-Aquí estás. Por fin te encuentro. No sabes cómo te he buscado. ¿Ya viste? La estúpida de tu madre ha muerto... Creo que... La maté de tanto golpe...-Dijo Jeff fingiéndose inocente.
Sallieri, con los ojos como platos, sólo lo miraba con miedo, con asco, como la escoria de "hombre" que es.
-¿Qué? ¿No me dirás nada?
-Te-Odio.
Él hombre malvado la miró con rabia, la jaló del cabello tirándola a la cama. Vio sus maletas y soltó una ligera sonrisa.
-¿Pensabas ir a alguna parte? Lo siento, perdiste tu oportunidad.-Le escupió y se empezó a quitar el cinturón.
Sallieri tomó aire, y sin pensar, lanzó una patada a Jeff. Él sólo cayó al piso. No iba a desaprovechar esa oportunidad, y mientras Jeff se intentaba recuperar, ella corrió hasta la entrada, casi se resbalaba en las escaleras y comenzó a escuchar los gritos y pasos de Jeff.
-¡NUNCA VAS A ESCAPAR DE MI!
Antes de que se diera cuenta estaba en la puerta de entrada, la abrió, dio una última mirada a aquella casa y salió.
Corrió lo más que pudo hasta la casa de Katherine. Al llegar, tocó la puerta con desesperación, tenía la respiración acelerada, sentía que Jeff la iba a alcanzar.
La puerta se abrió. Miró a la Señora Priestley, con los ojos llorosos. Vestida de negro.
¿Qué había pasado ahora?
"Katherine".
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Life Always Has Two Sides
Novela Juvenil"Cada Quien Vive A Su Manera, A sí, Que Cada Quien Tiene Su Propia Muerte" Despiertas, nada es igual, tu cuarto se ve asqueroso, tus manos se ven sucias, tocas tu cabello y se siente grasoso. La forma en que ves las cosas cambia. Tu lugar, tu guarid...