CAP. 2

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En la habitación de Veldora, una pequeña con coletas apareció de la nada.

Poco antes Veldora ya había limpiado el desastre que su descontrol provocó.

-Oi Veldora, qué haces aquí tan solo? -risa-

-Milim no estoy de humor para...

-Rimuru convocó una reunión -se acerca-

-Rimuru? -se sonroja levemente- e-eso por qué?

-Mmm ya sabes lo sensible que es con su gente, parece que habrá una guerra pronto con unos miserables humanos y él está todo dramático con... no mueras, no mates a nadie... y eso -suspira- nunca deja que me divierta...

-G-guerra?! -se levanta de golpe- Cuando?! Rimuru donde está ahora?!

-Acaso no escuchas lo que digo? Rimuru convoco una reunión... y además son solo unos humanos -rie- ni siquiera tendremos que...

-Iré con él -desaparece-

-Oi Veldora! No te atrevas a dejarme hablando sola!!... Ya te fuiste... -irritada- Maldito!

...

En la sala de reuniones de Tempest.

Rimuru esperaba pacientemente a que todos llegaran.

Poco después de irse Veldora y de que Rimuru hablara con Ranga, Souei llegó con malas noticias para Tempest.

Parece ser que se han encontrado a algunos humanos alrededor, al ser capturados ellos revelaron que por la noche un gran grupo vendría a asesinar a todos en Tempest.

Según los humanos, algunos de los monstruos de Tempest han asesinado sin piedad a los habitantes de un pueblo cercano. Esto los hizo ver como un gran peligro para los humanos, decidiendo así que tendrían que ser eliminados.

Claramente esto es un error, pero al no darles tiempo de justificarse, lo único que podía hacer Rimuru es prepararse para enfrentarlos y no permitir que nadie muera.

Rimuru estaba muy abrumado, era consciente de que fácilmente podrían hacerse cargo de los humanos, pero no quería que nadie muera innecesariamente. Buscar una mejor solución seria lo correcto, aunque no había tiempo.

Los mostruos se veían muy preocupados, no querían que Rimuru saliera lastimado, querían acabar con los humanos por su cuenta y poder proteger a su amo.

Rimuru sabía que los monstruos ivan a querer ayudar, pero no podía arriesgar la vida de ninguno.

Estaba preparado para ir por su cuenta, no estaba seguro de cómo lo tomarían, pero no importaba lo que dijeran, él se haría cargo y los protegería a todos.

-Rimuru-sama! -se inclina Benimaru- ya se encuentran todos aquí, solo faltarían Veldora-sama y Milim-sama.

-Es así? Entonces empecemos ya, luego me encargaré de informales lo que diré -se acomoda en su asiento-

Los monstruos rápidamente se callaron para escuchar atentamente a su amo.

Todos eran conscientes de lo que estaba sucediendo y cómo pronto tendrían una gran guerra con los humanos. Cada uno de los monstruos estaba dispuesto a dar su vida para proteger a su amo.

-Como ya sabrán, por la noche llegarán algunos humanos a Tempest, si bien los humanos no son un peligro para nosotros, cuando vienen en grandes cantidades se vuelve muy molesto. No estoy seguro de cuantos vendrán, pero será un problema si son demasiados de ellos -suspira- Bueno ustedes no se preocupen por eso, estoy pensando en colocar una barrera en Tempest para protegerlos a todos

-Espere Rimuru-sama, eso significa que usted... -interrumpe Shuna preocupada-

-Si! Pienso ir por mi cuenta -toma una papita de la mesa y la come- Ñam... Sin objeciones.

-Rimuru-sama! No podemos permitir que usted se arriesgue de esa forma! -se levanta Rigurd-

-Si! Dejeme ir con usted! -exclama Benimaru-

-Tambien quiero ir~su! -dice Gobuta-

-Es muy necesario que yo vaya! protegeré a Rimuru-sama! -grita Shion emocionada-

-Sere quien protega a Rimuru-sama con mi vida! -comenta Souei-

-Rimuru-sama, permita que al menos yo vaya con usted -dice Diablo-

-No puede ir solo, nosotros seremos su escudo! -se levanta Gerudo-

-El gran yo se encargara de los humanos por usted Rimuru-sama -exclama Gabiru orgulloso-

-Fufufu Esos tontos humanos no saben con quien se están metiendo... No servirán ni como juguetes -comenta Milim- 

-Rimuru! No hay forma de que permita que vayas solo! Iré contigo! -se acerca Veldora preocupado-

-Milim? Veldora?... Cuándo siquiera ustedes...? -suspira agotado- Bueno no importa, no insistan, ninguno de ustedes irá conmigo, me encargaré de esto por mi cuenta y todos deberán quedarse dentro de la barrera, es un orden! -se levanta Rimuru golpeando la mesa con el puño-

-No!... Porqué eres tan necio?! -exclama Veldora enojado- Quieras o no, yo iré contigo!

-Yo igual! Déjame jugar con algunos humanos! Prometo no matarlos mucho, solo un poco -dice Milim con una sonrisa brillante-

-Dije que no! Es mi última palabra! Ahora todos... Vayan a sus casas y se quedarán ahí hasta que regrese, entendido? -se sienta Rimuru irritado-

-Sí, como desee Rimuru-sama! -responden todos los monstruos al unísono-

Con excepción de Veldora y Milim, todos los monstruos aceptaron la desición de su amo, después de todo no podían oponerse a sus órdenes. Se retiraron del lugar, quedando solo Rimuru y los mencionados.

-Iré! -se sienta Veldora-

-Creo que fui muy claro cuando dije que iré solo... -responde Rimuru-

-No pienso dejarte ir solo!! Sé que puedes con ellos!!... Pero aún así!! Cómo puedo dejar ir a la persona que a...?!! -se da cuenta y se sonroja-

-Veldora?... -lo mira Rimuru confundido-

-Como puedo dejar ir a mi amigo solo!! -grita con la cara muy roja-

-Sí, no te dejaremos ir solo -rie Milim- Veldora es un debilucho, tendré que ir contigo también!

-Milim, puedes dejarnos solos un momento? -la mira Veldora-

-Eh? Pero... Yo tambien... -deprimida-

-Porfavor... -sonrie Veldora-

-Bien! - se va enojada-

Al quedar los dos solos, Veldora se acerca a Rimuru y toma sus manos.
Rimuru quedó muy sorprendido por la acción de Veldora.

-Veldora?...

-Deja que vaya contigo sí? -lo mira fijamente-

-Puedo hacer esto por mi cuenta, no es necesario. Además no quiero que nadie vaya, así ninguno se sentirá mal por no ir -sonrie- Entiendes no?

-No, no puedo entenderlo! Como puedes ser tan necio?! -irritado- No quiero dejarte ir solo. Iré contigo! Si llegas a necesitar ayuda quiero estar ahí! -aprieta sus manos-

-Colocaré la barrera en Tempest y te quedarás dentro, entendido?! -se suelta- Es mi última palabra -desaparece-

-Rimuru! -grita furioso- Ahh!! Maldición!!

...

Ya estaba oscureciendo.
Rimuru hizo aparecer una barrera en Tempest, dejando a todos encerrados ahí, eso sin antes alejarse lo suficiente como para poder encontrarse con los humanos antes de que llegarán.

-Mis habilidades han mejorado mucho últimamente, estoy seguro de que será muy díficil que salgan de ahí,  nadie podrá entrar o salir, así estarán protegidos -sonrie Rimuru observando la barrera sobre Tempest- Ahh... Tengo un mal presentimiento...

Rimuru se alejaba de Tempest, sentía que algo no estaba bien, hace mucho no sentía... miedo.

¡Si no me amas...!(RimuruxVeldora)  [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora