Min Yoongi, un hombre que había olvidado lo que realmente era amor, tratando de llenar ese vacío con sexo. Kim jungkook, un chico que llega a ser su sumiso y a experimentar las emociones más fuertes, vividas y devastadoras de su vida.
Su único prop...
Yoongi despertó al rededor de las nueve de la mañana, miro al lado de la cama pero no había nadie. Realmente no sabía en qué momento jungkook había dejado de dormir pacíficamente después de haberlo hecho toda la tarde.
Acostumbraba despertar primero que su menor y lo dejaba dormir para no despertarlo, es tierno cuando duerme, además de ser extremadamente quejumbroso en ocasiones, en eso se parecían bastante.
Después de entrar a la su habitación e ir a su cama se quedó meditando sobre su vida, la típica crisis existencial cuando te das cuanta de que tu vida ha sido penosa y no cumple tus expectativas. Recordó a aquel chico al que alguna vez llamó amor.
"Las risas eran partícipes en el ambiente de aquel parque de diversiones, su mano estaba entrelazada con la de su antiguo novio"
Sonrió inconscientemente dando vueltas por aquellos viejos y nostálgicos recuerdos, llenos de esa alegría que hace mucho no tenía en su vida.
"Las subidas y bajadas de la montaña rusa hacía que sus cabellos chocaran bruscamente contra sus caras, reían al ver sus expresiones, se veían realmente horribles. Pero aún así, eran lo más hermoso que podrían ver."
Suspiro con nostalgia al recordar aquellos viejos tiempos, su vida se había vuelto sombría y después de un tiempo le gustó ver a las personas sufrir, como él lo había ello antes, sólo que transformaba esos sentimientos en dolor físico, lleno de esa ira y ese enojo que hace mucho estaba guardando, con resignación de dejarlo salir.
Cada momento feliz, era perfecto. Habían pasado tantas cosas juntos que le dolía saber que había pasado, le dolía saber que él ya no volvería, guardó su corazón solamente esperando que cruzará esa puerta para decirle que lo amaba y que irse fue una decisión estúpida, que quería volver y estar con el hasta que la vejez los consuma y lo último en lo que pensarían es en el sexo. Un recuerdo doloroso llegó a él.
"La cama al igual que la casa se encuentra vacía, la ropa de su pareja no se encontraba ahí. ¿Donde estaba?, una nota en la cocina que decía: Espero que me perdones y que puedas entenderme, pero no puedo seguir aquí. Me iré a Estados Unidos."
Suspiro recordando aquél momento, las noticias que habían llenado las redes sociales la semana siguiente de la partida de aquel chico hicieron que Yoongi lloré, olvidando su dignidad y olvidando que «los hombres no lloran», se partió, todo su ser se derrumbó de dolor, la vida nunca fue tan difícil.
Extrajo sus manos en su cara limpiando las lágrimas que habían salido a la fuerza. Retiró sus manos de su cara y se sentó en la cama, no iba a seguir llorando, ya había llorado mucho. Tomó un baño y bajo a la cocina en busca de algo para comer encontrando a jungkook sonriendo mientras observaba la pantalla de su teléfono celular. Camino hasta adentrarse en el espacio de la gran cocina minimalista.
— Buenos días, Jungkook. —le dije haciéndolo mirarme.
— Buenos días, amo. —sonrió.
El pálido camino hasta el refrigerador y sacó una jarra de sumo de naranja para servirlo en un basó de cristal y sentarse frente al menor en la mesa de la cocina.
Fruncio el ceño mientras miraba la expresión de su sumiso al mirar la pantalla de su celular para luego empezar a teclear nuevamente. Era extraño ver a jungkook así.
— ¿Con quien estas hablando? —inquirió curioso.
— Con nadie especial. —respondió para luego apagar la pantalla de su celular y meterlo bajo la mesa para dejarlo sobre su muslo.
— Jungkook. —dijo en un tono demandante mientras fruncia su ceño— Dime con quien estas hablando o lo veré por mi mismo.
El joven suspiro e hizo una seña de exclamación con sus manos, buscaba las palabras correctas, sabía que Yoongi se iba a enojar, sabía que recibiría un castigo.
— Es Tae. —hizo una mínima pausa y suspiro profundamente— me estaba contando como le fue ayer; Conoció a nuestro padrastro.
— Te ordene no hablar con él. —habló firmé.
— Y yo te dije que es mi hermano mayor, crecí con el y con su padre, el padre de taehyung siempre me vio como su hijo, y taehyung me trata como su hermano menor desde el día en el que lo conocí. —habló lleno de coraje— Quieres que me aleje de las personas que amo. ¿Acaso tu no has perdido a seres amados?, ¿No sabes que es lo que se siente perder a alguien que amas?
Esas preguntas causaron casos en la mente del pálido. Sus adentros dolieron y suspiro resignado. Mordió su labio y mantenía sus ojos en el techo mientras trataba de soltar aquellas palabras.
— No te preocupes Jungkook, creo —no quería admitirlo— que he estado exagerando sobre tu hermano, y —acentuó esa palabra— puedes ver a TaeHyung siempre y cuando no tengan contactos indebidos.
El sumiso miro a su amo con una expresión de asombro indescriptible, era un debate mental con sigo mismo, lo que estaba pasando era difícil de entender. Escuchó el tono de notificación de su móvil y miro a Yoongi fugazmente quien asintió sabiendo que estaba pensando el castaño. Jungkook sonrió, y Yoongi le correspondió con dolor por el efecto aún vigente de las preguntas hechas por el menor.
— Taehyung quiere que conozca a nuestro padrastro, ¿Quieres venir amo?. —le sonrió mientras esperaba una respuesta con ansiedad y emoción.
— Seguro Jungkook, ¿por que no?; tenemos el día libre después de todo. —le sonrió de lado.
— Gracias. —dijo con total felicidad en su tono.
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Publicaré una historia Yoonkook en mi perfil será una historia llena de engaños y dolor también smut, no en exceso claramente.
Si están interesadxs les invito a pasar por mi perfil y seguirme o leer mis demás historias.
