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Ema, una niña que perdió a su madre al nacer, pero su padre antes de que su niña se enterará de que su esposa murió por culpa de ella se casó con otra, igual de linda. Ema en esos días era feliz, en su vida de la escuela le va muy bien, sacaba 1O y cuando saca 9 o 8 dice –¡Prometo estudiar más!– Consiguió amigos, –¿Estas pérdida?– Pregunto un niño, con el cabello alborotado y ojos cafés. –Si...– Dijo apenada. –Yo te ayudaré, seamos mejores amigos– El niño le regaló una sonrisa sincera y con cariño, ella imitó eso y sonrió, era algo tímida pero pudo hacer un amigos. –¿Cómo te llamas? Yo me llamó Alexander.– Ella decidió dudosa –M-Me llamó Ema, mucho gusto Ale.– Alexander abrazo fuertemente a Ema –Encantado Emi.– Ella río bajo.

Ella tan inocente y feliz, no sabía que su vida iba a ser podrida.

Ema, 9 años.

–No estaremos un tiempo y tu hermano se fue con unos amigos así que te dejaremos con tu tío.– Ella asiente mirando al hombre con una sonrisa. –Yo me encargo de ella.– se despidió Max (El padre de Ema) .

–¿Qué quieres hacer, Ema~?– No sabía cómo tomar eso. Él se acercaba más a ella, y Ema retrocedía. Tenía miedo. Él empezó a tocarla, y eso a ella no le gustaba. Empezó a besar su cuello y ella solo decía –¡Ayuda!– Cubrió con su mano la boca de la pequeña niña de 9 años.  Ya le había quitado toda su ropa –Para tener 9 años no estás nada mal pequeña~– Ella intento escapar pero él no la dejaba. Se escuchó un golpe. –¡Hija! ¡Suelta la Maldito!– Se acercó a él y lo agarró, le empezó a golpear y él no se dejaba. –Si te hubieras ido ya la hubiera violado– Dijo entre risas. La niña había llamado a la policía y llegó. Se llevaron a aquel hombre. El padre de Ema se acercó y la Cubrió en sus brazos con una manta. –Todo está bien, mi niña. Mamá llegará al rato y también tu hermano.–

Desde ese momento esa niña empezó a traumas y más adelante sufriría.

CONTINUARÁ...

-Akiko.

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