Capítulo 10.

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Jungkook se había levantado temprano porque era viernes. Pero no un viernes cualquiera. Era el último día de clase antes de las vacaciones de Navidad. Y además de eso, era el viernes en el que tendría lugar la mejor fiesta del año. Era la fiesta de Jennie. De seguro acabaría siendo la típica fiesta en la que hay alcohol, drogas y sexo. Sobre todo sexo. Al menos sí para Jungkook.

Se levantó de la cama y fue a desayunar. Su madre no se encontraba en casa, ya que ese día tenía turno de noche y llegaría a las ocho. Cuando terminó de desayunar, siguió la misma rutina de todas las mañanas y salió a la puerta, con la mochila colgada al hombro. Sacó de su bolsillo una cajetilla de cigarros y encendió uno. Su hyung solía tardar en llegar, no llevaba bien lo de levantarse pronto de la cama.

A los quince minutos aproximadamente el coche aparcó frente a él. Jungkook abrió la puerta del auto y subió, dejando la mochila en el suelo del mismo.

-Joder, Yoongi. Ya pensé que no ibas a venir.

-Ya sabes que por las mañanas hay que ir con calma.

-Lo tuyo ya es demasiado.

-Bueno, deja de quejarte que ya estamos yendo.

                      ~~~~~~

En ese momento Jungkook se encontraba en su clase de matemática cuántica, mirando a la pizarra como si le hablaran en algún extraño idioma que debía descodificar. Solo copiaba y ya. Intentaría entender cuando estuviera en casa. Pero seguro que no entendería nada, se cansaría y lo dejaría hasta el día antes del examen, no le daría tiempo a aprenderlo todo y suspendería. Pero así era su vida.

De repente, se le vino a la mente la idea de pedirle ayuda a Taehyung. Pero recordó cómo estaban las cosas entre ellos y pensó que no era buena idea. Seguro que él si lo entendería y se lo explicaría sin poner pegas. Suspiró y alejó todos aquellos pensamientos de su cabeza. Sería lo mejor.

Por fin sonó el timbre que indicaba la salida de clases. Recogió sus cosas lo más rápido que pudo y prácticamente corrió hasta la salida. La gente le saludaba y le preguntaba si acudiría a la fiesta de ese día. Era Jeon Jungkook. ¿Cómo no podría acudir a la mejor fiesta del año?

-Hola, hyung.

-Hola mocoso. Tendrás que volver andando a casa. Jimin me ha llamado para ir a comer juntos.

-¿Ya me estás abandonando?

-Te las apañarás bien solo. Nos vemos en la fiesta.

-Claro, hyung. Pásalo bien con Jimin.

Yoongi chasqueó la lengua y se fue del lugar. Jungkook giró para dirigirse a su casa. Tendría que comer, vaguear y prepararse para la fiesta. Estaba impaciente. Necesitaba salir, beber y follar. Todo el tema de Taehyung le había tenido muy distraído de aquellos temas.

Al llegar a la verja de entrada de la universidad vio una silueta. Aquel sujeto le era familiar. Lo peor es que cuando sus ojos se encontraron, los de aquel extraño le habían mandado el mayor odio y desprecio de toda su vida. Y por si fuera poco, tenía que pasar por donde estaba él.

-Vaya, vaya. Mira a quien tenemos aquí, fisgón.

Justo entonces lo recordó. Era aquel chico que iba con Taehyung y que le había pillado mirando. Frenó en seco y se giró para encararlo.

-Cazuelito.

Respondió sin ánimo.

-Largo de mi vista antes de que te parta las piernas.

-¿Se puede saber por qué?

-¿Por qué? ¿Cómo puedes preguntar por qué? Se te debería caer la cara de vergüenza. ¿Quieres saber por qué? Por tu culpa, el otro día tuve que salvar a Taehyung de que le pegaran una paliza Hoseok y sus amiguitos y tengo que venir a esperarle todos los días para que nadie le haga daño y se sienta seguro. ¿De verdad no tienes ni un pequeño remordimiento por hacerle eso a una persona? Eres un sinvergüenza y yo no soy Taehyung. No voy a desperdiciar un solo segundo de mi tiempo contigo, cuanto más lejos estés de Taehyung y de mí será mejor. Más te vale no volver a dirigirte a Taehyung o hablar algo de él, porque entonces seré yo el que te arruine la vida. Ahora largo,va a salir Taehyung y no quiero que te vea.

Cuéntame tu secreto, hyung. (Vkook).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora