Capitulo 33

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Capítulo 33: El Primero de 4

Mi nombre?

Me llamó Tanata okumi, tengo 18 años y mido casi 1.90m, tengo el cuerpo bastante definido debido a que entrenaba desde pequeño, mi padre fue un boxeador y siempre entrené con el

Cuando mi padre murió solo estábamos mi madre y yo, ella muy poco esta en casa, su trabajo le quita mucho tiempo ya que trabaja en un hospital

Yo por mi parte estoy comenzando la universidad y en este momento me encuentro camino a la escuela de mi prima

-Primo!, primo!, primo!, primo!!! -grito reiteradas veces al verme, luego corre hacia mi y yo la levanto colocándola en mi hombro

Es una niña bastante tierna, además lo bueno es que al ser inocente no se asusta por mi tamaño

Luego, volvimos a casa de mi tía, últimamente he estado mucho tiempo aquí, quedarme en casa significa estar solo y no me gusta

Al llegar baje a mi prima y entramos, logre ver a mi tía en la cocina

-Oh!, Tanata, gracias

-No hay problema

-Sabes, quiero hacerle pasta a la niña y un poco para ti, puedes ir a comprar las verduras?

-Claro, ya vuelvo

Me devolví y salí de la casa, no sin antes escuchar el grito de siempre

-Taanata! No olvides traerme un dulce!

-Mía! Deja de pedirle cosas a tu primo!

-Pe-pero mama!

Haha, es el pan de cada día, supongo que la consiento mucho, quien sabe...

Mientras caminaba hacia la tienda divise a una chica la cual conocía muy bien, estuve enamorado por 3 años de ella cuando estábamos en el liceo, el día que decidí decirle que me gustaba, alguien más se adelantó, cuando ella lo acepto yo decidí apartarme, sentía que tres años eran suficientes como para mantenerme con alguien que me gustaba y no podría decirlo

-Ta-Tanata!!

Me perdí en mis pensamientos y no me di cuenta que ya me encontraba al lado de ella

-Hola Arisa

-Hace mucho que no te veo, seguro y te habías olvidado de mí

Si claro

-Por qué lo dices?

-Por nada...

Incomodo, odio cuando la conversación se acaba, improvisaré

-Y, que tal como vas con Maikol?

-Ja con ese patán, no duramos ni una semana

Y yo creí que aún seguían juntos

Sin darme cuenta habíamos llegados la tienda

-Buenos tardes

-Buenas tardes, que se le ofrece

-Me vende dos cebollas, dos tomates y...

-Quieres hacer pasta? -Preguntó ella dando en el blanco

-Si

-mm no puedo creer que aun te guste

-Hasta que muera me seguirá gustando -respondí sin remedio

-Haha

Se río de mí y le dijo al vendedor el resto de cosas que debería usar para hacer pasta, la verdad no lo recordaba

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