Un chico omega de 25 años al que le gusta la vida nocturna, los hombres altos y guapos, pasarla bien con sus amigos y tomar hasta el amanecer, hasta que un alfa llega a poner su vida de cabeza.
Mención de otras parejas🌈.
Historia completamente mí...
-Johnny, por favor hazmelo~ -me dijo mientras gateaba hacia mi- Necesito que me lo hagas~~
-T-Ten es que no... No puedo -le contesté nervioso- Por favor aguanta.
-Mmmm~~ -ronroneó y se acostó en el asiento, se bajó el pantalón y ropa interior y como si nada se metió los dedos a la boca y luego a su entrada... ¿QUE?
-Ten -lo vi y parpadee varias veces. Se veía que estaba sintiendo muy bien ya que mordía su labio y arqueaba su espalda... Tal vez debería ayudarlo.
-Ahhh Johnny~~ -gimió mi nombre mientras se dedeaba- Más adentro~
Carajo. Mande todo a la mierda y arranqué el auto hacia su casa. Llegamos y me estacioné afuera, todo esto mientras escuchaba sus gemidos.
-Ten, baja -lo vi y ni siquiera me miró. Tomé aire y lo cargué, abrí con sus llaves y lo dejé en el sillón.
-Johnny~ -me vio fijamente a los ojos y se relamió los labios lo cual fue suficiente para que me quitara la chaqueta y la aventara lejos.
-Voy a hacertelo Ten, vas a gemir mi nombre durante horas -le dije mientras me desabrochaba el cinturón y me bajaba el pantalón.
De ahí para adelante lo hicimos en el sillón, bastante salvaje para ser verdad, me pidió que lo ahorcara y eso hice, después, al sentirme incomodo en el sillón me puse de pie y lo cargué en mi cadera, penetrándolo así. Caminé hacia la cocina sin darme cuenta y recargue su espalda en el refrigerador y comencé a moverme. Sentir sus manos en mi espalda era algo realmente genial, también ver sus caras de placer por mi culpa era algo que me prendía todavía más... Ten era un maldito seductor experimentado.
En esa misma posición le llené el cuello y clavícula de marcas y de mordidas, su interior se sentía muy caliente y mojado por lo tanto me fascinaba estar adentro.
(Ten narra)
Me desperté en mi casa y suspiré aliviado pero al quererme mover sentí un dolor agudo en mi cadera. Después de eso sentí un peso más en mi cama y volteé a mi lado. Johnny estaba dormido a mi lado y completamente desnudo.
Me asusté muchísimo y más cuando me vi desnudo... ¿Habíamos tenido sexo? Me senté en la cama y recuerdos comenzaron a golpear mi mente.
Johnny besándome, Johnny nalgueándome, Johnny viniendose en mi lengua y Johnny... Penetrándome.
Lo primero que pensé después de todos esos flash back fue...
¡Eres un idiota Ten! Había arruinado todo, mi sueño era tener una noche romántica con Johnny después de cenar o algo así, no follar por culpa de mi celo.
Me cubrí la cara con las dos manos y así me quedé un momento hasta que sentí una mano en mi muslo.
-Buenos días precioso -escuché y volteé. Ya se había despertado.
-Johnny... Perdón por esto -le dije con ojos llorosos- No quería que pasara así... Quería que fuera especial.
Me vio unos segundos y luego rió suavemente con sus ojos entrecerrados.
-Pero si contigo todo es especial -me dijo y me abrazó por la cintura... Carajo, sentía su pene en mi pierna- No te preocupes, seguramente no te acuerdas de mucho pero a la próxima me aseguraré de que estemos los dos conscientes.
Lo vi y mi corazón se aceleró. Johnny era mi destinado sin duda alguna.
-Johnny -me acosté de nuevo y lo vi frente a frente- Seguramente fui muy vulgar... ¿no?
-Algo así -se rió y besó mi nariz- Pero yo también me dejé llevar así que estamos a mano -me sonrió.
Después de que me dijo eso me puse de pie con su ayuda y como primer instancia me dio muchísima pena que me viera desnudo yo consciente. Me sonroje hasta las orejas y escuché un silbido por lo que volteé.
-Que preciosooo~~ -me dijo viéndome fijamente y me guiñó un ojo.
Maldito idiota romántico.
Negué tapándome con una sábana y al verme al espejo me quede en shock... Mi clavícula estaba LLENA de chupetones y mordidas.
Dios Johnny ~
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