51. Tú, de nuevo

49 1 0
                                    

—¿C-cómo has hecho eso? – Preguntó Tyler, titubeando y casi perdiendo los nervios en frente de Harry.

—No hacen falta grandes estudios para hacer una foto. – Contestó Styles.

El hombre soltó todo el aire que sus pulmones le permitieron.

—Venís de parte de Robert, ¿no es así? Él os ha obligado a que consigáis la foto.

—¿Qué sabes de Robert? – Preguntó Harry, sorprendido.

—Estuve investigando sobre él cuando me llamó queriendo negociar. Como comenté antes a Abbie, estoy empezando a llevar la empresa, necesito que mis aliados sean de confianza. Buscando encontré que él era policía. Y, entonces, entendí que sólo querría las coordenadas y que tan solo usaría a Abbie para que yo cayese en sus brazos y después le diese la foto. Ágil por su parte.

Harry y yo nos miramos sorprendidos. El hombre había hecho un trabajo con el que nosotros no contamos en ningún momento.

—Está bien, Tyler. Has sido muy ingenioso averiguando que Abbie venía a por las coordenadas, pero esto aún puede quedar entre nosotros tres. Tú nos llevas hasta la casa de tu primo y yo borro la foto.

—¿Y Robert dónde sale del plan? – Preguntó Tyler.

—Robert en ningún momento ha entrado en mi plan. Trabajo junto a él pero nuestro objetivo es diferente. No puedo explicarte el por qué, por eso lo único que te queda es confiar en mí.

Tyler me miró, quizás porque yo era la única que de cierta manera le transmitía confianza.

Asentí con la cabeza y el hombre tomó de nuevo aire.

—No sabes lo importante que es la foto de las coordenadas para nuestra familia, ¿verdad? – Preguntó de nuevo Tyler.

—Espero que no lo sea más que tu mujer e hijos, porque en cuanto enseñe esa foto con Abbie a tu esposa tendrás las maletas en la calle. – Añadió Harry.

—De veras que yo no quiero entrar en esto, ¿acaso no os habéis dado cuenta? – Insistía Tyler. – Simplemente era una cena de negocios.

—¡Oh, vamos, Tyler! – Exclamó Harry. - Tú mismo dijiste que sabías que Robert era policía. Sabías que no venías a negociar con Abbie.

El señor Johnson bajó la mirada y cerró los ojos, quizás sintiéndose culpable y sabiendo que lo que decía Harry era cierto.

—Si prometéis dejarme al margen de esto y no enseñar esa foto a mi mujer, os llevaré a casa de mi primo. – Dijo Tyler al fin, cediendo. – Pero luego desapareceré. No quiero tener nada que ver con vosotros.

—Hecho. – Dijo Harry.

—¿Y Robert? – Pregunté.

Harry me miró, pensativo.

—El plan debe de seguir. Tyler y tú iréis juntos a casa de su primo. Yo os seguiré en mi coche. Tú debes hacer todo lo que habíamos planeado, Abbie. ¿Entiendes?

Asentí con cuidado.

(...)

Los tres atravesábamos el restaurante, entre las mesas y personas que estaban ocupando el lugar tan lujoso.

Tyler iba delante de nosotros dos, quienes compartíamos la situación.

—¿Cómo has conseguido entrar sin que Robert te lo impidiese? – Pregunté a Styles.

—Le conozco de sobra. Le dije que necesitaba ir al baño y que de paso os vigilaría.

—Has aparecido en el momento justo. Los argumentos de Tyler estaban desvaneciendo los míos.

WHISPERS - Harry StylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora