Una mirada apagada que refleja un vacío, una pérdida que el tiempo no puede curar. Apenas puedo respirar y menos todavía caminar. No me queda nada que dar. No consigo quitarme la sensación de angustia que invade mi corazón. Soy un pozo de dolor. Siento el frío en mi piel. El hielo se asienta donde debería estar mi corazón y amenaza con partirme por la mitad. Me envuelvo con mis brazos como si pudiera detener el dolor. Siento de nuevo calor pero donde el hielo se derrite, deja solamente un vacío. Un abismo. Y no sé cómo lo volveré a llenar. Esto sólo hace que mi mundo se sume en el dolor. Nada más temo que quedarme sola. ¿Por qué hago esto entonces?¿Por qué aparto de mí a quienes quiero?¿Qué pasa conmigo? No lo sé. Y no sé como impedirlo. Sólo se que haga lo que haga, tome la decisión que tome será la inconrrecta.