvida, gracias por eso.

Ojalá te hubieras enterado que te ame y que fuiste mas que un amor pasajero.
Ojalá te hubiera hablado cada vez que pensé en ti durante estos años. 

Pero no lo hice y ahora estas muerto y yo me siento tan estupida.  

Pero supongo que tenías que darme una ultima lección ¿no? 

Gracias por tu amistad y tu amor.
Gracias por jamás ser lo que los demás esperaban de ti.
Y gracias por las enseñanzas.

No te olvidaré.
Porque mi querido amigo, te fuiste con un final épico.
Mejor dicho irónico, como eras tú. 

No te preocupes podrá olvidarte. 

Te fuiste con una sonrisa en tu rostro, en tu preciada moto y a exceso de velocidad. 

Para mí nos excediste Miguel, te olvidaste de todos y en un segundo te fuiste. 

Hacías eso seguido con todo, era parte de tu gracia. 

Gracias por marcar nuestros corazones con tu alegría y por darme el pequeño placer de conocerte, fue un honor. 

Recuerda que siempre tendrás a tus 3 chicas esperándote.
Ojalá te hubiera visto una vez más, porque después de todo... Siempre cuando te veía mi corazón aun latía a 1000 por hora.
Fuiste alguien que simplemente me marco y siempre lo serás.
Miguel Zepeda Toledo
7 de Julio de 1998 - 6 de Enero del 2016

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