∥এ Sólo toma mi mano [Emiliaco]

U n d i c i; Non ritornerò

7:30pm, Casa de Joaquín.

— ¿Si te peleaste con Emilio crees que es buena idea ir a esa fiesta? — preguntó mi hermana cruzada de brazos.

— Claro, no voy a dejar de disfrutar con mis amigos sólo porque ese idiota no pueda superar algo que pasó hace cuatro años — me miré en el espejo — ¿crees que con esta ropa voy bien o escojo otro cambio? — me di una vuelta.

— Ya no me contaste qué te dijo Roy — me miró fijamente — por cierto se te ve buen trasero con esa ropa — dijo seria.

— ¡Renata! Que pena no digas eso — me sonrojé — y creo que andas muy chismosita, así que no te diré más — empecé a tomar mis cosas para salir.

— Uy te sonrojas como si nunca te lo hubieran dicho — si no se calla le voy a dar una patada — por cierto, cuídate mucho bro — me abrazó.

— Nos vemos en la noche o en la madrugada, no te desveles hablando con tus amigos — me despedí y salí de mi cuarto.

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— Mailo, de verdad yo creo que Joaquín merece una disculpa — me venía siguiendo.

— Roy, ¿no crees que el que merece una disculpa soy yo? Digo, he sufrido bastante gracias a él — rodé los ojos.

— Pero podrían arreglar todo ¿no? — me miró con ojos de cachorro.

— Roy, ¿por qué mierda andas tan insistente con que sea amigo de Joaquín? Hay cosas que no se pueden solucionar — dije para salir de ahí.

(...)

La fiesta había empezado y los primeros invitados estaban llegando.

— Mailo, tengo que presentarte a una amiga — me habló Roy.

— Soy Ana, un gusto — me sonrió y extendió su mano.

Era una chica bajita, tenía lentes y se le formaban unos hoyuelos cuando sonreía, era bastante linda y hasta cierto punto tierna, si fuera heterosexual tal vez podría salir con ella.

— Un gusto Ana — le sonreí igual y apreté su mano.

— Déjame decirte que si Roy te molesta con algo yo te puedo ayudar a regresarselo, lo conozco desde primaria y vaya joyita de recuerdos que tengo — Roy agarró a la chica por los hombros.

— Sí Ana, que bueno que te cayó bien Emilio, ahora vámonos — me sonrió nervioso — por favor recuerda lo que dije sobre Joaquín — me miró serio y se fue de nuevo con Ana.

Así como llegó Ana llegaron más personas, Azul, Niko, Ale, Diego, Pao y Joaquín.

Pensé en lo que me dijo Roy, y realmente tengo ganas de hablar con Joaquín, pero hay algo que me impide hacerlo, quiero ser amable con él y tal vez hasta regresar a ser mejores amigos como antes, pero no es fácil, nada fácil.

— Hey, Joaquín — me acerqué a él.

— ¿Pasa algo Emilio? — me contestó cortante.

— Yo creo que mejor los dejo solos — nos miró Azul y después se fue.

— Joaquín, mira quiero pedirte una disculpa, sé que fui un idiota y el comentario que hice estuvo muy fuera de lugar — dije mientras miraba el suelo.

— Está bien Emilio, no pasa nada, tú también perdoname por favor — lo miré curioso.

— ¿Perdón por qué? — dije con clara confusión.

— Por todo, lo que me dejaste saber y por lo que no, por todo — sonrió amargamente.

— ¿Todo pasó muy rápido no crees? — me miró confundido por mis palabras.