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Era un desastre. Ella era un desastre. Todo era un desastre, tenía que escapar rápidamente de el.

O podía aceptarlo, abrazarlo y convertirlo en una saludable solución.

Spinel no se quería tanto como para eso.

Decidió que además de no ser su día, por enloquecer, no servía para vivir sin Rosa.

Después de crear una mini batalla entre ella y las guardianes que mando Yellow, y tirar a esta por los aires. Se adentró hacia el palacio buscando el tele-transportador de diamante.

En el recorrido se cruzó con blue pearl. Sollozos salían de la dibujante, spinel era una de sus amigas más preciadas y saber que lastimó a su Diamante le dolía mucho.

No se atrevió a tocarle ningún azulado cabello, blue pearl siempre fue amable con ella, no tenía sentido. Ahora que lo pensaba Steven también fue bueno y dulce con ella, pero era el hijo de Rosa, se lo merecía.

Pasó de ella.

Entró a la sala principal donde White la esperaba, sí ya sabía que tenía que enfrentarse a la reliquia de su hermana. Estaba temblando del miedo.

Spinel no quería hacer tanto problema, la realidad es que solo quería salir de ahí lo antes posible, si alguien se interferirá en su camino no tenía de otra que sacarlo a puñetazos.

White intentó controlar a Spinel pero por alguna razón no fue posible. Es como si el corazón-gema de Spinel ya estuviese tan roto que no podía ser controlado ni manipulado. Y eso fue una gran ventaja para la rosada.

Mientras White se distraía buscando el por qué de sus fallidos intentos por controlar a la joya, spinel abrazó una columna para luego sacarla de lugar y lanzarla a su, ahora, enemiga. Para más efecto Spinel lanzó la columna directo a el pecho logrando que la contraria retroceda destruyendo la pared por el impacto y cayendo de espalda al suelo.

Spinel disfruto la vista.

Observó la habitación y encontró el tele-transportador. Caminó hacia el y se despidió del palacio, seguramente sería la última vez de ella en el.

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Steven estaba devastado. Se suponía que hablaría con spinel sobre sus problemas pero todo se fue a la mismísima mierda. Lo siento por la palabrota, era necesaria para la ocasión.

Tenia el deseo de regresar seis mil años atrás y ser su madre.

Sentía una opresión en su pecho. La culpa se colaba en su corazón y lo enfermaba, no era Diamante rosa, pero lo fue, su madre pudo evitar muchas cosas. Pudo evitar dejar a Spinel, y quizás a otras gemas, por un capricho.

En este momento Steven se encontraba rodeado de las cristal gems.

Perla estaba muy preocupada, no imaginó que spinel estuviera tan inestable e incontrolable hasta para si misma. Rose la marcó de verdad. La rompió, la fracturó como un brazo humano y la dejó pudriéndose por seis mil años. Perla comenzó a dudar sobre si Diamante rosa tenía una pizca de bondad en ella, al menos un poquito de bondad y podría ser perdonada. Pero claramente sus acciones demostraban el desinterés por los demás, y perla no pensaba volver a tomar a Rose como una buena persona, no, no sería tan ingenua devuelta.

Amatista se encargó de consolar a Steven. Susurrándole que no era su culpa, que el no tenía que cargar con los errores de su progenitora. Eso es lo que más le molestaba a la morada. El solo era un niño humano, no tenía que vivir su día a día con guerras de hace milenios, batallas con gemas corruptas y muchísimas cosas que ella sabe que un niño no hace. No tenía porque soportar tanto dolor ajeno.

Por otro lado. Garnet miraba el gran hueco en la pared que se formó por el impacto de White. No había duda alguna de que Spinel era una gran amenaza. Su fuerza era mayor a la de ella y su inestabilidad mental la volvía más poderosa e intimidante.

Giró su cabeza y vio como steven era abrazado por amatista. Garnet se preguntó ¿por qué los ángeles como Steven tenían que pasar por cosas espantosas como esta?

La respuesta que encontró fue un steven rezando por el bienestar de Spinel.

Personas como el siempre van a preocuparse por los demás, por más insultos y golpes que reciban nunca van a parar para descubrir la felicidad de los otros.

Garnet se dio cuanta que esa era la debilidad de Steven, la felicidad de otros.

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Gracias por ser pacientes y esperarme. Estoy re harta del Taller pero igual tengo que estudiar, y yo me tardo mucho en ello. ¡Gracias a las personas que me comentan! ¡Agradezco mucho su preocupación y sus chistes! Me gustaría que más gente comentara y de paso votara ya que no cuesta nada ¡Igual gracias y besos! el próximo lunes tendrán nueva parte. Ayúdenme si tengo errores, gracias. 

¡Buenas noches, buenas tardes, buenas mañanas! 


807 palabras

¿Libre? [|𝚂𝚙𝚒𝚗𝚎𝚕 𝚡 𝚂𝚝𝚎𝚟𝚎𝚗|]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora