✨Tú eras una cantante argentina muy reconocida en el ambiente del reggaeton, contratada por eventos grandísimos, y ganadora de premios importantes, habías hecho colaboraciones con grandes artistas de la música urbana, tales como Bad Bunny, Paloma Mami, y artistas argentinos✨
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-Bueno, esto no está funcionando- El fotógrafo suspiró viendo que Erick no se animaba a acercarse a más de treinta centímetros de mí y reímos -Chris, tú que sabes- Dijo haciéndole gestos a uno de los chicos que estaba detrás del fotógrafo.
-Voy- Christopher se acercó.
Puso sus manos en mi cintura rápidamente quedando a pocos centímetros de mí, y los chicos silbaron haciendo que él sonriera.
[...]
-Siempre he querido preguntarte qué dice en tu último single, si tus dones o condones- Susurró y sonreí.
-Tus dones- Respondí. Puso sus manos en mi cintura pegándome a su cuerpo y sus amigos comenzaron a silbar.
-Otra duda de muchos, ¿por qué eres tan linda?- Se acercó más a mi rostro.
-Me pregunto lo mismo desde que te vi- Rápidamente unió nuestros labios. Los suyos eran gruesos y suaves, y tenían sabor a menta. Puse mi mano en su nuca intensificando el beso, y unos segundos después nos separamos por falta de aire. Le guiñé un ojo, y miré al fotógrafo.
-Chicos... Impresionante, la verdad no hay otras palabras... Eso es todo por hoy, perfecta Sofía, como siempre.
Le sonreí y me dirigí a Juliana con una sonrisa.
-Vos que tanto soñabas con comértelo- Rodó los ojos sonriendo.
[...]
-¿Así estoy bien?- Le hablé a Juliana y ella asintió.
-Estás re diosa- Aseguró retocando su labial, y me miré en el espejo de cuerpo completo. Mi pantalón corto de cuero negro combinaba con mi top también negro de tirantes. En mis pies tenía zapatillas, porque se me hacía más cómodo.
Nos subimos a la camioneta con Omar (mi productor) que también quería venir con nosotras, y fuimos rumbo al lugar donde se hacía la fiesta, osea el hall de un lujoso hotel.
Después de saludar a todas las personas que conocíamos, fuimos a unos sillones a sentarnos, y a charlar, porque con tanta gente, se nos hacía imposible bailar.
-Eu, si no vi mal, Zabdiel estaba en la barra- Habló Juli -Debe estar con los chicos, si Renato los deja salir, van todos juntos.
-Que ganas de tomar que me dieron- Me levanté rápidamente haciendo que rieran -¿Quieren algo?- Negaron y me dirigí a la barra, donde habían un par de personas.
-Volvemos a encontrarnos- Alguien puso sus manos en mi cintura y me habló al oído. Sonreí al escuchar esa voz y me di la vuelta.
-Vélez- Sonreí -Que casualidad, ¿No me estarás siguiendo?- Sonrió.
-Claro, no desperdiciaría una chica así- Se sentó en una banqueta al frente de la barra y me senté a su lado cruzando las piernas para parecer femenina, y que no conociera mi lado masculino tan rápido.
-¿Así cómo?- Apoyé mi codo en la barra y descansé mi mentón en mi mano.
Me guiñó un ojo y miró al bartender.
-Dos tragos, lo mismo que anoche- El bartender asintió y se fue a prepararlos.
-¿Lo mismo que anoche? ¿Por qué me sueña que se hospedan en este hotel?- Mordí mi labio inferior al ver que Chris los estaba mirando.
-Estás en lo correcto- Me sonrió y el bartender nos entregó los tragos -Yo invito.
-No, ¿qué haces? Esperame que busco a Juli...
-No, ¿cómo crees mi amor? Yo invito- Volví a sentarme.
-¿Te casas conmigo?- Pregunté y rió.
Hablamos por unos minutos, y tal vez las ganas nos invadieron, y nos encontrábamos besándonos tal vez de forma un poco desesperada.
Tomó mi mano y me condujo hasta el ascensor. Una vez que las puertas se cerraron, me apoyó en la pared y me besó lentamente. Pasé una mano por su estrepierna y suspiró.
-Espera o no tendré otra opción que tomarte aquí dentro- Susurró y atacó mi cuello.
Las puertas se abrieron segundos después y me condujo por un pasillo que se me hacía realmente eterno. Entramos a una gran habitación, y luego de ponerle seguro a la puerta, lo empujé haciéndolo caer en la cama. Me subí sobre él y saqué su remera, admirando su abdomen trabajado. Me moví hacia adelante y hacia atrás haciendo que colocara sus manos en mi cintura y echara su cabeza hacia atrás mientras maldecía en voz baja.
Bajé su pantalón junto con su bóxer y metí su miembro en mi boca rápidamente. Trataba de hacerlo rápido, realmente tenía ganas de sentir a ese chico dentro mío. Lo miré sin dejar de lamer sus costados y puso una mano en mi cabeza para hundirme más contra su miembro. Al poco tiempo sentí un líquido espeso recorrer mi boca. Lo tragué y Chris me dejó debajo suyo. Sacó mi top, lamió mis pezones hasta dejarlos erectos, y comencé a sentir mi zona palpitante.
Sacó mi pantalón corto junto con mi ropa interior roja, y pasó sus dedos lentamente por mi feminidad, robandome un gemido.
-Estás bastante mojada ya...- Dijo con la voz ronca y me penetró lentamente.
-Más rápido- Pedí y escuché su sonrisa.
Me obedeció y comenzó a acelerar sus movimientos. Clavé mis uñas en su espalda. Lo único que se escuchaba en la habitación, eran mis gemidos, sus jadeos, y el ruido leve de la cama, que nos ponía más calientes.
-Grita mi nombre...- Susurró en mi oído y gemí de placer ante sus fuertes y duras embestidas antes de obedecerlo.
Realmente sentía que iba a quedarme afónica luego de esa noche.
Nos vinimos gritando mutuamente nuestros nombres.
Nos cambiamos, nos quedamos besándonos unos minutos en el cuarto, y bajamos a la fiesta, el por el ascensor y yo por las escaleras, e hicimos como si no hubiera pasado nada durante toda la noche.