8. ¡Era mi primer beso!

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El pelinegro estaba tomando demasiado, copa tras copa al igual que su acompañante que aún mo soltaba su mano. A ambos les pasaba la misma cosa, estaban confundidos por sus sentimientos, no sabían que era lo que les pasaba en el cerebro que no podían pensar con claridad, sus corazones latían a más no poder, sus estómagos eran un completo caos, se sentían terremotos horribles y finalmente un escalofrío que los recorría de pies a cabeza.

El chico que estaba en el peor estado era Kim Taehyung, estaba a tres copas de estar completamente ebrio o aún más ebrio porque eso, ya lo estaba. Al mayor le preocupó mucho eso así que le arrebato la copa de la mano bajo el puchero del castaño.

"¡Oye!" Lloriqueó el castaño "¡Es mía!" Hipó "¡Devuelvo! ¡Ladrón" Lo señaló e hizo un puchero "¡Eres un ladrón!... Uno muy atractivo" Sonrió olvidándose de todo el asunto de la copa "¿Alguna vez te han dicho lo hermoso que eres?" Se tambaleó en su asiento y estuvo a punto de caer de no ser por los brazos de su acompañante que aún no estaba ebrio, él no estaba para nada ebrio ya que toleraba muy bien el alcohol.

"Sí" Soltó una risita nasal "Un chico llamado Kim Taehyung, me lo dijo hace unos minutos" Sacó su billetera y le pagó al barman "Gracias" Le dijo al pelirrojo porque los había soportado y les había estado sirviendo vasos de alcohol toda la noche.

Agarró al castaño de la cintura y lo sacó de aquel bar, ya era tarde para estar en la calle así que lo llevaría a su casa o quizás lo dejaría dormir en la suya, no quiere dejarlo solo y mucho menos en un estado tan malo como el de ahora.

Después de unos minutos de esperar un taxi y subirse al carro blanco, el menor empezó a hablar "Ese tal Kim Taehyung es muy sabio" Sonrió con los ojos cerrados "¡Es sabio!" Gritó asustando un poco al conductor lo que hizo que el taxi se cambiara bruscamente de carril y casi provocando un accidente.

"L-Lo siento mucho, señor" El pelinegro hizo una reverencia de forma muy apenada "Perdón es que está demasiado ebrio, lo siento"

"No te preocupes, ya he lidiado con chicos como él antes" Le sonrió por el espejo y él sólo pudo responder con un asentimiento de cabeza.

"Kim, te suplico que te calles" Rogó finalizando con un suspiro cansado.

"¿Por qué? Bajaré la voz" Dijo en forma de susurro y muy tierno que al pelinegro se le hizo totalmente imposible el no sonreír derritiéndose de amor "Tengo un amigo" Se echó a reír "Su nombre es Kim Taehyung, la vida de ese chico está demasiado jodida" El pelinegro se acercó al menor escuchando atento todo lo que decía "Es un chico muy miserable, sus padres lo odian y por eso lo dejaron solo. A Taehyung nadie lo quiere, ni lo van a querer" Se le salió una lágrima que el mayor se encargó de eliminar.

"Bueno..." Sonrió "Tengo un amigo que se llama Jeon Jungkook, él quiere mucho a Taehyung"

"¿Enserio?" Lo miró con ilusión en sus ojos "Ese chico será una muy buena compañía para mi amigo Taehyung" Sonrió "¿Quieres saber como se siente mi amigo?" El contrario asintió con una sonrisa en el rostro "Escucha, a Taehyung le gusta alguien" Soltó una risita "¿Quieres saber quién es?" El mayor no tiene ni idea de por qué se interesó tanto en eso pero asintió con su cabeza muchas más veces de lo normal "Bueno, a Kim Taehyung le gusta..." No logró terminar su frase porque cayó dormido en el regazo del pelinegro.

"¡Maldición!" Susurró Jeon acariciando el puente de su nariz "Quería saber quién era" Hizo un puchero para luego pensar en lo que acababa de decir.

¿Qué? Se cuestionó a sí mismo, ¿Por qué es que él quería saber el nombre de la persona que le gustaba a Tae? Frunció su ceño al momento de mirar al chico que yacía más que dormido abrazando sus piernas pero no le importó que abrazara sus piernas, eso era lo de menos,  quería entender qué era lo que estaba sientiendo en ese mismo instante, él jamás se había sentido de la manera en la que se siente ahora y está un poco asustado porque no tiene ni idea de qué es lo que siente, miró a Kim para ver si con eso conseguía aclarar sus dudas; cosa que no fue así, se confundió aún más al momento de mirar lo tranquilo y calmado que se veía el chico durmiendo "¿Por qué eres tan hermoso?" Susurró e intentó tocar el perfecto cutis canela del menor pero alejó la mano al instante  como si se fuese a quemar de tan sólo tocarlo, no quiso hacerlo ya que pensó que podía robarle toda la belleza y hacerlo infeliz, él no quería eso, jamás iba a hacer que Kim no fuese feliz.

Entre secretos y promesas ••Kookv••Donde viven las historias. Descúbrelo ahora