La marca de Lujuria

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Dos siluetas saltan detrás de ella , Iyiro y el lobo se posan frente a ella , sin dudar el cachorro muerde la mano del hombre y el niño salta dando un fuerte golpe en el pecho de este villano, el golpe lo hace retroceder un poco.
Ella trata de gritar y detenerlos pero su miedo le impide si quiera pensar solo puede mirar la película inmóvil, el lobo presiona con toda su fuerza.
Iyiro cierra sus ojos por un leve segundo y un rojo carmesí se apodera de sus pupilas , repetidamente golpeada al hombre en el mismo lugar hasta que contiene su mano izquierda y salta para golpearlo en la barbilla, el ataque eleva un poco al enemigo, el lobo cae junto al pequeño.

De la nada una fría escarcha cae en el niño , el cachorro mueve su cola e inicia a dar vueltas.

- Yo también sé patear - Exclama Bertseker con el mismo movimiento de su enemigo le impacta enviándolo lejos.
La escarcha blanca cambia de forma al antojo del joven pelirojo, siete estacas crecen del suelo , alcanzan al gran hombre en su caída.

- Nana , ahora - Grita Bert apoyándose en su hermanito
- Na nana - Repite Iyiro agitado con la voz un poco rota.
Las lágrimas bajan por su rostro, con una débil sonrisa responde a sus hermanos , abre sus brazos y sus manos. La piel de los codos hasta los dedos se torna roja , en su rostro se refleja un tenue dolor un segundo más tarde de sus muñecas desprendió dos alabarnas hechas de fuego.
Al hacer contacto con el enemigo se eleva una pared de fuego, vapor y humo llenado gran parte del lugar.
Los cuatro miran fijamente esperando encontrar un cadáver calcinado o al menos alguna prueba de victoria.

- Creo que ya acabo todo - Dice Bert mientras se sienta junto a su hermana, la percepción de todos se activa en el mismo instante el peligro no ha desaparecido.

Ambos niños se posicionan uno al frente y el otro atrás de la chica, desean proteger a su familia.

- Realmente serán una cena digna de la gula del averno - Exclama la voz del extraño por varios lugares al mismo tiempo, de la nada Iyiro recibe un poderoso golpe en el estómago están rápido que ninguno pudo verlo , el aire comienza a escapar de sus pequeños pulmones y recibe otro impacto en su cuello y parte de mandíbula.
Este ataque es mucho más fuerte que el anterior , un fuerte estruendo nace de la mandíbula del pequeño mientras sale despedido por el aire sus ojos pasan a ser blancos y todo su cuerpo se relaja hasta impactarse contra el suelo.

Casi al mismo tiempo el hombre aparece frente a Bert sin su camisa la cual ha sido abrazada por las llamas.

El niño está cansado, muy golpeado y aún así apunta su katana con una débil sonrisa voltea a mirar a su hermana - Es el más llorón y débil de los tres cuídalo bien - Exclama Bertseker inmediatamente lanza su espada y logra penetrar el muslo izquierdo de su rival, se elava usando su escarcha y crea en su pierna derecha una gran estalactita de hielo.

Al golpear al hombre el hielo se transforma en miles copos gélidos que caen decorando la batalla.
La joven entiende que su hermano no puede ganar , que solo puede obtener un poco de tiempo hasta que él llegue.

Al finalizar su magnifico ataque el hombre ya no está solo el arma impregnada en la tierra, Nana eleva su mirada solo para apreciar como estrangulan a su hermano hasta dejarlo inconsciente, con un aura aterradora desciende hasta estar nuevamente frente a ella , ambos niños están en el suelo inconscientes.

- Te comeré primero eres la más fuerte pero te rehúsas a usar tu poder por proteger a tu hija , eres ingenua aunque hubieras peleado...

Una lluvia de fuego le hace callar , la chica arremete una y otra y otra vez contra el sujeto hasta que su cuerpo empieza a quemarse - Nadie toca a mis hermanos - Grita Nana llena de furia atacando sin parar.
Unas amargas lágrimas salen de sus ojos,llora de ira no de dolor, detiene sus ataques sus dos manos están quemadas cubiertas de sangre - No puede estar bien al menos no totalmente , ahora solo debo exorcisarlo - Piensa ella caminando en busca del cuerpo , él cachorro se encuentra al lado de su dueño lamiendo su rostro.

- Lo admito son persistentes , serian buenas mascotas - Replica el extraño ser , de la nada aparece frente a ella y le otorga un cabezaso , cae completamente inconsciente en ese instante el pequeño lobo salta para tratar de morderlo , como si fuera un balón le acierta una poderosa patada , lo envía lejos golpeándolo contra un árbol, él animal queda emitiendo un leve lamento inmóvil.
Con una cara inexpresiva sujeta a la chica del pelo , a Bert de un pie y avanza hacia el último.

Una onda de aire estalla en toda la zona acompañada de un inimaginable rugido emitido por alguna bestia mitológica perdida en una parte de la fantasía.
Iyiro se pone en pie con sus ojos completamente rojos , de repente una ráfaga de aire nace en el abdomen del hombre, la sangre salpica todo a su alrededor este viento a causado un enorme agujero en su abdomen.

- Bert , Na na - Susurra el niño mientras cae inconsciente nuevamente.

~•~

- Ese niño, tan diminuto, lo quiero, lo quiero , lo quiero , lo quiero , será mío. - Exclama una silueta femenina en un lejano castillo, ella abre un pórtico en dirección al bosque.

~•~
- Maldito mocoso como pudiste herirme a mi a la gula , mi trabajo es llevarlos pero te mataré aquí mismo no importa que castigo me den , te comeré - Grita el hombre , diversas venas resaltan de sus brazos y cuello , la herida no cierra el ataque ha sido tan fuerte para causar un daño prolongado.
Suelta a los otros chicos y sujeta a Iyiro del cuello

- Okui - Clama una voz femenina

De inmediato se postró de rodillas mirando al suelo , dejo al niño de lado y su cuerpo comenzó a temblar , su terror se puede oler casi es tangible
- Mi señora .

- Calla Okui , no tienes el derecho de decir mi nombre , no temas , no acabaré con tu misera existencia aún.
Solo vengo a informarte que si tocas a mi pequeño desearás nunca haber sido creado, los dejaremos vivir por ahora - Ella se interrumpe para tomar un trago de su copa - Quiero que él mejore y será un espectáculo divertido si son fuertes como su maestro - Exclama una hermosa mujer vestida con un elegante vestido negro pegado a su cuerpo, sus senos casi explotan por el escote de su ropa , su cadera es muy firme y sus glúteos son muy definidos, su piel es casi tan blanca como la luna , sus labios son gruesos y rosados, sus ojos son completamente negros sin ninguna parte en blanco, sus pestañas son largas y curvas, sus cejas son muy finas, su cabello es muy largo llega hasta su cintura , un color rojo carmesí decora todo su pelo, camina sensualmente hasta Iyiro , lo toma en sus brazos mirándolo con una sonrisa más bella que una lluvia de estrellas lo presiona entre sus pechos - Todo estará bien mi pequeño , ya estoy aquí - Susurra la preciosa dama en el odio del pequeño al silenciar su voz pasa lentamente su lengua dentro de su oído, la dezlisa cuidadosamente por su cuello hasta llegar a sus labios y le otorga un tierno beso, en medio de este introduce su lengua hasta encontrar la de él...

- Hora de irnos Okui, sabes lo que significa cuando algo tiene mi marca - Dice ella mientras baja lentamente al niño y besa su frente en forma de despedida.

Sin decir nada la gula solo asiente en un parpadeo desaparecen.

Iyiro se eleva por un instante levitando por si solo , una sustancia negra recorre cada una de sus venas al terminar cae nuevamente en su antigua posición.

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