Era de mañana, y con Flint llegábamos a la plaza de la ciudadela, era muy agradable el lugar, pero al entrar, la gente comenzó a pisar pi cabello, algo que me molestó.
Era de mañana, y con el Kevin estábamos llegando ahí como ñeris a la ciudadela vieja de Colonia. Todos estaban hablando ahí re kzual y había una pareja cogiendose atrás de un árbol, jeeee, era mejor de lo que me imaginé wacho. Cuando me metí ahí adentro en modo skere, me empezaron a pisar los pelos, me re queme y echa un palo los empezé a putear a todos
Estaba juntando mis cabellos para evitar que me siguieran pisando, cuando Flint -el cual me estaba ayudando- llamó a unas niñas que se estaban haciendo trenzas. Las niñas giraron su cabeza y se emocionaron al ver la cantidad de cabello que podrían trenzar, y con toda la voluntad y felicidad del mundo se levantaron a ayudarme.
Estaba levantándome los pelos de india que tengo, mientras le gritaba al Brian por no ayudarme, el pelotudo hijo de puta les ofreció unos caramelos a unas gurisas que andaban por ahí, y ellas les dijeron que no agarraban caramelos que los viejos hechos mierda les daban, el Kevin se enojó y les dijo que el escuchaba música billera de barrio Cerro, y se pusieron a escuchar reggaeton. Me peiné yo sola
Unas horas después, ya había echo unas cuantas cosas agradables; había pintando la calle, habíamos bailado una canción muy bonita, caminos mofins, compré una bandana con un sol, tal parece que es el símbolo de este reino... Pero había un mural, que tenía una bebé y sus padres que aparentemente eran los reyes y buscaban a su hija... Los ojos de la bebé... Se parecían a los míos...
Un buen rato después, ya había ido presa, por pintar propiedad privada. Valió kinotos porque el Kevin le robó un celular a una vieja y con eso me pagó la fianza. Después nos pusimos a perrear hasta el piso con la música billera y de una me tiraron un tema de los negroni re, alto modo turra me tiré. Después nos robanos unas tortas fritas que vendía una tipa ahí y nos quedamos otro rato ahí. Después pasamos por adelante de un mural, la pelotuda que estaba en el mural ese tenía los pelos re negros y re largos re parecidos a los míos, y tenía unos ojos ahí de india re marrones casi negros. Wacho, ¿te imaginas que yo era esa mina?