Entre secretos y promesas ••Kookv••

1. El chico nuevo

Eran las ocho en punto de la mañana cuando Jeon Jungkook el protagonista de esta historia se levantó de su espléndido sueño para ir a la escuela, llegaría tarde una vez más, su estúpido hermano como él le llama va a querer que tome su medicina otra vez y no es como que el pelinegro no quiera morirse, de hecho es lo que quiere más que nada en este mundo. Él es huérfano por lo cual sólo vive con su hermano mayor, Yoongi.

Unas pisadas fuertes se escucharon al otro lado de la puerta, Jungkook sabía lo que venía ahora por lo que sólo rodó los ojos y espero pacientemente hasta que la puerta se abrió dejando ver a un chico de cabellos rubio platinado que le daba un aspecto de chico malo "Toma tu medicina, Jungkook" Dijo el mayor acercándose hasta la cama y extendiéndole una pastilla con un vaso de agua lleno hasta la mitad.

El pelinegro odiaba que su hermano siempre insistiera con lo de la medicina "¿Qué parte de no voy a tomar eso no entiendes?"

"¿Acaso quieres morirte?" Bajó las manos cuando el menor pero más alto le dedicó una sonrisa de lo más cínica.

"No sé porque lo preguntas, ya sabes la respuesta" Suspiró y señaló la puerta "Igual moriré tome o no la medicina"

"Si la tomas podrás prolongar tu tiempo de vida" El contrario negó "Por favor..." Suplicó con la mirada a lo que el chico volvió a negar.

"¿Prolongar mi tiempo de vida?" Se echó a reír "Sólo son diez años, ¿De qué me sirven diez años?" Suspiró "Déjame morirme en paz, por favor" Señaló la puerta "Vete"

"La dejaré aquí por si cambias de opinión" Colocó la pastilla y el vaso de agua en la mesita de al lado de la cama de su hermano y luego se fue sin decir ni una palabra más.

Jungkook hizo un bufido al momento de ver la pastilla, se levantó y se tomó el vaso de agua pero la pastilla la lanzó por la ventana importándole poco si esa sería su forma de vivir, él no quería vivir y ya lo ha dicho tantas veces, no se suicida sólo porque su enfermedad lo terminará matando tarde o temprano y cuando ya no se pueda hacer nada, él podrá descansar del mundo, Jeon es un chico en depresión por muchas cosas, él extraña a sus padres aunque no lo admita, su enfermedad es un peso que prefiere no llevar en su espalda, todas las personas que le rodean no es porque quieran hacer una buena intención y hay más pero él prefiere no comentarlo por ahora.

El pelinegro bajó las escaleras con un bostezo similar al de un león, su hermano le vio bajar desde la cocina así que corriendo colocó un plato de comida en la mesa "¡Tu comida!" Gritó totalmente feliz mientras señalaba el plato que él mismo había dejado en la mesa.

"Ajá" Fue lo único que dijo el menor al momento de sentarse junto a su hermano. El contrario no dejaba de verlo fijamente por lo que al menor se le hizo una idea en la cabeza "¿Acaso pusiste medicina en mi comida?" Sonrió cuando el rubio se tensó "Vaya, has caído bajo, muy bajo" Dejó el plato en la mesa y se levantó "Me decepcionas, Yoongi" Optó por no desayunar y se fue a su habitación donde se bañó y cambió para ir a la escuela.

Después de un rato volvió a la planta baja y ni siquiera le dio una mirada a su hermano para despedirse, tomo su mochila y pasó de él; fue a la entrada y se colocó sus zapatos negros.

"Lo siento" Dijo arrepentido su hermano pero el chico lo ignoró "Que tengas un buen día" Volvió a ignorarlo y esta vez salió de la casa a lo que el rubio bajó su mirada maldiciéndose por haber hecho esa atrocidad.

El pelinegro iba tranquilamente caminando por las calles de Seúl hasta que llegó a la escuela pero tuvo que ir a la oficina del director "Toma asiento" Dijo el señor "Es la tercera vez en la semana" Negó con su cabeza pero el chico permanecía callado "Firma aquí y ve a clases" Hizo caso y se retiró de la oficina.