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No pudieron encontrar el cuerpo del quien me secuestro, y no me artevia a contarles de esos tipos, ni de la mujer que me salvo.

Lo único que declare es que apenas el señor borracho me trajo la comida y se fuera del cuarto sentí como alguien me ponía el pañuelo con lo que ellos llaman cloroformo, cuando desperté, alguien le disparo, en eso aproveche para irme, en si no es del todo mentira.

- bien investiga remos, pero creo que es peligroso que estés solo por un tiempo- afirmó Megure, mientras salia de la habitación dejandome solo con Edogawa, olvide mencionar que estamos en la jefatura de policía.

- ¿ay algo que olvidaste mencionar?- me pregunto serio.

- ¿de que hablas? - mire a otro lado.

- número uno, tu secuestro no fue en la casa - eso me puso nervioso-  si fuera como lo dices, tu cama estaría desarreglada por la lucha y no lo esta- era mas difícil mantener la calma- número dos, donde podrían hacer un intercambio seria en un lugar lejano, además donde nadie escuchara disparos si se presentaba la ocasión.

-  bueno yo....

- número tres, al ser ese el caso dudo mucho que solo corriendo llegaras tan rápido a donde te encontré y mas recién curado de tu herida- no se porque pero, me acorde de una navidad donde salí sin permiso y regrese sin que mis padres se dieran cuenta, pero mi hermano si.

- eso...

- lo que me llega al número cuatro, te liberaste de tus captores cerca de ese lugar.

- ¿y?- esperando mas deducciones.

- ¿y? ¿que hacías fuera de casa?- me pregunto.

- yo.... Eso...  ¡a ti no te importa! - reclame.

- te secuestraron, estando fuera de la casa, cosa que no debió pasar- me miro seriamente.

- asta donde yo se no somos nada para que te importe - no volte a mirarlo.

- si, somos algo somos...- lo mire el apretando sus puños, como evitando terminar la horaciano.

- ¿que somos?- me atreví a preguntar- te diré algo, no me importa quien eres, te odió y nada cambiara eso.

otro fin de semana, no es genial noten mi sarcasmo, después de ese día no me dejan sólo ni un instante, hasta oficiales se ponen en cubierto para vijilarme.

Bitácora 001
Estoy aburrido, con un toque de aburrimiento.

Remarcaba en una grabadora que Ranne-chan me regalo para quitarme un poco el aburrimiento.

Sigo Privado de mi libertad y vijilado las 24 hrs.

- oye dices como si fueras un criminal- me remarco ése chico.

Y sin contar la molestia mayor sigue pendiente de .

Cambio y encerrado.

- es cambio y fuera- me contradijo.

- pues no estoy afuera es viernes y  tengo que estar aquí- me retorcía en un sillón en casa del profesor.

- vamos Conan, no es tan malo- trato la pequeña Ayumi, inútilmente de hacerme sentir mejor.

- si, mejor ven a jugar con nosotros- me invito a algo Mitsujiko, solo respondí con un suspiro y ver al lado contrario.

- si que se ha vuelto un amargado - comento Genta.

Cada día dan mas ganas de alejarme de todos ya, sin importar que me vuelvan a secuestrar.

Ya sabiendo la rutina de todos y conocer todo el lugar, los niños distraídos, él profesor en la cosina, la única persona impredecible entrar al baño tenía 5 o 10 minutos de escapar.

~ring ring

- ¿hola?- contestó el profesor - ¿enserio? Si... Entiendo... Si - me distraje, perdiendo la oportunidad y aparte eso significa el Viky versión japonesa chafa.

Llamo a los padres de los niños para informar que nos llevaría con el.

- no se preocupe cuidare muy bien de estos cinco peques- afirmo tan falsamente pero tan convincente sonrisa.

- adiós- se despidió de nosotros ya listo para lo que llegara, creando la puerta al igual que mis ojos.

- y ¿que quieren hacer?- Eso es nuevo, abriendo mis ojos, viendo como seguía con su farsa.

Todo el día se la paso consintiendo a todos y esto no me agradaba, paseo por los lugares permitidos y frente de la peor habitación de todas, estando detrás de Edogawa y este apuntó de abrir la puerta.

- bien ya los otros niños se fueron lo que nos deja con estos dos tiernos nenes- se aserco ami, por instinto me aleje de él- enserio hoy andas muy extraño.

- ¿que hay detrás de esa puerta?- pregunto el otro niño.

- o eso, pues hay un cuarto lleno de cosas que no sirven, ya sabes muebles viejos y mas- explico.

- y si son cosas que ya no sirven ¿por que las conserva?- ¿que trata de encontrar? Pude sentir la  mirada de el señor, eso me heló.

-  bueno son cosas Muy valiosas odiaría perdarlas y tirarlas- se puso a su altura, regresando con esa sonrisa.

Tan convincente como siempre, manda a Edogawa por algo en la cocina, empezando a reclamar, decidí, retarlo.

- en verdad eres tan odioso, ahora entiendo, el porque tu hermano te abandonó- todas las cosas que me dice y hace nunca me ha lastimado tanto, cosa que notó-  ja ¿enserio Creíste que alguien cuidaría de ti gratis?

Seguía hablando del abandonó de mi hermano, y también el porque todos preferían a Edogawa que a mi.

No me di cuenta en que momento, las lágrimas me traicionaron.

- ¡¿Quien te crees?!- esa voz seguido de un azote de puerta reclamó tras reclamó de parte del que se supone tardaría en llegar.

Una discusión entre ambos comenzó,  siendo sincero no les preste atención lo que si llamado mi atención.

- no importa lo que digas o me hagas si vuelves a lastimar a Conan Kudo el infierno sera el paraíso a comparación de lo que yo te haré- esa frase me sonó.

El timbre sono, demostrado que el profesor llegó, como siempre feliz de su viaje, lo que no me gusto es que Edogawa iba a arruinarlo.

-¿por que?- me pregunto ya fuera de casa.

- ¿de que hablas?- dije serio.

-¿como que de que hablo? ¿por que decidiste callar?

- no tienes derecho de arruinar la felicidad de los demás.

-¿que quieres decir?

- para que molestar o arruinarle el día a los demás por sin sentidos.

-¿crees que lo que hace son cosas sin sentido?

- si, ellos son felices y por eso yo.....

- lo siento olvide ....- regreso el profesor, sin terminar lo que diría, tras una acción del contrario.

a la altura de mi hermanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora