•||Dia 3 {Parte IV} ||•

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Comenzaron a bajar las escaleras sin hacer ruido. Atravesaron el salón y llegaron a la parte de la tienda sin apenas llamar la atención.

—¿Qué estáis haciendo, chicos?—La voz de Wendy sobresaltó a todos menos a Bill que simplemente siguió abanzando hacia la puerta como si ella no existiera.

Los chicos se voltearon y, mediante señas, le indicaron a la pelirroja que guardara silencio. Ella asintió confundida y Bill abrió la puerta.

Todos salieron con cuidado y ni siquiera se pararon a cerrar la puerta, simplemente corrieron hacia casa de Andrew una vez que estaban unos metros lejos de la cabaña.

Una vez que llegaron a aquella casa Dipper se dio cuenta de que Wendy les había seguido.

—Wendy, ¿qué haces aquí?—Preguntó el castaño.

—Esa misma pregunta podría haceros. Tenía curiosidad, normalmente no te escapas de la cabaña y intentas no cruzarte con Ford ¿Qué estáis investigando?—Dijo Wendy con curiosidad.

—Emmm...pueeees...—Comenzó a decir Dipper tratando de responder buscando una escusa.

—Dipper quiere ayudar a su novio Bill a viajar a otra dimensión para que su hermano le saque de su mente y tenga cuerpo propio.—Interrumpió la morena.

—¡MABEL!—Gritó Dipper completamente rojo.

—¡¿DIPPER ES EL NOVIO DE BILL?!—Gritaron Soos y Wendy a la vez.

—¡¿Solo os parece raro eso?!—Dijo Dipper teniendo en cuenta que había otras partes de la historia difíciles de creer.

—Es que no me lo esperaba de ti, entiéndelo.—Aportó Wendy.

—Bueno, no tenemos mucho tiempo. ¡Vámonos!—Dijo Mabel entrando en la casa de Andrew a pesar de que Wendy y Soos seguían en shock por la noticia.

—Pino, resulta que somos novios.—Dijo Bill para después acercarse al moreno.—¿No es genial?

—Me has metido en un buen lío, eso no es genial.—Dijo Dipper en tono de broma, pero parte del comentario iba en serio.

Todos entraron en esa antigua casa y llegaron a la planta alta dónde la máquina estaba a su espera. Mabel tomó la llave y la colocó en el espacio.

—¡Encaja!—Dijo Mabel feliz.

Giró la llave hacia la derecha y una luz verde se encendió.

—𝙸 𝙽 𝚃 𝚁 𝙾 𝙳 𝚄 𝙲 𝙴  𝙲 𝙾 𝙾 𝚁 𝙳 𝙴 𝙽 𝙰 𝙳 𝙰 𝚂—Una voz metálica que provenía de la propia máquina se escuchó bastante fuerte.

Dipper se dirigió hacia el escritorio dónde se encontraba la libreta. En medio de ella había guardado el papel que Andrew había escrito antes de morir. Se acercó a la máquina y comenzó a escribir los números indicados en un pequeño teclado situado a pocos centímetros de la luz.

—𝙲 𝙾 𝚁 𝚁 𝙴 𝙲 𝚃 𝙾—La luz verde comenzó a parpadear.— 𝙳 𝙴 𝚂 𝚃 𝙸 𝙽 𝙾   𝙸 𝙽 𝙳 𝙸 𝙲 𝙰 𝙳 𝙾—En ese momento la voz hizo una pausa.— 3567𝙸𝚉.

De repente una luz potente cegó a todos los de la habitación, cuando consiguieron abrir los ojos pudieron observar un portal de color violeta azul y con algunos tonos de amarillo delante de ellos.

—¿Quién es el primero?—Bromeó Bill.

Dipper dio un paso hacia delante.

—Voy yo.—Se colocó bien la gorra y, antes de que nadie pudiera decir nada entró en aquel portal.
Bill suspiró y le siguió, más tarde entraron Mabel, Wendy y Soos.

Nada es imposible || BilldipDonde viven las historias. Descúbrelo ahora