| ¿me estaré volviendo loco? [Kookmin Hibridos] |

|five, ¿tanto te cuesta entenderlo? |

un gran día soleado hacia allí afuera, el sol pegaba fuertemente contra todo lo que había allá afuera. una pequeña brisa con un viento cálido y caluroso recorría todo el bosque.
¿un día perfecto, no? bueno, al parecer a tres individuos era mejor estar encerrados dentro de la gran cabaña que disfrutar del hermoso día.

...

tres individuos.... uno más pequeño que los otros tres. sentados en los sofás de la sala principal, un ambiente tenso, mientras dos de los individuos miraban atentamente al dueño de la cabaña, uno buscando explicaciones y otro sólo lo miraba con burla.

el pequeño azabeche se encontraba nervioso, no, lo que le sigue. ¿como le explicaría a su mejor amigo de toda la vida que ha estado ocultando a un hibrido en su casa?. realmente algo de locos. el antes nombrado, estaba en el sofá del azabeche, mientras trataba de analizar lo que acababa de presenciar.

—  ¡yaaaa!, dejen de mirarme así. —

dijo el azabeche ya frustrado por la situación, se dejó caer lentamente sobre el sofá que se encontraba detrás suya. mientras suspiraba pesadamente y maldecia en voz baja.

el peli negro y el rubio lo miraron sorprendidos, sin duda, el grito agudo del pequeño azabeche les había asustado.
sin embargo, el peli negro sonrió divertido, al ver como el pequeño azabeche se frustraba y el rubio se enojaba.

— jimin, ¿puedes decirme de una maldita vez por qué esté idiota de la nada se transformó en un tigre? —

dijo el rubio ya cansado, mientras agarraba sus cabellos con desesperación y buscaba una explicación rapida. obviamente no se dio cuenta en el tono que le había hablado al pequeño azabeche.

— a ver idiota, estás en la casa del pequeño humano. así que aquí al menos lo respetas. —

dijo el peli negro alterado, mientras se paraba del sofá y se posicionaba frente al rubio, mirándolo a los ojos. con aquellos ojos color azul oscuro que poseía el peli negro, encontrandose con los ojos grises del rubio.

el rubio quiso hablar, pero el peli negro lo interrumpió, aún más enojado. mientras se acercaba amenazante cada vez más al rubio.

— ¿quieres saber que carajos viste?, pues bien, ¡a un puto híbrido! ¿tanto te cuesta entenderlo?, te creía mas inteligente. —

dijo el peli negro nuevamente, mientras sus ojos se iban oscureciendo cada vez más a causa del enojo.
el rubio tembló por unos segundos, pero supo mantener la mirada en alto y desafiarlo. aunque tal vez esa no era la mejor opción.

el rubio ante las palabras del peli negro, solo pudo quedarse en un pequeño shock, procesando todo. mientras miraba sucesivamente al pequeño azabeche y al peli negro.

el recién nombrado, ya se estaba hartando, así que simplemente se transformo en aquel gran y precioso tigre bengala, para luego mirar al rubio con furia e ir a la habitación del pequeño azabeche.

— minnie... perdóname por hablarte así, pero... por favor dime que esto es una broma de mal gusto. —

dijo el rubio aturdido, mientras caminaba hacia el pequeño azabeche y se sentaba a su lado, mientras lo abrazaba por los hombros.

el azabeche correspondió a su abrazo gustoso, y negó repetidas veces con la cabeza. mientras suspiraba nervioso.

— no es una broma de mal gusto, ni una broma ni nada. es real, y estoy viviendo con el. —

dijo en un susurro el azabeche, mientras hundía su cabeza en el pecho del rubio, mientras el recién nombrado solo miraba a ningún lugar en específico, procesando todo.

una vez el rubio se pudo tranquilizar y entendió la situación. bueno, tampoco es como si tuviera otra opción.
se separó del azabeche y le sonrió, con esa preciosa sonrisa cuadrada de solo el tiene.

— ¡casi lo olvido!, ¿te acuerdas de mi amigo min yoongi?, bueno, se esta hospedado en Seúl. y ya sabes, ambos están solteros, ambos buscan un amooor~.—

el rubio trató de tranquilizar el ambiente, dándole esa increíble idea al pequeño azabeche. cosa que hizo reír al recién nombrado a carcajadas.

el rubio sonrió en grande y espero paciente la respuesta del azabeche. mientras acariciaba su pequeña mano.

— ¡nunca cambias, taetae!. pero, acepto tu propuesta. pero no prometo nada, ya que no se como puedan terminar las cosas. —

dijo el azabeche mientras se sonrojaba y reía junto a su mejor amigo. mientras el rubio solo chillaba de la emoción, al pensar que su amigo podría salir con su mejor amigo.

pero, ninguno de los dos se percató de que había alguien más escuchando todo desde las escaleras.

¡HOLAAAAA,! ¿ME EXTRAÑARON?